Olga Selma
Olga Selma es redactora especializada en temas de salud, alimentación y consumo.
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Martes 12 de julio de 2022
ACTUALIZADO : Martes 12 de julio de 2022 a las 9:23 H
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Hay varias formas de cuestionar un testamento y solicitar la nulidad por considerarlo injusto o ilegal. Pero no es una decisión que deba tomarse a la ligera. Es imperativo considerar si un reclamo supondría realmente un mejor resultado que el existente, al mismo tiempo que debemos conocer los motivos por los que se puede impugnar un testamento según la ley.
Al impugnar un testamento mostramos que no estamos de acuerdo con lo estipulado por el testador, en todo o en parte. Ahora bien, es preciso basarse en alguna de las razones o causas previstas en la legislación en materia de herencias.
Te contamos cuáles son los requisitos de un testamento válido y un resumen de los principales motivos por los que se puede solicitar la impugnación un testamento.
El Código Civil español recoge una serie de causas por las que un testamento puede ser impugnado.
El primer motivo es cuando el testador no incluye en el testamento a un legitimario o heredero forzoso. El testador no puede privar a los herederos forzosos de la legítima, salvo en los casos expresamente determinados por la ley. En estas circunstancias, las personas afectadas tienen el derecho de solicitar la nulidad del testamento en la justicia.
Otro motivo es la incapacidad del propio testador. Las personas con las capacidades mentales alteradas pueden ser vulnerables a las presiones de otros al testar. De forma que los herederos excluidos o no conformes pueden impugnar un testamento si consideran que el testador ha sido manipulado en su forma de proceder.
Si hay un incumplimiento legal en la repartición de bienes también podrá impugnarse el documento. Los bienes pueden ser repartidos, según la normativa, en tres tercios: la parte legítima, entre los herederos legitimarios en partes iguales; la parte de libre disposición; y la parte de mejora. Si esta distribución no se cumple, es un motivo para impugnar el testamento.
Otra causa legal son los errores de forma de la redacción del testamento, que puede ser de tipo abierto, cerrado u ológrafo. Pero cada una de estas modalidades tiene sus propios requisitos y un incumplimiento es motivo de impugnación.
Para llevar a cabo una impugnación debemos tener en cuenta que el plazo de que disponen los herederos es de 15 años. Este tiempo se contabiliza a partir del fallecimiento del testador o desde que se recibió la copia autorizada del testamento. Una vez pasado el periodo ya no es posible una reclamación.
Para proceder, el testamento debe impugnarse mediante una demanda judicial en el Juzgado de Primera Instancia del lugar de fallecimiento del testador, que será el encargado de seguir la causa.
Por tanto, hay varias formas de impugnar un testamento. Sin embargo, cada caso es único, y será necesaria una comprensión del carácter del difunto, la naturaleza de las relaciones familiares y las intenciones testamentarias del testador para que pueda ser impugnado.