Es la última polémica en relación a la banca y al servicio que prestan a sus clientes mayores: la retirada y desaparición de las tradicionales libretas o cartillas de ahorro en favor de los medios digitales. El sector financiero no quiere una nueva crisis de reputación y las principales patronales bancarias han respondido con rapidez que las libretas seguirán existiendo, al menos para los sénior.
La realidad con la que se encuentran los mayores es muy diferente. 65YMÁS ha preguntado a todas y cada una de las entidades por esta –y otras cuestiones relacionadas con sus servicios a los mayores-. Con las respuestas de las propias entidades y el análisis de las organizaciones de consumidores, comprobamos que las restricciones son reales y que el uso de las cartillas varía mucho en función del banco. Abanca encabeza el triste pódium de las entidades que peor lo está haciendo.
Libretas de ahorro de Abanca: especie en extinción
“Abanca mantiene el soporte libreta para todos los clientes que lo venían utilizando” asegura a 65YMÁS la entidad. Es decir, mantiene la libreta para aquellos clientes que ya la tenían previamente. Y la contratación de nuevas libretas está cerrada. No obstante, la entidad gallega introduce una excepción con criterio de edad. “En el caso de nuevas cuentas las libretas se entregan siempre y cuando el titular sea mayor de 70 años”, nos explica Abanca. Esto supone no cumplir con el compromiso manifestado por la propia presidenta de la Asociación Española Bancaria (AEB), Alejandra Kindelán: “Todas las entidades nos están diciendo que se va a mantener la cartilla para los mayores de 65 años”. Como vemos, todas las entidades, no.
Junto a Abanca, tan solo hay otra entidad financiera que tenga cerrada la contratación de nuevas libretas, más allá de las que ya tienen abiertas, y es Banco Santander.
No obstante, Abanca suma un criterio más que restringe el uso de la libreta o cartilla. No puede estar asociada a una cuenta corriente normal, que es la que manejan muchos mayores, como las cuentas nómina o cuentas pensión. “Las libretas pueden asociarse a las cuentas de ahorro siempre que el cliente tenga al menos 70 años. En ese caso, ABANCA no cobra ningún tipo de comisión adicional por su emisión, renovación o mantenimiento”. En general, las cuentas de ahorro suelen presentar desventajas respecto a una cuenta corriente, como que no permiten el descubierto o exigen montos mínimos de saldo.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) señaló en un reciente análisis sobre exclusión financiera a Abanca como una de las “18 entidades bancarias con una red de oficinas físicas que ya no emiten libretas, lo que impide el correcto control de los movimientos y saldo bancario de aquellas personas sin capacidad para acceder a la banca digital”. Esta cuestión genera una diferencia muy importante entre entidades.
Casi un 93% de sus clientes mayores no puede usar la libreta
Pese a no ser cierto que la entidad haya dejado de emitir por completo libretas, que se mantienen de forma residual, sí que es verdad que sus clientes tienen serias dificultades para usarlas. Según el estudio ‘Cumplimiento del Decálogo para una atención personalizada al mayor’ elaborado por Asufin, la Asociación de Usuarios Financieros (@Asufin_), para monitorizar el cumplimiento de los compromisos de la banca hace ahora un año, a través de una encuesta realizada a 1.035 personas, las restricciones para usar la libreta de ahorros en los últimos años son cada vez mayores.
De manera global, Asufín ha detectado que solo casi 6 de cada 10 clientes mayores (59,10%) declara seguir usando la cartilla o libreta de ahorro, uno de los instrumentos que, según la asociación “vehicula la operativa de muchos mayores para gestionar sus ingresos y gastos, pudiendo acceder a ellos con su actualización sin utilizar medios digitales”.
No obstante, “esta cuestión genera una diferencia muy importante entre entidades”, dice la organización presidida por Patricia Suárez. Y Abanca es la que peor sale parada en la foto fija de este estudio elaborado a partir de la voz de clientes reales. Tan solo un 7,30% de los clientes mayores de la entidad gallega pueden seguir usando la cartilla o libreta de ahorros como lo venían haciendo hasta ahora.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.