65ymás
Cuando decenas de empresas están prescindiendo de sus trabajadores más veteranos o les están prejubilando en momentos de crisis, ciertas compañías, como Engel & Völkers, han decidido ofrecer oportunidades para crear tu propio negocio.
En concreto, la mitad de los colaboradores de esta inmobiliaria multinacional especializada en vivienda de lujo se compone de mayores de 50 años. Y no es porque la empresa quiera fidelizar a sus asesores más veteranos, que también, sino que se trata de una apuesta genuina por este segmento de la población.
"El market center que se desarrolló en España lleva poco tiempo, por lo cual es gente que ha conocido el sector gracias a la marca, en la mayoría de los casos. Cuando buscamos personas que quieran colaborar, no importa el sector de donde vengan, queremos gente emprendedora, con muchas ganas y que nos aporte experiencias de otros sectores", explica Sonia Catalán, Sales Director en Madrid capital de la empresa, al presidente del Comité Editorial de 65Ymás, Fernando Ónega, en una entrevista realizada en los estudios de este diario.
"Buscamos personas con ilusión, energía y que sepan valorar las oportunidades. Cuando una persona es madura y ha vivido mucho sabe estimar lo que es tener el respaldo y el acompañamiento de una empresa como la nuestra", asegura.
Condiciones flexibles
Es más, Catalán desvela que ella misma entró hace pocos años a la empresa, concretamente, seis, cuando ya tenía una larga carrera laboral a sus espaldas en otros sectores.
"Estudié la carrera de ADE con un MBA y entré el mundo de la auditoría en banca, pero llegó un momento de la vida en el que opté por dedicarme a la familia, con lo cual estuve retirada del mercado 13 años. Y cuando quise reincorporarme, tenía mucha formación, pero poca experiencia, y no era fácil encontrar mi sitio", recuerda.
Con todo, Engel & Völkers, de cuya sucursal en Madrid es directora de ventas, le permitió desarrollarse y emprender en un sector nuevo. Pero, sobre todo, la marca le ofreció una oportunidad en la que primaba la flexibilidad y la conciliación.
"Me permitió arrancar un negocio con una libertad de horarios y autonomía que hizo que, a nivel familiar, no hubiese una repercusión", comenta Catalán.
Por ello, afirma, la marca es un buen sitio donde cualquier persona con ganas de trabajar puede desarrollarse y, por esa razón, apuestan por el talento sin etiquetas ni límites de edad.
"Hay que pasar filtros para entrar, como en todos lados, porque buscamos aptitud, pero sobre todo, actitud. Y eso, es lo que diferencia a un buen consultor. Así que, en principio, el límite de edad se lo pone uno mismo dentro de la casa", concluye.