
Mercadona apuesta por un nuevo negocio en sus supermercados
La cadena incorpora un servicio de cafetería en sus establecimientos de Valencia

Cada vez es más normal encontrar diferentes espacios de restauración o cafeterías dentro de comercios que, muchas veces, no están relacionados con la hostelería. Grandes empresas como Ikea, Walmart o Inditex han implementado esta estrategia con éxito, por lo que ahora Mercadona ha decidido seguir los mismos pasos, habilitando cafeterías en algunos de sus supermercados.
Este nuevo servicio permite que los clientes puedan disfrutar de un café recién molido en diferentes variedades como solo, cortado o con leche, sin tener que salir del supermercado. Esta iniciativa se encuentra actualmente en fase de prueba y solo está disponible en los establecimientos situados en la Comunidad Valenciana, donde la cadena cuenta con 58 tiendas repartidas por toda la región. Mercadona ya ha asegurado que “tenemos previsto que después del verano ampliemos este laboratorio y que pueda adquirirse el café en tiendas de la Comunidad de Madrid”, según han anunciado en un comunicado.
La incorporación de estas cafeterías es parte de una estrategia amplia de la empresa, que también ha apostado por la comida preparada como un servicio clave en sus supermercados. En esta línea, Juan Roig, presidente de Mercadona, afirma que “la cocina tiene menos importancia en los hogares”, sugiriendo que en el futuro el hecho de cocinar en casa podría ser algo menos habitual y que las comidas preparadas serán una opción predominante.

¿La comida preparada es una opción saludable?
Ya sea por el ritmo acelerado de la vida o por simplemente no tener ganas de cocinar, muchas personas suelen optar por la comida precocinada. Ante esta gran demanda, supermercados como Mercadona han reforzado su oferta de platos preparados para responder las necesidades de sus clientes.
Sin embargo, siempre surge la duda de si el consumo frecuente de estos alimentos es saludable o no. Según algunos expertos en nutrición, esto depende mucho de la calidad del producto y de los ingredientes utilizados. Si bien existen algunas opciones que pueden ser equilibradas y nutritivas, hay muchos platos precocinados que tienen altos niveles de azúcares, grasas y sodio, por lo que puede ser negativo para nuestra salud. Al conocer nuestro propio organismo y sus necesidades, lo mejor es siempre tratar de cocinar y comer en casa.