Crece la preocupación por las pensiones entre los españoles
Las dos extras de las pensiones están garantizadas pese al vaciado del Fondo de Reserva
Las estadísticas de la Seguridad Social no dejan margen a la duda: España tiene muchas dificultades para pagar las pensiones y lograr que las prestaciones sean suficientes y sostenibles. Pero, además, nuestro país afronta otro enorme problema: la endeble proporción entre trabajadores en activo y pensionistas, es decir, la mínima ratio ocupados/pensionistas, que al cierre de 2018 era de sólo 2,14 (este guarismo se obtiene dividiendo los 18.914.563 afiliados ocupados en diciembre por los 8.818.371 pensionistas existentes en la misma fecha). Es decir, existen 2,14 trabajadores por cada pensionista.
EVOLUCIÓN RATIO OCUPADOS / PENSIONISTAS
AÑO |
AFILIADOS OCUPADOS |
PENSIONISTAS |
RELACIÓN ENTRE
OCUPADOS/PENSIONISTAS |
2008 |
18.305.613 |
7.700.749 |
2,38 |
2013 |
16.258.042 |
8.315.826 |
1,95 |
2018 |
18.914.563 |
8.806.744 |
2,14 |
Fuente: Elaboración propia con datos del Ministerio de Trabajo
Si el análisis se realiza teniendo en cuenta la cifra total de los afiliados a la Seguridad Social, que eran 20.090.790 personas al cierre de 2018 (aquí también computan los 1.176.227 parados que cobraban prestación en diciembre y por tanto también cotizan), la ratio es algo más favorable: 2,28 afiliados por pensionista. Según el Ministerio de Trabajo, este es el mejor resultado de los últimos seis años, puesto que es preciso remontarse hasta diciembre de 2012 para encontrar un dato más positivo; entonces la relación era de 2,34 cotizantes por cada pensionista.
Miguel A. Bernal (Profesor en FEF).
Estas ratios son “demoledoras”, advierte Miguel Ángel Bernal Alonso, profesor de la Fundación de Estudios Financieros. “Para las personas ocupadas constituye una carga tremenda el pago de las pensiones, teniendo presente que nuestro sistema de Seguridad Social es un sistema de caja; es decir, que el dinero que aporta el trabajador, una ínfima parte se le descuenta de la nómina y una cantidad muy superior (casi el 30% de la nómina bruta) lo ingresa la empresa directamente a las arcas de la Seguridad Social, es utilizado para pagar las pensiones”, detalla Bernal.
Más ocupados, pero ratio insuficiente
Las cifras de afiliación han dado un pequeño balón de oxígeno a la Seguridad Social en 2018, habida cuenta de que los ocupados han aumentado hasta sumar 18.914.563 afiliados; segundo mejor resultado de la serie histórica después de los 19.195.755 trabajadores contabilizados al cierre de 2007. Se trata pues del mejor dato cosechado en los últimos 11 años, según las estadísticas del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.
El problema radica en que los ocupados crecen a mucho menor ritmo que los pensionistas, y así, desde finales de 2008 al cierre de 2018 los trabajadores han aumentado en 608.950 personas (han pasado de 18.305.613 a los ya citados 18.914.563) mientras que los pensionistas han crecido en 1.105.995 personas (en 2008 había 7.700.749 y ahora existen 8.806.744). Es decir, en los últimos diez años los trabajadores se han incrementado en un 3,32% y los pensionistas se han disparado un 14,36%.
La baja ratio entre ocupados y pensionistas es alarmante, en opinión del profesor Miguel Ángel Bernal. “Es lógico que quienes miran hacia el futuro, digamos 10 o 15 años, contemplen con temor el momento de su jubilación, pues no hay constancia de que las pensiones vayan a ser tan generosas como lo son en la actualidad. Esa ratio puede hacer, lo hará de continuar la tendencia demográfica, que nuestros hijos arrastren una losa económica, pues serán ellos con sus pagos futuros quienes financiarán las pensiones de los jubilados.
"Como la esperanza de vida sigue creciendo, cada día que pasa vivimos cinco horas más. Este aumento de la esperanza de vida es letal para el sistema de pensiones, si nos empeñamos en mantener la barrera tiránica de los 65 años, o los 67, que tampoco soluciona nada”, declaraba recientemente José Luis Herce en una entrevista con 65ymás.
José A. Herce (AFI). Foto: Chus Marchador
Este economista, director asociado de Analistas Financieros Internacionales (AFI) y una autoridad en materia de pensiones, alerta de que el sistema necesita reformas urgentes porque “¿de dónde sacamos los casi 20.000 millones de euros que no podemos recuperar vía cotizaciones cada año?”. La clave, para este experto, es que con carreras de cotización fijas, de 35 años, "cada vez acumulamos menos recursos para pagar unas pensiones que se prolongan más y más años. Se calcula que en 2060 habrá un cotizante por un pensionista, lo que implicaría que en el plano individual tendremos el mismo tiempo de jubilación que de trabajo. Es insostenible", sentencia Herce, quien recientemente ha publicado el libro A vueltas con las pensiones (Verssus, 2018).