Los precios no paran de subir y cada día se bate un nuevo récord histórico, sobre todo en lo que a los recibos energéticos se refiere. Si pagar las facturas de energía ya era difícil antes de que llegara la crisis de la guerra de Ucrania, ahora lo es mucho más. Este mes de julio, con la inflación desbocada, los precios del gas y la electricidad se han incrementado un 38% en toda Europa respecto a hace un año, siendo una de las facturas más caras de la historia.
Pero, ¿cuánto supone ese esfuerzo a las economías domésticas y sobre todo aquellas con menos ingresos como les ocurre a muchos pensionistas que apenas llegan a fin de mes? Según un estudio del Instituto Sindical Europeo (@etuc_ces), el centro de investigación independiente de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), en la mayoría de los Estados miembros de la UE la factura energética anual media es ahora superior al salario de un mes para los hogares con menores ingresos, lo que arroja cifras similares sobre los pensionistas.
La factura anual se eleva por encima de los 1.400 euros
En concreto, en España, el coste medio anual de la energía ronda los 1.455 euros, mientras que el salario mínimo mensual con las pagas extra prorrateadas asciende a 1.167 euros. La situación es mucho más complicada para los pensionistas con menores ingresos ya que la pensión media se sitúa en los 1.091,28 euros, según los datos de agosto del Ministerio de Empleo y Seguridad Social. Y no hay que olvidar que una de cada cinco pensiones contributivas no llegan a 660 euros mensuales.
Ni siquiera la pensión media de jubilación al mes, que se encuentra entre las más altas (1.255,92 euros), cubriría los gastos energéticos anuales. Por tanto, pese a la prometida subida de las pensiones con el IPC, miles de pensionistas tendrán que apretarse aún más el cinturón para hacer frente a sus facturas energéticas, que equivalen según los cálculos de este estudio a más de una mensualidad de la prestación.
Comparación entre el SMI y el coste de la energía en los estados miembro de la UE (en moneda local)
De ahí, que sea importante calcular a cuántos días equivale el pago de la factura energética. Según Comisiones Obreras, los españoles que ganan el salario mínimo necesitan 38 días de trabajo para pagar la factura anual de iluminación y calefacción del hogar. Lo que se trasladaría a cerca de 40 días para la pensión media y más del doble para las pensiones mínimas en España.
De hecho, esta es una de las conclusiones más relevantes del estudio del Instituto Sindical Europeo, que señala que el número de días que debe trabajar una persona que gana el salario mínimo para pagar su factura energética ha aumentado considerablemente en varios países europeos. En concreto, en Estonia (+26), Países Bajos (+20), República Checa (+17), Letonia (+16). En cuatro países, Eslovaquia, Grecia, Chequia e Italia, la factura anual promedio de energía actualmente asciende a más de un mes y medio de salario para un trabajador que cobra el salario mínimo.
Más acciones para frenar la subida de precios
Los resultados del estudio del Instituto Sindical Europeo llegan antes de la reunión de emergencia del Consejo Europeo de Energía del próximo viernes en la que se va a abordar la fuerte subida de los precios en el sector energético. La CES pide a los líderes europeos que actúen con decisión para poner fin a los aumentos insostenibles de los precios de la energía.
En concreto, exigen aumentos salariales, un tope en la cuantía de las facturas de energía y un impuesto sobre las ganancias excesivas de las empresas de energía, tal como ha apuntado Ursula Von der Leyen. Además, solicitan ayuda de emergencia dirigida a personas que luchan por pagar sus facturas de energía y la prohibición de desconexiones.
Sobre el autor:
Marta Jurado
Marta Jurado es periodista especializada en Sociedad, Economía, Cultura, Política y redactora en el diario digital 65Ymás desde sus inicios. Licenciada en Periodismo por la Universidad Carlos III y en Filología Inglesa por la UNED, ha trabajado en medios de tirada nacional como El Mundo y Público y las revistas Cambio16 y Energía16. Tiene además experiencia en comunicación corporativa de empresas e instituciones como BBVA o INJUVE.