El mes de junio de 2021 probablemente pasará a la historia como uno de los más agitados en cuanto a la factura de la luz. Además de ser la fecha elegida para introducir el nuevo sistema de tarificación por tramos horarios, el precio de la luz ha rozado en varias ocasiones máximos históricos por encima de los 94 euros, solo alcanzados durante el temporal Filomena. Tanto ha sido así que junio cerrará con un incremento del 46,5% en el precio de la luz, situación que ha forzado una decisión, también "inesperada", por parte del Gobierno de rebajar el IVA del 21 al 10% que se aprobará este jueves en un Consejo de Ministros extraordinario.
Una noticia, que podría interpretarse como positiva debido a que es una demanda histórica de las asociaciones de consumidores, pero que a pocas horas de su anuncio, ya ha recibido numerosas críticas, sobre todo por las condiciones o letra pequeña que presuntamente se aplicarán y que apenas supondrá una rebaja de 40 euros a final de año. A la espera de que se conozca más detalle del texto, su carácter temporal no convence a los expertos y asociaciones de consumidores debido a que lo consideran un "parche" para el problema de fondo del complejo sistema de fijación de precios del mercado eléctrico. Analizamos con ellos cuáles son esas 'trampas" de esta bajada del IVA de la luz, para la que los expertos recomiendan especialmente a los consumidores mayores mantenerse informados de los cambios y en caso de necesitarlo, pedir el bono social.
Carácter temporal
La nueva norma se aplicará de forma temporal, hasta finales de año y con varias condiciones. En concreto, la ministra de Hacienda Maria Jesús Montero ha explicado este martes que la medida estará en vigor hasta el 31 de diciembre de 2021, cuando se volverá a evaluar. Una limitación que rechazan asociaciones de consumidores como FACUA (@facua) que exigen que sea permanente, mientras que la OCU (@consumidores) va más allá y pide eliminar también el Impuesto de la Electricidad, que eleva la factura eléctrica en un 5,11%.
Limitado a consumidores de hasta 10 kilovatios de potencia
La rebaja se aplicará a todos los consumidores con potencia contratada de hasta 10 kilovatios, pero siempre que el mercado mayorista no baje de lo que se considera "precio alto de la luz". Tal como explica Josep Babot, de la Alianza contra la Pobreza Energética (@APE_Cat), "esto se traduce a la mayoría de consumidores domésticos –28,5 millones de hogares en España–. De este paquete, quedarían fuera muchas pymes, hogares con más consumo y algunos autónomos.
Condicionado al precio en el mercado eléctrico, salvo excepciones
La rebaja, según el Gobierno, se aplicará "siempre que el precio medio mensual del mercado mayorista de la electricidad esté por encima de los 45 euros por MWh". En caso contrario, no se bajaría el impuesto de valor añadido salvo excepciones como puede ser la de los consumidores vulnerables severos. Según explica Daniel Álvarez, técnico de Economía doméstica y experto en el consumo eléctrico de la Fundación Isadora Duncan (@isadoraduncan), esto es una "trampa para quedar bien", ya que es un grupo muy limitado de apenas medios millón de hogares, y se espera que los precios no bajes de los 70 euros por MWh en el mercado mayorista de la electricidad.
La rebaja apenas llegará a los 6-7 euros al mes
Según estiman las fuentes consultadas, el impacto de esta rebaja apenas se quedará en 6-7 euros al mes. Una cifra que ha confirmado el ministerio de Transición Ecológica. De esta manera es posible que la factura media de julio pase de 73 euros a 66 para un consumidor medio y cerca de 40 euros de ahorro en la factura anual. No obstante, los expertos advierten de que "entre la subida inédita de los precios y los nuevos tramos horarios, es probable que la factura se quede como estaba", señalan desde la Fundación Isadora Duncan.
La medida no soluciona el "problema real"
La OCU, igual que el resto de las asociaciones de consumidores, afirman que estas medidas "no abordan el problema real" de la subida del precio de la electricidad, con una escalada que se produce, a juicio de la organización, "por la falta de transparencia y de mecanismos de corrección" en el sistema de fijación marginalista del precio de la electricidad. En este sentido, cree que la rebaja del IVA tiene que acompañarse de medidas que acaben con beneficios extraordinarios de las eléctricas a costa del bolsillo de los consumidores por este injusto sistema de fijación de precios".
El Gobierno lo ha tomado "forzado por la coyuntura"
La medida ha dejado desconcertados a los colectivos que llevaban años pidiendo una reducción de impuestos. "Siempre nos han dicho que no era posible, y ahora Hacienda lo apoya, no entendemos nada... Creemos que es una decisión sobrevenida ante la presión que se ha vivido durante este mes sobre la factura de la luz. Por eso habrá que esperar a ver en qué se traduce la norma", señalan desde la Fundación Isadora Duncan. "No es casualidad que se haya tomado ahora, sino por la necesidad ante la presión social", opinan desde la Alianza contra la Pobreza Energética.
La Airef alerta sobre la menor recaudación fiscal
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (@AIReF_es) calcula que bajar el IVA de la luz al 10% tendría un impacto en una menor recaudación para las arcas del Estado. Aunque ha reconocido que es "un poco prematuro" evaluar el impacto de esta medida en las cuentas públicas, los cálculos aproximados de la AIReF apuntan a una reducción de la recaudación de 1.300 millones de euros al año. "Es verdad que esa rebaja podría suponer un aumento de la demanda, con lo cual podríamos estar hablando de una horquilla de entre 1.100 y 1.300 millones", ha matizado.
Sobre el autor:
Marta Jurado
Marta Jurado es periodista especializada en Sociedad, Economía, Cultura, Política y redactora en el diario digital 65Ymás desde sus inicios. Licenciada en Periodismo por la Universidad Carlos III y en Filología Inglesa por la UNED, ha trabajado en medios de tirada nacional como El Mundo y Público y las revistas Cambio16 y Energía16. Tiene además experiencia en comunicación corporativa de empresas e instituciones como BBVA o INJUVE.