Ya es 27 de octubre y con él ha llegado el temido cambio de hora para adaptarse al horario de invierno, que se quedará con nosotros hasta el próximo 30 de marzo de 2025. Aunque hemos dormido una hora más, ya que a las 03.00 horas han vuelto a marcar las 02.00 horas, muchos viven este momento con incertidumbre, no solo por lo que costará readaptar las rutinas de sueño, si no por si su impacto sobre la factura de la luz les llevará a pagar menos o más. A pesar de que el nuevo horario de invierno, se creó para ahorrar energía tras la crisis energética los precios del petróleo de octubre de 1973, dentro de la Directiva Europea del Cambio de Hora, las dudas sobre su eficacia siguen creciendo. Así que pese a que inicialmente se implementó para ahorrar energía, hoy en día, muchos se preguntan si sigue siendo necesario.
Según estimaciones oficiales del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el potencial de ahorro en iluminación podría alcanzar en torno a 300 millones de euros, el equivalente al 5 por ciento del total. De esa cantidad, 90 millones corresponde al potencial de los hogares españoles, lo que supone un ahorro de 6 euros por hogar y 210 millones restantes se ahorrarían en los edificios del terciario y en la industria. Sin embargo, fuentes del IDAE han informado a Europa Press de que realmente no existen en España informes actualizados que permitan asegurar que el cambio de hora lleve asociados ahorros energéticos, ya que el último estudio es de 2015.
Se necesitan nuevos datos que reflejen cambios como el teletrabajo
En todo caso, observan que las nuevas exigencias de eficiencia energética en iluminación, en los sistemas de climatización y en los propios edificios, así como la progresiva introducción del autoconsumo, alteran significativamente los análisis que originalmente se utilizaban para calcular estos datos. En esa línea, estas fuentes recuerdan que el cambio de hora se aprobó en una época distinta a la actual con hábitos de vida que podrían afectar en mayor medida al consumo energético.
Además, apuntan que ahora habría que tener en cuenta otra realidad que es el hecho de que las jornadas de trabajo han cambiado y el teletrabajo se ha ido extendiendo, lo que hace que las rutinas de los ciudadanos ya no coincidan tanto como antes en el mismo espacio-tiempo. Si bien el IDAE indica que no ha realizado estudios, avances o trabajos en este ámbito en los últimos años, expone que el informe más actual lo elaboró la Comisión de Industria, Investigación y Energía del Parlamento Europeo en 2018.
O el consumo de calefacción
Ese trabajo señala que los cambios estacionales de hora pueden producir ahorros pero son marginales y, por tanto, "no hay certeza de que los beneficios que obtengan en todos los estados miembro". Asimismo, añade que aunque pueden producirse ahorros de energía en iluminación, no es tan evidente que ocurra lo mismo con la calefacción, que podría incluso aumentar su consumo.
En todo caso, el IDAE admite que los resultados de ese informe son difíciles de interpretar porque están influenciados por factores externos, como la meteorología o el comportamiento de los usuarios. Por otro lado, el grupo Ecologistas en Acción ya señaló en 2010 que el cambio de hora ha dejado de suponer un ahorro eléctrico. La asociación rescató datos de la Red Eléctrica Española (REE), que estimó una disminución delgasto de entre el 0,1% y el 0,5%. Además, señalaron a la Comisión Europea, que consideró como "relativamente modesto" el ahorro en el año 2000.
Trucos para ahorrar energía
Por ello, añade que en el contexto actual hay mecanismos más relevantes que el cambio horario a la hora de lograr ahorros energéticos, como son la sustitución de luces y aparatos por alternativas más eficientes, asegurar que la potencia contratada y la tarifa eléctrica contratada es la adecuada e incorporar pautas de ahorro en casa y en la empresa.
El debate sobre el cambio horario en la Unión Europea comenzó en 2018 cuando la Comisión Europea realizó una consulta pública en la que más del 80 por ciento de los 4,6 millones de ciudadanos que participaron se mostraron a favor de acabar con los cambios de hora.
Debate sobre su efectividad en la Unión Europea
El debate sobre el cambio horario en la Unión Europea comenzó en 2018 cuando la Comisión Europea realizó una consulta pública sobre el tema. En base a este resultado, la Comisión propuso, a iniciativa de Finlandia, finalizar esta práctica y que en marzo de 2019 se produjera el último cambio de hora, pero la falta de consenso entre los estados y las evaluaciones de impacto retrasaron la posible anulación del cambio horario.
Aunque la Comisión Europea aprobó la eliminación del cambio de horario, en marzo de 2019 la comisión de Transporte y Turismo del Parlamento Europeo apostó por retrasar hasta el año 2021 la eliminación del cambio de hora bianual propuesto por la Comisión Europea para abril de este año, de forma que las capitales tuvieran más tiempo para decidir si el país se queda con el horario de verano o el de invierno, pero nunca se llegó a aplicar. Países como Portugal ya han decidido que continuarán con el cambio de hora estacional.
Sobre el autor:
Marta Jurado
Marta Jurado es periodista especializada en Sociedad, Economía, Cultura, Política y redactora en el diario digital 65Ymás desde sus inicios. Licenciada en Periodismo por la Universidad Carlos III y en Filología Inglesa por la UNED, ha trabajado en medios de tirada nacional como El Mundo y Público y las revistas Cambio16 y Energía16. Tiene además experiencia en comunicación corporativa de empresas e instituciones como BBVA o INJUVE.