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Si se sufre un uso indebido de tu tarjeta de crédito, por robo o pérdida, o porque un ciberdelincuente la ha duplicado o se ha hecho con tus datos, debe reclamar la devolución del importe que te han cobrado sin tu autorización. La devolución debería ser inmediata, pero la realidad es que no es así, advierte la Organización de Consumidores y Usuario (OCU).
Las entidades tardan más de lo que deben. El uso fraudulento de las tarjetas de pago sigue siendo una realidad: al clásico robo o pérdida de la tarjeta se han sumado otros tipos de fraude que a veces son más difíciles de notar, la copia o duplicado o directamente el robo por parte de los delincuentes de los datos de tarjetas de los servidores de los comercios o plataformas de pago donde se almacenan. Estos fraudes on line con las tarjetas están a la orden del día, y el resultado es que los delincuentes hacen cargos no autorizados en su tarjeta.
En el momento en que se de cuenta de que se ha hecho un cargo que no ha autorizado, debe bloquear la tarjeta, denunciar el hecho en la policía y reclamar a la entidad, pidiendo la devolución del dinero indebidamente cargado, algo a lo que tiene derecho.
La devolución debería ser al día siguiente
La normativa establece que, una vez notificado el hecho a la entidad, se debe devolver el importe de la operación no autorizada de inmediato, a más tardar al final del día hábil siguiente a la notificación.
Es decir, una vez que el consumidor comunica al emisor de la tarjeta la existencia de cargos no autorizados, e independientemente de que posteriormente la entidad realice todos los trámites y comprobaciones que considere necesarios, al usuario se le deberían devolver inmediatamente las cantidades que excedan de 50 euros en el caso de robo, perdida o apropiación indebida de la tarjeta y la totalidad del importe en el resto de casos.
La única excepción para no devolver el dinero al usuario de manera prácticamente inmediata es que se sospeche que el titular de la tarjeta haya cometido un fraude, pero para ello debe tener motivos razonados y comunicarlos por escrito al Banco de España.
En la práctica toca esperar
Sin embargo, pese a que el banco debe devolver el dinero al final del día hábil siguiente a la notificación, en muchos casos esto no se cumple: OCU ha comprobado que es casi imposible que un consumidor consiga la devolución de los pagos no autorizados al día siguiente de notificarlo. ¿Por qué? Entre otras cosas, porque aunque la norma no obliga a ello, las entidades suelen exigir:
- Presentar un formulario para solicitar la devolución.
- Aportar como mínimo una copia de la denuncia presentada ante la policía o la guardia civil.
Y después hacen sus comprobaciones, con lo que la devolución del dinero cobrado indebidamente suele dilatarse. Se recupera, pero con retraso.
Desde OCU han denunciado esta situación y van a pedir al Banco de España que inspeccione las condiciones y plazos que aplican las entidades financieras en las reclamaciones por el uso fraudulento de tarjetas.