Sergio Garbín: "El futuro pasa por mayores que vivan en sus casas ayudados por la tecnología"

Dibujar una nueva realidad en la que la tecnología sea una aliada para los mayores y no un obstáculo. Este es el futuro que defiende Sergio Garbín, director general de Essence Group en España (@Essence_grp), compañía que ofrece soluciones de teleasistencia avanzada para los mayores "que van más allá del botón rojo" a través de su plataforma Essence SmartCare.

Según Garbín, ingeniero de sistemas con una gran trayectoria internacional, "la gran revolución va a pasar por poner la tecnología en el hogar de las personas mayores", con dispositivos que van a permitir que los séniors tengan una vida "más autónoma e independiente, quedándose en su casa el mayor tiempo posible".

PREGUNTA.– El V Encuentro de Economía Senior que se celebró el paso octubre y en el que participásteis, se puso sobre la mesa el reto que supone el aumento de la longevidad y en el que la tecnología será fundamental. ¿Por qué creeis que será clave en el futuro?

RESPUESTA.– La pirámide de población se está invirtiendo, con lo cual cada vez hay más personas de mayor edad, especialmente mayores de 65 años, que quieren vivir en su casa de manera independiente. Las residencias tampoco tendrán la capacidad de asumir a todos aquellos que están en este segmento de edad… Sabemos que estas personas quieren vivir solas, independientes, pero al mismo tiempo, protegidas. Creemos que no es factible tener una persona cuidándote 24 horas, y por lo tanto hay un espacio para cubrir esa demanda. Al mismo tiempo, los familiares necesitan saber que los mayores están cuidados, y ahí la tecnología es un habilitador para conseguir estos objetivos. 

Nosotros desde Essence Group venimos trabajando desde hace muchos años en buscar que la tecnología te permita dar servicios de valor agregado. Ya no es solo el botón rojo de la teleasistencia, sino que la inteligencia artificial está permitiendo avanzar y predecir ciertos comportamientos o desviaciones en los hábitos de las personas.

"La inteligencia artificial está permitiendo avanzar y predecir ciertos comportamientos o desviaciones en los hábitos"

P.– Para la gente que no esté familiarizada con estos conceptos, ¿de qué soluciones tecnológicas estamos hablando?

R.– Tenemos, por ejemplo, una plataforma donde hay soluciones básicas y más avanzadas, tenemos sensores de movimiento, de frigorífico, de apertura de puertas, sensores de cama... Todo combinado para que esa solución se alimente de los datos y del comportamiento de las personas y a partir de ahí poder predecir ciertas actividades y zonas de riesgo.

Pongamos el caso de una persona que tiene un deterioro cognitivo y detectamos que sale por la noche porque tiene un dispositivo de apertura de puertas. Obviamente, aunque no sea un caso de extrema alarma, sí se genera un aviso de que la persona está saliendo cuando no está estimado que salga, por lo que algo pasa.

O que generalmente va dos veces al baño y esta noche hemos detectado que ha ido cinco veces con el sensor. O si se suele levantar a las 8 de la mañana y son las 10 y aún no hay movimiento… Puede que no haya sucedido nada y que se sienta mal, pero sí hay un aviso para prevenir una situación que pueda haber sufrido alguna actividad que pueda no ser normal. 

"La brecha digital de los mayores se va reduciendo con el paso de los años"

P.–  Esto nos lleva a otro de los puntos que genera más fricción. Los mayores piden que la tecnología se adapte a ellos y no a la inversa. ¿Es posible?

R.– Sí, por supuesto. Claro que es posible. Siempre se habla de la brecha digital entre los mayores y la tecnología, pero esa brecha se va viendo reducida con el paso de los años. Es verdad que las soluciones tienen que ser accesibles y atender a las necesidades de los mayores. No es lo mismo una persona joven que se maneje con el móvil, que otra mayor. Por eso hay que ofrecer soluciones muy simples, muy fáciles de gestionar, para que los mayores se sientan cómodos.

La tecnología está allí para ayudarles aunque ellos no se den cuenta de que está. A través de ello, podemos tener por ejemplo un activador de voz, pueden activar una alarma, que conecte con el cuidador directamente, cuando lo necesitan, no solo porque tengan un problema sino porque tengan soledad, o quieran alguna ayuda psicológica o consejo para una actividad del día a día. No es solamente una situación de riesgo sino que la tecnología va a ir avanzando para que la persona no se sienta sola. 

"La tecnología puede ayudar no solo a predecir riesgos sino a acompañar a una persona que se sienta sola"

P.– Vosotros sois referente en tecnología, ¿por qué decidisteis lanzar SmartCare, una línea de negocio dedicada a la teleasistencia de personas mayores?

R.– Nosotros tenemos más de 25 años en el sector. La solución tiene más de 15 años, entramos en el mercado español hace casi cuatro años, y tenemos la vocación de ayudar a las personas mayores. Nuestra empresa siempre tiene entre sus valores, el ayudar a través de la tecnología. Siempre la persona es el centro de nuestros objetivos y valores. Nosotros buscamos que la persona se sienta cómoda al utilizar nuestra tecnología, que no sea algo difícil de acceder. Y eso facilita mucho que los operadores de teleasistencia puedan ofrecer a sus clientes finales muchos servicios basados en nuestra tecnología.

P.– ¿Cómo veis el futuro de la teleasistencia en España?

R.– Yo creo que estamos en un momento excelente de revolución tecnológica. Se está pasando desde hace más de 20 años de una teleasistencia reactiva, solamente con el botón rojo del pánico, a una teleasistencia basada en soluciones digitales, donde no solamente tenemos dispositivos en el hogar con datos que podemos subir a la nube, sino que tenemos algoritmos. Por lo que esos datos nos permiten dar soluciones de inteligencia artificial que dan un valor agregado al usuario. Y ese es el gran reto. Ya no estamos hablando solo de teleasistencia sino de telemedicina. 

Con el mismo hub tú puedes tener toda tu solución de protección de personas, y al mismo tiempo tener tus constantes vitales, te puedes autogestionar tus mediciones de temperatura, peso, presión arterial, glucosa… desde tú hogar, sin tener que moverte, sin tener que desplazarte a un centro de salud. Y esa va a ser la gran revolución: poner tecnología al hogar para que la persona mayor se sienta protegida, libre, tenga una vida autónoma en la medidas de lo posible. 

"El futuro de la teleasistencia pasa por autogestionar tus mediciones de temperatura, peso, presión arterial, glucosa...”

P.– Generalmente los mayores prefieren atención presencial que telemática o pueden ser reticentes al uso de dispositivos 24 horas. ¿Os habéis encontrado con algún obstáculo en este sentido?

R.– Es verdad, pero para empezar hay que aclarar que en la teleasistencia no hay cámaras. Son sensores de movimiento, de apertura de puertas, con lo cual no hay una videocámara que esté grabando a la persona y eso garantiza la privacidad de la persona. Pero al mismo tiempo la tecnología te permite tener esa información para protegerlos cuando más lo necesitan, cuando tienen una caída o no se sienten bien. Y es verdad que la tecnología por sí sola, no va resolver la situación, siempre hay una persona detrás. 

P.– Y por último, ¿hay proyectos en cartera que nos podáis contar?

R.– Bueno, tenemos varios contratos. En breve vamos a tener un operador privado que va a usar nuestra tecnología para el cuidado de las personas mayores por reconocimiento de voz, muy importante, sobre todo para personas con discapacidad, o alguna limitación de movilidad, donde el dispositivo reconoce a través de una palabra clave, se activa y se genera una alarma con la central telefónica.

Todo esto permite una comunicación bidireccional, sin tener que usar ningún botón o dispositivo en el cuerpo. Eso supone mucha libertad de movimiento, y mucha facilidad para la interacción natural del usuario con un operador a distancia. Y es que el futuro pasa por la tecnología para ayudar a las personas mayores. Es un hecho.