Por fin conocemos la letra pequeña de casi una veintena de medidas incluidas en el plan de ahorro energético del Gobierno + Seguridad Energética después de que hayan sido aprobadas en el Consejo de Ministros de este martes. Un paquete de 18 medidas en formato Real Decreto-ley, que según el Gobierno tienen el objetivo de rebajar la factura energética un 40%, pero habrá que ver en qué se traducen en la factura de millones de consumidores.
Entre las 18 medidas hay algunas que afectarán especialmente al bolsillo de los consumidores mayores, como es la creación de una nueva tarifa regulada para los vecinos con calefacción central, la ampliación de los bonos sociales eléctrico y térmico o la aplicación de un descuento del 40% en la factura eléctrica para familias trabajadoras con bajos ingresos. También destaca el crédito de 40 millones para la sustitución de contadores analógicos por digitales. Analizamos todas ellas de la mano de expertos que valoran las medidas.
Medidas "tirita", pero que no atajan el problema real de los precios
La mayoría de ellos las consideran "tiritas" ante la actual coyuntura de precios desorbitados. Esa es la opinión de Yolanda Moratilla, profesora de Tecnologías Energéticas en la Universidad Pontificia de Comillas (@UCOMILLAS), quien considera positivas todas las medidas que se tomen para proteger a los colectivos vulnerables, como las ampliaciones del bono social, pero cree que "se debería atajar el problema real, que es el mix energético de nuestro país, hacia un modelo más renovable y menos dependiente del gas. Si no se soluciona, no van a ser meses, sino años con estos niveles de precios".
Otros, como José Luis Sancha, autor del libro Presume de entender (a fondo) la factura de la luz y el gas (Ed.ICAI), se mantienen más cautos y creen que habrá que esperar a ver cómo se aplican exactamente las medidas. "Todo lo que sea protección a los vulnerables, incluidos los mayores, a los que les afecta, y mucho lo que se ha aprobado para las calderas comunitarias, me parece positivo. Pero es posible que se vayan a tomar más medidas en las próximas semanas o meses impulsadas por Bruselas, que está yendo aún más lenta que España en la implementación de medidas para hacer frente a la crisis energética", opina. De hecho, este mismo martes la Comisión Europea ha vuelto a descartar poner un tope de gas para este año y centra sus planes en la compra conjunta de gas. "Son medidas que se deberían haber tomado hace mucho tiempo", señalan.
Atentos a las condiciones de la nueva tarifa para la calefacción central
Respecto a una de las medidas estrella del nuevo paquete de ahorro energético, la creación de una nueva tarifa regulada o Tarifa de Último Recurso (TUR) a la que se puedan acoger las comunidades de vecinos con calefacción central, algunos expertos consideran que era "imprescindible", sobre todo para proteger a muchos mayores que viven en edificios con este sistema. Según cálculos de la Fundación Isadora Duncan (@isadoraduncan), especializada en asesoría energética, el coste de la calefacción para aquellos con caldera comunitaria podría doblarse o triplicarse este invierno sin esta medida. Así, según un caso de una comunidad real, se podría pasar de los los 75.000€ a cerca de 200.000/300.000€ para el mismo consumo de seguir con la tarifa actual del mercado libre.
Pero tal como advierten los expertos, habrá que estar muy atentos a las condiciones que ha impuesto el Gobierno para poder recibir esta ayuda, que estiman que podría reducir la factura al 50% respecto al precio medio de los últimos 5 años de cada comunidad de vecinos. En concreto, la medida obligará a que todas las comunidades que lo soliciten tengan instalados contadores individuales antes del 30 de septiembre de 2023, así como a tener sus calderas revisadas. Además penalizará a las comunidades que despilfarren energía. "Si la comunidad incrementara su consumo por encima del consumo medio, habría una penalización", advirtió la ministra Teresa Ribera. La medida no obstante, podría beneficiar a más de 1,7 hogares según cálculos del Ejecutivo.
Facturas más transparentes, pero que "habrá que entender"
Otro de los cambios que más afectará a los consumidores es la obligación del Ejecutivo de incluir en los recibos información sobre el consumo medio de los vecinos del mismo código postal desde el próximo diciembre, así como a dar información detallada (nomenclatura estandarizada y transparencia sobre el precio promedio de ajuste) sobre la aportación del mecanismo ibérico que se aplica desde el pasado mes de junio para topar el precio del gas para la generación de electricidad.
Refuerzo a los bonos sociales y descuentos del 40% en la factura de los vulnerables
El Ejecutivo ha aprobado también la aplicación de un descuento del 40% sobre la tarifa eléctrica regulada para los los hogares con ingresos inferiores a los 27.720 euros hasta finales de 2023, tal como se observa en la siguiente tabla. También se ha aprobado la ampliación del descuento del bono social preexistente, del 60% al 65%, o del 70% al 80% para los consumidores severos. Por otro lado, aumenta la dotación del bono social térmico desde los 25 hasta los 40 euros anuales y la ayuda media -varía según la zona climática- se eleva hasta los 375 euros anuales por beneficiario.
Pero desde la asociaciones contra la pobreza energética señalan que este bono social no llega a todas las familias debido a la falta de publicidad que se hace sobre él y por la dificultad de trámites administrativos para conseguirlo. "Falta bajar a la calle y ver las necesidades reales de la gente. No les puedes pedir a los mayores de 70 años como yo que entreguen una documentación ingente a través de internet. Que se dejen de estudios económicos y que los hagan desde un punto de vista más humano. Aprueban medidas, pero que no llegan a la gente que las necesita", asegura Paca Blanco, miembro de Ecologistas en Acción y colaboradora de la Alianza contra la Pobreza Energética (@APE_Cat).
Umbrales de renta para el bono de justicia energética
Fuente: Moncloa
Ayudas a la sustitución de contadores y rehabilitación energética
Una de las ayudas que más desapercibida ha pasado ha sido la aprobación de un crédito de 40 millones de euros para ayudar a las familias a sustituir los contadores de gas analógicos por los digitales "para facilitar el ahorro en los hogares", defendía la ministra Ribera. Pero expertos como José Luis Sancha recuerdan que en el caso eléctrico ya se ha instalado este sistema y "aunque da información", no necesariamente se traducirá en un abaratamiento de los recibos. "Me parece una medida extraña, nunca se había planteado, y me parece más efectivo fomentar las tarifas planas de gas, en lugar de que el consumidores tenga que estar mirando cada hora de consumo".
Yolanda Moratilla señala no obstante, cree que toda renovación de instalaciones, especialmente calderas antiguas por nuevas o sustitución por bombas de calor, sí podrían suponer un gran ahorro para los hogares, sobre todo los habitados por mayores que pasan más horas en casa. En este sentido, el Gobierno también ha aprobado la prórroga de las deducciones en el IRPF por obras para mejorar la eficiencia energética de las viviendas. La ampliación de la deducción se extiende hasta finales de 2024 en el caso de obras de rehabilitación energética realizadas en edificios de uso residencial.
Sobre el autor:
Marta Jurado
Marta Jurado es periodista especializada en Sociedad, Economía, Cultura, Política y redactora en el diario digital 65Ymás desde sus inicios. Licenciada en Periodismo por la Universidad Carlos III y en Filología Inglesa por la UNED, ha trabajado en medios de tirada nacional como El Mundo y Público y las revistas Cambio16 y Energía16. Tiene además experiencia en comunicación corporativa de empresas e instituciones como BBVA o INJUVE.