Carlos Blanco Cocho
Economía
¿Cómo negociar la mejor hipoteca posible?
Existen varios trucos para obtener el mejor acuerdo posible en lo que se refiere a la hipoteca
La subida meteórica del euríbor en los últimos meses ha provocado un histórico encarecimiento de las hipotecas —tanto fijas, mixtas como variables— ya que su precio se define en relación a este índice, y desde que se disparó muchos bolsillos ya no pueden acceder a ellas. En resumen, el indicador ha subido más de 3,30 puntos porcentuales en los últimos 12 meses y la media de noviembre ha superado el 2,8% y, según los expertos de HelpMyCash está a nada de llegar al 3%, así que hoy más que nunca es importante aprender a negociar la contratación de una hipoteca para conseguir la mejor del mercado.
Sin embargo, ¿de verdad es tan fácil negociar una hipoteca?, ¿cualquiera está en posición de regatear con una entidad? “Lo cierto es que la capacidad de negociación depende directamente del perfil financiero de cada persona, de la posibilidad de explotar sus puntos fuertes y del conocimiento mínimo que tenga del mercado”, indican desde el comparador financiero.
Antes de pisar las sucursales de un banco y preguntar por la oferta hipotecaria, los expertos recomiendan hacer un estudio detallado de su perfil financiero. “Teniendo en cuenta que la regla básica para que el banco conceda una hipoteca es que el futuro propietario demuestre que será capaz de devolver el préstamo, se debe tener claro el escenario sobre el que se está de pie. Evaluar las finanzas permite que el cliente sepa si su perfil es atractivo y seguro y entonces, tenga la capacidad de negociar”, subraya Olivia Feldman, cofundadora de HelpMyCash.com
Perfila tu situación económica
Hay que llegar al banco con los deberes hechos. Para los especialistas del comparador financiero es elemental tener preparada la siguiente documentación: las nóminas —al menos de los últimos tres meses—, el informe de vida laboral que facilita la seguridad social, así como los extractos bancarios de las cuentas que posea de los 3 o 6 últimos meses y el IRPF del año anterior. “Estos requisitos son los básicos, pero cambiarán si tienes otras hipotecas, propiedades, inversiones, o si eres autónomo. En este último caso te conviene, entre otras cosas, tener a mano los modelos en los que reportas el IVA”, añaden.
“Quien pide una hipoteca debe generar unos ingresos que le permitan asumir una cuota que idealmente no supere el 30% de su sueldo mensual. Además, el tipo de contrato y la antigüedad en la empresa en el momento de solicitar la hipoteca también influyen en la decisión. Un profesional con contrato indefinido ofrece al banco mayores garantías que uno con contrato temporal”, explica Feldman. En este sentido, la experta destaca que igual de crucial es no tener demasiadas deudas. Mientras más limpio esté el historial crediticio mejor. “La entidad bancaria tomará en cuenta si el futuro propietario está pagando otros préstamos y que el nivel de endeudamiento personal previo no supere el 15% de los ingresos anuales que genera”, señala Feldman.
Antes de pedir una hipoteca, hay que hacer una radiografía de tu situación económicaTomando todo esto en cuenta, el interesado en una hipoteca podrá hacer una radiografía de su situación económica. “Si el perfil es bueno y cumple con los requisitos mínimos que exigen los bancos, entonces se podrá empezar la estrategia de negociación. Negociar es conquistar, es venderse como un cliente perfecto. Se tiene que ser capaz de destacar todo lo bueno de tu perfil y demostrar que no solo se podrán pagar las cuotas, sino que además se puede aportar rentabilidad a la entidad. Allí está el secreto. Si, además de tener un trabajo estable y con ingresos buenos se tienen ahorros, tienes un as bajo la manga, porque el banco no solo te verá como un prestatario, también te verá como un posible inversor de sus fondos de inversión, de sus planes de pensión, o seguros…”, añade Feldman.
Para los que tienen dudas acerca de su perfil y no saben si su perfil es o no, desde HelpMyCash recomiendan buscar un intermediario, conocidos como brókers hipotecarios, que ayuden y guíen al cliente. “Ellos tienen acceso a toda la oferta hipotecaria y seguramente podrán encontrar hipotecas atractivas y que se ajusten al perfil de cada cliente”, sugieren los expertos.
Define qué buscas
Hay que tomarse el tiempo de entender el panorama actual para definir qué tipo de hipoteca se puede permitir. “No es lo mismo negociar una hipoteca fija, que una variable o una mixta. Las características son distintas. Nuestro consejo es que los clientes hagan un listado con las especificaciones que buscan. No está de más perfilar cómo sería su hipoteca perfecta. Para esto, los clientes pueden revisar las ofertas de comparadores, como HelpMyCash, y enterarse de la oferta media que tienen las entidades. De esta forma cuando acudan a los bancos sabrán qué pedir exactamente o bien qué preguntas hacerle.
Como por ejemplo, ¿por qué me recomiendas la hipoteca variable y no la mixta que sé que tenéis?”, explican desde HelpMyCash.com
Una vez se tenga el perfil financiero claro y se haya establecido qué tipo de hipoteca se busca, entonces será el momento de acudir a por lo menos tres entidades y buscar quién tiene la mejor oferta. Negociar será más sencillo si se conocen desde el comienzo los puntos fuertes del solicitante. “Nosotros recomendamos, siempre que sea posible, pedir una cita con el o la directora de la agencia. Suele ser la persona qué más conoce los productos y quién tiene más poder —argumentos— para convencer al departamento de riesgos que un cliente tiene un perfil confiable, bueno y rentable y así mejorar las condiciones de la hipoteca”, sugieren desde HelpMyCash.com