La Plataforma Intersindical frente al colapso sanitario ha desconvocado las concentraciones y movilizaciones que tenía previstas por toda España a lo largo de este mes de marzo, una vez que la licitación por la asistencia sanitaria de los funcionarios se desatasca. El futuro de Muface está garantizado desde 2025 y hasta 2027, gracias a Asisa y Adeslas, y pese al abandono de DKV.
Los sindicatos Fedeca, SUP, ANPE, UFC, USO, SIAT, Usie, SPP, APFP y TAMPM arrancaron un amplio calendario de movilizaciones el pasado de 18 de febrero con concentraciones en Andalucía, Extremadura y Navarra; el 25 de febrero en Cataluña, La Rioja y Castilla-La Mancha; y el 4 de marzo en Cantabria, Castilla León, Ceuta y Melilla.
Este mismo 11 de marzo estaba previsto que volvieran a concentrarse en Galicia, Murcia, Islas Baleares y Canarias; y un día después, el 12 de marzo, en Madrid; para terminar el día 18 con movilizaciones en Asturias, Aragón y Valencia.
Ya con la certeza de que el nuevo contrato saldrá adelante, los sindicatos paralizan estas concentraciones. No obstante, aseguran que seguirán vigilantes ante posibles nuevos “casos de retrasos y cancelación de citas médicas”.
Cerrada la peor crisis de Muface
Muface garantiza su continuidad gracias a Adeslas y Asisa, las dos únicas aseguradoras que se han adherido al convenio sanitario para 2025, 2026 y 2027; DKV abandona la asistencia sanitaria de los funcionarios; y ninguna otra compañía se ha sentido lo suficientemente tentada como para presentarse al concurso. Tras la apertura de sobres con las ofertas, el Gobierno respira tranquilo y da carpetazo así a la peor crisis que ha vivido la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado en sus 50 años de historia.
Al borde de la huelga
La crisis vivida en Muface, llevó a los funcionarios al borde de la huelga por su asistencia sanitaria. Hace ahora un mes, in extremis, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) decidía aplazar la huelga convocada en los ámbitos de las administraciones afectados por la crisis de Muface hasta que se resuelva la licitación, después de que el Gobierno mejorara la dotación económica del contrato, y por el acercamiento de posturas entre el Ejecutivo y las aseguradoras.
"CSIF considera oportuno esperar al término del plazo para no perjudicar las deliberaciones ni a los ciudadanos afectados por la convocatoria de nuestra huelga”, decían en un comunicado. Una vez que el contrato parece tener ya luz verde, este aplazamiento se convierte en suspensión definitiva.