De la noche a la mañana los usuarios de varios centros de estética Dorsia en Cataluña se han encontrado con las puertas cerradas y los tratamientos, en algunos casos ya comenzados y pagados, a medias. El cierre afecta las clínicas de Badalona y Manresa, donde hace varios días que en la puerta ha aparecido un cartel con 'Cerrado por vacaciones'. Tanto es el desconcierto que los afectados ya se han empezado a organizar en una plataforma online, y aseguran que sus deudas suman más de 200.000 euros entre el medio centenar de damnificados, que van creciendo cada día, según informan medios locales.
Clínicas Dorsia (@ClinicasDorsia) defiende que las franquicias de Manresa y Badalona afectadas por el cierre dejaron de pertenecer a la cadena el pasado mes de noviembre por un "incumplimiento grave de las obligaciones contractuales, tanto con los franquiciados como también con los proveedores y las administraciones públicas". Ante esto, aseguran, emprenderán "las acciones legales oportunas por la gestión irresponsable y negligente de los pagos recibidos por parte de los pacientes". Pero éstos siguen preocupados por qué pasará con el dinero adelantado.
Aumenta el número de afectadas por las supuestas estafas de las clínicas franquiciadas #Dorsia de Badalona y Manresa. Vázquez #abogados
La Organización de Consumidores y Usuarios (@consumidores) recuerda a todos los usuarios afectados cómo pueden relamar su dinero:
1. Recopilar y guardar toda la documentación que dispongan que demuestre la vinculación con la clínica o el prestador de servicio: desde publicidad y folletos a contratos, facturas, presupuestos.
2. Ponerse en contacto con la clínica, presentando una reclamación por escrito, dejando constancia fehaciente de que no se ha cumplido el contrato y reclamando la finalización del tratamiento, exigiendo al mismo tiempo que les den toda la documentación, así como la copia del historial médico. Si la clínica está cerrada, hay que dirigirse al domicilio social de la empresa que conste en su página web y en el Registro Mercantil.
3. Reclamar ante los Servicios de Consumo los posibles perjuicios que el cierre haya podido ocasionarles: no finalizar el tratamiento, pérdida del dinero adelantado, etc.
4. En caso de haber sufrido una mala praxis deben presentar una reclamación ante las Autoridades Sanitarias de la comunidad autónoma.
5. Si se hubiera solicitado un crédito vinculado al contrato de servicio firmado con la clínica o el centro, dirigirse por escrito y de forma fehaciente al departamento o servicio de atención al cliente de la entidad financiera donde tuvieran el crédito, para solicitar su anulación por no haberse prestado el servicio. Al no cumplirse lo pactado, ese crédito deja de ser exigible. Si pasados dos meses la entidad no responde al consumidor o su respuesta no es satisfactoria, puede presentar una reclamación ante el Banco de España.
Además, recuerdan que no es la primera vez que clínicas o centros de estética dejan tirados a los clientes con servicios ya abonados y tratamientos en curso. Hace pocas semanas, hubo un caso similar con los pacientes de las Clínicas Ideal. En estos casos, las asociaciaciones de consumidores recomiendan reclamar por escrito a los centros, dirigirse a los Servicios de Consumo y, si se sufrió una mala praxis, a los Servicios de Salud.
Sobre el autor:
Marta Jurado
Marta Jurado es periodista especializada en Sociedad, Economía, Cultura, Política y redactora en el diario digital 65Ymás desde sus inicios. Licenciada en Periodismo por la Universidad Carlos III y en Filología Inglesa por la UNED, ha trabajado en medios de tirada nacional como El Mundo y Público y las revistas Cambio16 y Energía16. Tiene además experiencia en comunicación corporativa de empresas e instituciones como BBVA o INJUVE.