Agus Calvet
Consumo
El nivel de seguridad de las mascarillas de los supermercados, en duda
Agus Calvet
Domingo 10 de mayo de 2020
ACTUALIZADO : Viernes 12 de junio de 2020 a las 11:01 H
4 minutos
Empiezan a venderlas pero se cuestiona su nivel de seguridad
Un kilo de tomates, leche, aceite, el pan… y una caja de diez mascarillas. Este último producto ya se está convirtiendo en uno más en la lista de la compra, saliendo así de las farmacias para hacerse de primera necesidad y, paulatinamente, encontrarse en numerosos establecimientos como supermercados e hipermercados. Más aún después de que las autoridades sanitarias hayan pasado de su recomendación en el transporte público a su obligatoriedad.
El primer desembarco de mascarillas en los hipermercados se ha producido en la venta online para pasar después, paulatinamente, a ofrecerlas en los lineales de los establecimientos, especialmente en aquellas regiones más castigadas por el COVID-19. Así, las webs ofrecen paquetes de mascarillas higiénicas no reutilizables y, en algunos casos, también las de categoría FFP2.
El primer paso lo dio la cadena de distribución Carrefour y le están siguiendo los pasos no pocas de sus rivales, en un nicho de mercado que promete convertirse en el de mayor crecimiento en los próximos meses.
La cadena Eroski también está comenzando su distribución en sus centros, primero en Vizcaya, después en Álava para después pasar al resto de sus establecimientos. Lidl y Alcampo también han anunciado su puesta en venta, Dia de momento solo las vende online y en breve le seguirán el resto de cadenas, como Mercadona que también se ha sumado al carro.
Y en cuanto a la calidad de las mascarillas que se están vendiendo en esos canales de distribución ya ha surgido la primera polémica.
Hay que tener en cuenta que, de momento, las mascarillas en venta, o que están anunciándose su venta, en cadenas de supermercados e hipermercados son las higiénicas, excepto en Dia. Éstas son las de más baja protección, por debajo de las quirúrgicas, y su coste de producción es muy inferior al marcado como precio máximo regulado por el Ministerio de Sanidad, de ahí que algunas voces, como las de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) advierten de la confusión del consumidor, al no informar convenientemente que no son lo mismo las mascarillas quirúrgicas que las autofiltrantes o las higiénicas.
Lo cierto es que la venta de mascarillas solo es la punta del iceberg de un negocio imparable. Junto a ellas ya están surgiendo otros productos como los cubre mascarillas de tela, diseñadas para incorporación encima de cualquier elemento de protección respiratoria, lavable, y con diseños adaptados a las diferentes modas con diferentes colores y motivos impresos.