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Dragon's Blood (Beauté Mediterranea): La crema que arrasa en Mercadona
De nuevo, otra crema de Mercadona (@Mercadona) triunfa entre sus clientes. Esta vez, se trata de un sérum antiedad de Sisbela (Sisbela Sérum), una de las marcas blancas de la empresa valenciana, que puede utilizarse en combinación con otras cremas hidratantes. Su éxito reside en dos elementos: sus múltiples propiedades, potenciador, regenerador y acelerador de la piel, y su precio, cinco euros.
Además, su forma de uso es muy sencilla. Gracias a un cuenta gotas, se aplica sobre la piel, que debe estar seca, por la mañana y por la noche, y se masajea durante unos segundos.
En cuanto a sus componentes, este sérum contiene propanediol, que ayuda a limitar la irritación, elastina, que reafirma la piel, ácido hialurónico, que elimina arrugas, colágeno marino y silicio orgánico, que ayudan a cuidar la piel de las personas de más edad, entre otros componentes.
Así, cabe recordar que no es la primera vez que Mercadona ofrece a bajo precio una crema con componentes que podrían considerarse de lujo. Según La Vanguardia, otra de las cremas antiedad de Sisbela, la Diamond Revitalizing, que se empezó a comercializar en 2016 y también cuesta cinco euros, era casi idéntica a una de la marca Alain, que se vendía por 85 euros en 2017.
¿Cómo utilizar los serums faciales?
En cuanto al método de uso de los sérums, según Mercacona, hay dos maneras de utilizarlos:
1. Con la piel limpia y seca, poner una pequeña dosis en las yemas de los dedos y masajear con ellas suavemente el rostro, con movimientos circulares, hasta su total absorción. A continuación se puede aplicar la crema habitual. En concreto, ésta es la recomendación de la marca para el caso del Sérum Sisbela.
2. Si se quiere ganar tiempo, se puede mezclar unas gotas del sérum elegido con la crema habitual y aplicarla a continuación.
¿Cómo funcionan?
La alta concentración de principios activos en la fórmula de los sérums incrementa su acción y su eficacia, según afirma la marca valenciana en su web.
Además, su textura fluida favorece la penetración de los activos y los convierte en un paso necesario para complementar el efecto de las cremas. Éstas protegen la capa externa de la piel, mientras que los sérums actúan en la interna, por eso se habla de productos complementarios que no sustituyen a la cosmética habitual. Asimismo, la textura ligera de los sérums facilita su rápida absorción.