¿Se puede alquilar la casa si todavía no se ha pagado toda la hipoteca?

La subida de los tipos de interés está generando problemas muy graves para algunas personas que siguen pagando su hipoteca. Esto les ha hecho replantear su lugar de residencia y pensar en alquilar su vivienda, pero pueden surgir algunas dudas al respecto. ¿Es legal alquilar una casa si se sigue pagando el préstamo?

La buena noticia es que es perfectamente legal en casi todos los casos. No existe ningún impedimento recogido por la normativa que prohíba este uso del inmueble, aunque si decides hacerlo, perderá la condición de vivienda habitual. Eso significa que ya no podrá aplicarse la deducción correspondiente en el IRPF.

No obstante, la ley recoge una excepción muy concreta según la cual la vivienda puede alquilarse sin perder la condición de habitual, sin importar si hay o no hipoteca de por medio. Se trata de los alquileres de corta duración, regulados por cada comunidad autónoma. En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, el límite de tiempo que comprende este alquiler es de cinco noches.

Otro factor a tener en cuenta es lo que puede ocurrir con los inquilinos que han convertido el inmueble alquilado en su vivienda si el banco embarga la propiedad a los dueños. La normativa garantiza que el embargo no afecta a quienes viven de alquiler en la propiedad, que podrán continuar con sus cinco años sin obligación de marcharse amparados por la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).

Ojo con esta cláusula

Aunque es poco habitual, es importante releer el contrato y repasar bien la letra pequeña. Algunas entidades incluyen en él una cláusula que impide el alquiler: no podrá llevarse a cabo este trámite mientras dure la hipoteca.

El motivo que lleva a los bancos a incluir esta cláusula es que los alquileres pueden reducir el precio de la casa respecto al precio de tasación. El alquiler y uso por parte de terceros afecta al estado de la vivienda y, por ese motivo, su precio al venderse baja. Esto significa que si el propietario no paga el préstamo y la entidad embarga la casa, tendrá que venderla por debajo del precio de la tasación al conceder la hipoteca.

Es por esta razón que puede incluirse en algunos contratos, especialmente si se trata de un préstamo para comprar una segunda vivienda, pues tienen más posibilidades de destinarse al alquiler. No obstante, los grandes bancos ya no la suelen utilizar, así que, en general, está cayendo en desuso.