Los mayores y los habitantes de pueblos, las grandes víctimas del cierre de oficinas de la banca
La patronal de la banca responde a los cierres de oficinas: "La digitalización es imparable"
Crecen la irritación y la frustración de los clientes con sus bancos
El banco gallego Abanca (@SomosABANCA) negocia ya con los sindicatos un plan de ajuste para prescindir de al menos 250 trabajadores que conllevaría además la clausura de en torno a 50 oficinas comerciales y que, presumiblemente, impactaría sobre todo en la plantilla de mayor edad y en el personal de los servicios centrales de Madrid. Según confirman a 65Ymás fuentes del sindicato CCOO, "estamos todavía en una fase muy inicial de las negociaciones, pero la intención de las dos partes es que las salidas que se produzcan se realicen mediante bajas incentivadas, voluntarias, sin tener que recurrir a despidos forzosos. Dentro de las negociaciones también entran temas de movilidad geográfica y posibles cambios de condiciones para los trabajadores que continúen en la empresa".
La cifra de 250 bajas es la que ha puesto sobre la mesa Abanca, pero podría ser mayor si así lo acordaran las partes, ya que aunque los destinatarios preferentes de las bajas indemnizadas son los empleados sénior, "también se pueden acoger a ellas miembros de la plantilla de varios rangos de edades", explican desde CCOO, que ponen de relieve que el grueso del ajuste laboral se produciría debido al cierre de la sede de Banco Caixa Geral (BCG) en Madrid, donde en la actualidad trabajan unas 100 personas, que en caso de seguir en Abanca, deberían aceptar traslados.
Juan Carlos Escotet (presidente) y Francisco Botas (CEO), de Abanca.
Abanca se sube así al carro de otras entidades financieras y grandes empresas, que en los últimos meses han reducido sus plantillas de manera rápida mediante planes negociados, dirigidos a los trabajadores sénior e incluso a los empleados desde los 53 años de edad. En algunos casos, esos despidos consensuados se han efectuado para eliminar duplicidades como resultado de procesos de compra (por ejemplo, el Santander tras adquirir el Popular, o Bankia después de hacerse con BMN).
Abanca tiene beneficios multimillonarios
Abanca, presidida por Juan Carlos Escotet y cuyo consejero delegado es Francisco Botas Ratera, ha justificado este plan de reducción de plantilla por el solapamiento y las duplicidades que se generan tras haber comprado e integrado a la portuguesa Caixa Geral, cuya adquisición se produjo el pasado mes de octubre. Su objetivo es llegar a bajas voluntarias, tanto de personal de Abanca como de Caixa Geral.
Fuente: Abanca. Informe financiero 2019
Tanto empresa como sindicatos confían en llegar a acuerdos "no traumáticos", según fuentes sindicales, habida cuenta de que Abanca registra beneficios multimillonarios, está repartiendo dividendos, ha comprado recientemente el 95% del banco portugués EuroBic (su segunda adquisición en el país vecino, tras la de Caixa Geral) y ha tomado el control del Club Deportivo La Coruña convirtiéndose en el mayor accionista del equipo.
En el año 2019, Abanca obtuvo un benecio neto de 405 millones de euros, en "un año récord" según la propia entidad. Su volumen de negocio ronda los 85.000 millones de euros, que serán 100.000 millones tras la integración del EuroBic.
Problemas de imagen por su proyecto de universidad privada
A comienzos de febrero pasado, cientos de personas se manifestaron en todos los campus gallegos contra el proyecto de Abanca de impulsar la primera universidad privada de Galicia. Esta nueva institución académica provoca amplios recelos entre la comunidad de rectores de Santiago, Coruña y Vigo; este último reclama que la Intercontinental no compita con las universidades públicas en titulaciones.
Protesta de la Plataforma en defensa de la universidad pública de Santiago.
Según informa Europa Press, la universidad de Abanca tendría su sede administrativa en Santiago, se llamaría Intercontinental de la Empresa (UIE) y poseería campus en Vigo y en Coruña. Los estudios se impartirían en los actuales centros del Instituto de Educación Superior Internacional de Empresa (IESIDE @IESIDEedu), la escuela de negocios del banco heredero de las cajas de ahorro, adscrita a la Universidad de Vigo.
Un sector afectado por la sangría de empleos y el cierre de oficinas
Según datos extraídos del Observatorio Financiero del Consejo General de Economistas (@EconomistasOrg), en los últimos diez años se han cerrado en torno a 18.607 sucursales en España, desde las 44.362 existentes en 2009 hasta las 25.755 contabilizadas a finales del primer trimestre de 2019. Esto significa que la banca ha suprimido en torno al 42% de sus sedes comerciales durante la última década.
Las razones de este apresurado cierre de sucursales hay que buscarlas en el afán de los bancos por recortar costes, para asegurar su rentabilidad y mantener su margen, y así tener satisfechos a sus accionistas, en un clima en el que la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE @ecb) va a mantener los actuales tipos de interés en mínimos.
Esta sangría de puestos de trabajo amortizados en el sector financiero y de cierre de oficinas bancarias en todo el país, ha hecho que, en total, las entidades de depósito españolas cerraran 553 sucursales en el tercer trimestre de 2019, hasta situar la red en 24.855, según las estadísticas del Banco de España. Mientras que en 2018 se suprimieron 1.309 oficinas, entre enero y septiembre del pasado año se cerraron 1.156, siendo especialmente intenso el tercer trimestre, a razón de seis clausuras por día. Por ejemplo, Santander completó el pasado noviembre el cierre de 1.128 sucursales, debido a la integración del Popular.