Cuando uno comienza su andadura profesional, empieza a ganar dinero, y también a gastarlo. Las preferencias y necesidades van cambiando con la edad, pero uno de los momentos en los que más dinero se gasta es cuando uno se independiza. Llegados a ese punto es importante ahorrar de cara al futuro y, por eso, muchos contratan un plan de pensiones, para garantizar ese ahorro a largo plazo.
Go Banking Rates ha calculado el dinero que debería tenerse ahorrado en función de la edad, ya que cada cliente decide la cantidad fija o puntual que se deposita en el plan de pensiones. Todo lo que se planee ahorrar va a depender del nivel de vida que cada uno tenga.
30 años: un salario anual
Con 30 años la cantidad que se recomienda tener ahorrada debería ser la misma que nuestros salario anual (la suma de las pagas mensuales y extraordinarias). Para poder conseguir este objetivo se recomienda extraer de forma automática el 20% del salario para el fondo de pensiones.
Esta planificación debe comenzar en el momento que se empiece a trabajar de forma estable. Por otro lado, hay que evitar contraer deudas y, en caso de hacerlo, habría que amortizarlas lo más rápido posible. Por ejemplo, en vez de realizar pagos únicos se recomienda establecer una tasa de interés inferior al 7% siempre que se pueda, en este tipo de transacciones.
40 años: el triple del salario anual
Los expertos sugieren que a esta edad es recomendable tener guardado el triple de nuestro salario anual. Si no se tiene ningún tipo de estrategia de ahorro, este debería ser el objetivo a alcanzar. Uno de los errores más frecuentes cuando crece nuestro salario es destinar la misma cantidad de ahorro al plan de pensiones en vez de aumentar la cuantía depositada de manera fija.
Además, con este aumento también crece la posibilidad de poder afrontar gastos con mayores cuantías: mudarse a una casa más grande, comprar un coche nuevo, una segunda residencia, son algunos de los gastos que suelen hacerse con esta edad. Si estas inversiones se convirtieran en algo habitual, estaríamos perdiendo de forma progresiva la capacidad de ahorro a largo plazo.
50 años: cinco veces nuestro salario anual
Los gastos suelen reducirse llegados a esta edad, y por eso es el mejor momento para aumentar la cantidad mensual que va destinada a nuestro ahorro de pensión. Además, a través de ventas puntuales puede ingresarse dinero extra en la cuenta de ahorro.
60 años: siete veces nuestro salario anual
Para el momento previo a la jubilación se debería tener ahorrado nuestro salario anual multiplicado por siete. Es recomendable no tener ninguna deuda abierta con el banco o cualquier entidad. Y en caso de tenerla, que sea la mínima cantidad.
Uno de los errores bastante comunes es haber dejado las deudas vitalicias hasta el último momento, y aprovechar la cantidad ahorrada en el plan para solventar el déficit.
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.