Los temores a un corte de gas por parte de Rusia están llevando a Bruselas a tomar medidas inimaginables hasta hace apenas un año. La Comisión Europea acaba de proponer que los países de la Unión Europea recorten un 15% el consumo de gas de forma voluntaria hasta la próxima primavera, una reducción que Bruselas quiere poder imponer de forma obligatoria en caso de alerta de la seguridad de suministro, como parte del Plan Europeo de Contención de la Demanda de Gas presentado este miércoles en Bruselas. Lo hace un día antes de que se conozca si el gaseoducto Nord Stream, que trae gas de Rusia a Europa, continuará sus operaciones tras el parón para su mantenimiento.
Ante la previsión de posibles movimientos por parte de Rusia, el Ejecutivo comunitario ha planteado una nueva regulación por la que la Comisión Europea podría declarar la alerta de la seguridad del suministro de gas e imponer reducciones obligatorias en el consumo de gas, previa consulta con los Estados miembro. Esta alerta se declararía en caso de que exista un riesgo de escasez de gas o una demanda excepcionalmente alta.
El gas como arma de guerra
"Rusia nos está chantajeando, Rusia está usando la energía como arma. Por eso, sean parciales o totales los cortes, Europa necesita estar preparada", ha proclamado la jefa del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, en una rueda de prensa para presentar los detalles de su propuesta para un plan europeo de reducción de demanda de gas bautizado como 'Ahorrar gas para un invierno seguro'.
La política alemana ha apelado también a la "solidaridad" para ayudar a los países "más vulnerables" por los cortes de gas y defendido la importancia de que "todos contribuyan al ahorro" de gas en el marco de un plan que puede plantear reservas para países como España y Portugal que no dependen del combustible ruso.
Reducción del consumo de agosto a marzo
La propuesta de Bruselas establece un objetivo de reducción del consumo de gas del 15% en todos los países de la UE desde el 1 de agosto del presente ejercicio hasta el 31 de marzo del próximo año e implicará que administraciones públicas, hogares, propietarios de edificios públicos, proveedores de energía y la industria deberán tomar medidas para ahorrar gas.
Además, los Estados miembro deberán actualizar sus planes de emergencia antes de finales de septiembre, con medidas para cumplir el objetivo del 15% de reducción de consumo de gas, un hito del que deberán informar al Ejecutivo comunitario cada dos meses. Aquellos países de la UE que soliciten el suministro de gas solidario deberán demostrar que han tomado las medidas necesarias para reducir la demanda en su mercado interno.
Como parte del plan Europeo de Reducción de Demanda de Gas, el Ejecutivo comunitario ha planteado criterios para proceder a la reducción coordinada de la demanda de gas que pasa por sustituir el gas por otros combustibles fósiles así como medidas de ahorro energético en todos los sectores.
Medidas de ahorro para los consumidores
La propuesta contempla medidas de ahorro en hogares y edificios públicos, compensaciones para las empresas que reduzcan su consumo e incentivos para que las industrias que puedan cambien de combustible de cara a tomar medidas para llegar con reservas de gas suficientes para el próximo invierno.
- Limitar la temperatura de los hogares: Para ello, la Comisión propone limitar la temperatura mínima al enfriar o máxima al calentar los edificios públicos, oficinas o edificios comerciales, así como hacer campañas para que los hogares bajen el termostato un grado centígrado.
- Consumidores industriales: En cuanto a los consumidores industriales, plantea que sustituyan el gas por otro combustible cuando sea posible y recuerda que las normas europeas permiten dar ayudas públicas para realizar este cambio, sobre todo, en sectores de importancia crítica.
- Otros combustibles: Asimismo, señala que el combustible alternativo podría ser más o menos contaminante que el gas y apunta, en este sentido, que las reglas sobre emisiones permiten derogar temporalmente el tope a las mismas si es necesario para mantener el suministro.
- Posibles compensaciones a empresas: La Comisión contempla también la posibilidad de compensar a las empresas que se ofrezcan a reducir su consumo de gas, por ejemplo, a través de subastas o licitaciones que podrían ser transfronterizas.
- Contratos de "interrumpibilidad": Otra posibilidad son los llamados "contratos de interrumpibilidad", que contemplan la concesión de compensaciones económicas para financiar una reducción predeterminada del consumo de gas durante un periodo de desconexión.
"Después de haber agotado todas estas medidas, los Estados miembros quizás necesiten empezar a restringir parcial o totalmente (el consumo) de grupos específicos de consumidores que hayan sido identificados en sus planes de emergencia", afirma el Ejecutivo comunitario.
Sobre el autor:
Marta Jurado
Marta Jurado es periodista especializada en Sociedad, Economía, Cultura, Política y redactora en el diario digital 65Ymás desde sus inicios. Licenciada en Periodismo por la Universidad Carlos III y en Filología Inglesa por la UNED, ha trabajado en medios de tirada nacional como El Mundo y Público y las revistas Cambio16 y Energía16. Tiene además experiencia en comunicación corporativa de empresas e instituciones como BBVA o INJUVE.