Los mayores, sobre el acuerdo entre banca y Correos: positivo, pero con interrogantes

El sector bancario presentaba recientemente un informe sobre exclusión financiera, elaborado por Joaquín Maudos, catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Valencia y director adjunto del Instituto Valenciano de Investigación Económica (Ivie), en el que se contabilizaba que en torno a 657.500 personas (1,4% de la población española) no tienen ningún punto de acceso a servicios bancarios en su municipio, concentrándose en 3.230 localidades.

Se trata de un problema de exclusión financiera al que la Asociación Española de Banca (AEB), la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (Unacc), con la ayuda de Correos, pretenden dar solución con un acuerdo para llevar dinero en efectivo a las zonas rurales, en concreto a esos municipios que carecen de acceso a los servicios financieros.

Este acuerdo, con el que se ha mostrado la intención de hacer llegar los servicios bancarios básicos al 100% de los ciudadanos españoles, ha sido considerado por la presidenta de la AEB, Alejandra Kindelán, como "un paso significativo" para dar respuesta a las demandas de aquellos que viven en pequeños municipios, así como de quienes "están más alejados de la realidad tecnológica”. 

Las diferentes asociaciones de mayores consultadas por 65YMÁS valoran positivamente el acuerdo, aunque al mismo tiempo les genera dudas en algunos aspectos, sobre todo por el hecho de que tengan que ser los carteros rurales los encargados de llevar el dinero en efectivo a los municipios, lo que va a requerir de más personal, pues en algunos pueblos solo pasan una vez cada 15 días.

La firma de este acuerdo, que se enmarca en el compromiso de las patronales de banca por favorecer la inclusión financiera de toda la población española, se ha producido este miércoles entre las asociaciones de banca y Correos en un acto que ha contado con la participación de la presidenta de la AEB, Alejandra Kindelán; el director general de CECA, José María Méndez Álvarez-Cedrón; el presidente de Unacc, Manuel Ruiz Escudero, y el presidente de Correos, Juan Manuel Serrano Quintana.

 

 

Tal y como han asegurado durante la rueda de prensa, aspiran a que todos los ciudadanos, independientemente de su lugar de residencia, tengan acceso al efectivo con el menor desplazamiento posible. Para ello, Correos ha puesto a disposición del sector bancario su "amplia red de oficinas y puntos de atención", así como sus "6.000 carteros rurales". De esta forma, todos los ciudadanos y ciudadanas tendrán la posibilidad de acceder a los servicios de Correos Cash, que incluyen la retirada e ingreso de efectivo en los 4.675 puntos de atención de la compañía logística, entre ellos más de 2.300 oficinas y otros 2.282 servicios rurales, "garantizando el servicio público a todos y contribuyendo a la cohesión territorial y al desarrollo económico de personas y empresas, especialmente en el ámbito rural”, señalaba Juan Manuel Serrano. 

Así, los firmantes del acuerdo detallaban que con estos carteros rurales, que disponen de dispositivos electrónicos (PDA’S), los usuarios podrán acceder al dinero en efectivo, así como realizar otras gestiones, en la puerta de su casa, aprovechando la visita del cartero, que además ofrecerá atención personal sin necesidad de que el cliente de la entidad disponga de medios ni conocimientos tecnológicos.

Jose María Méndez añadía que este convenio "complementa las vías de acceso a efectivo, alcanzando a esas 600.000 personas que quedan fuera los puntos de acceso ya existentes", a través de un "servicio universal, como es el postal". "Es una acción innovadora inmersa en la respuesta global que desde el sector bancario estamos dando al problema de la despoblación que afecta a la provisión de todo tipo se servicios", añadía. 

"En algunos pueblos el cartero pasa cada 15 días"

Sin embargo, las asociaciones consultadas por este diario señalan algunos problemas que podrían surgir de este acuerdo. "No me parece mal, todo lo que sean propuestas para ayudar a la gente está bien", aclara Inmaculada Ruiz, presidenta de la Unión Democrática de Pensionistas (UDP), aunque no lo considera como "una solución total", sino más como "un parche". "Habrá que ver cómo resulta en los pueblos, porque si la banca realmente va a funcionar así bien o no. Soy escéptica", explica a 65YMÁS. 

Inmaculada Ruiz habla desde la experiencia de vivir en un pueblo, donde, según nos cuenta, en algunos de ellos el cartero viene "una vez cada 15 días, o quizás una vez al mes". "Es decir, no lo ves apenas nada. Si va a ser así también con la banca, será otro problema", reflexiona.  En su opinión, la solución pasaría por poner "más personal en Correos", ya que esta medida también supondrá "una carga para el cartero". "Otro problema será cuánto dinero podrá llevar el cartero en efectivo y cómo hará frente a las necesidades de cada persona". En cualquier caso, señala que es algo que "llevará tiempo". 

 

 

Mientras, Vicente Pérez, director de la Confederación Estatal de Mayores Activos (Confemac), considera que "de entrada suena bien, sobre todo al saber que no será necesario ningún trámite digital". "Me parece muy interesante porque agiliza y acerca el servicio de manera eficiente y de forma que lo pueden entender todas las personas que pudieran tener dificultad con un cajero automático. Lo que habrá que ver es cómo tendrá que realizarse la solicitud, esa es la clave", añade. 

Por su parte, el presidente de la Asociación Grupo de Mayores de Telefónica, Santiago G. Carrero, ve como una "buena noticia que tanto la Administración Pública como las empresas de servicios empiecen a tener en cuenta las dificultades de mucha gente a las que se les está dejando fuera de los circuitos de atención ciudadana para los más elementales servicios, como son los de facilidad de acceso y disposición de su dinero".

Desde la Federació d'Associacions de Gent Gran de Catalunya (Fatec), su presidente Josep Carné i Teixidó, también comenta que si esta respuesta da solución al problema actual, "perfecto y bienvenido sea". Aunque critica que "un problema de la banca, que en este caso es una entidad privada, tenga que resolverse a través de administraciones públicas". "Esto es lo que me molesta del servicio, no el servicio como tal", aclara. Igualmente, alude al método de actuación de los carteros para que se haga "de forma segura y eficiente. Lo veo complicado", concluye.