La luz se ha encarecido en el último año más de un 30% incluyendo las rebajas impositivas aplicadas a la factura de la electricidad (descontando dichas ayudas, la subida interanual del precio de la luz sería del 49%). Los alimentos y bebidas no alcohólicas son un 11% más caros que en mayo de 2021, con fuertes alzas del coste del pan y cereales, leche, queso, huevos o carne, según los datos del INE correspondientes a mayo. El transporte acumulaba el mes pasado un aumento anual del 14,9%, por el alza de los precios de los carburantes y lubricantes.
Y, mientras tanto, las pensiones contributivas, de las que viven en su gran mayoría casi 10 millones de personas, se han revalorizado este año un 4,1% de media (sumando el 2,5% de subida que les aplicaron en función del IPC medio anual, más el 1,6% que les abonaron por desviación de la inflación de 2021), mientras que el alza de los precios de consumo no parece tener fin. Más grave aún es el caso de las pensiones no contributivas y mínimas, que han experimentado una revalorización del 3% general, más el 1,6% de desvío (un 4,6% en total hasta junio), y a las cuales la inflación está golpeando todavía más, por la ínfima cuantía de estas pagas.
Fuente: INE
La realidad es que con el 10,2% de inflación anual en junio, los precios de la cesta de la compra han subido mucho más del doble de lo que lo han hecho las pensiones en 2022, y se constata un empobrecimiento generalizado de más del 6% para los casi 10 millones de pensionistas.
MADPP: "Hay que subir el 6% de modo inmediato"
Las organizaciones de pensionistas y personas mayores dan la voz de alarma ante la enorme dificultad de los hogares de los jubilados por el encarecimiento inusitado de los precios de la cesta de la compra y la energía. Les preocupa, sobre todo, el panorama desolador de los 1,5 millones de pensionistas que viven en situación de extrema pobreza, muchos de los cuales cobran pensiones no contributivas (existen unas 400.000 personas que reciben de media 421 euros mensuales). Son "personas en situación de vulnerabilidad social y económica, muchas de ellas mujeres de edad o con invalidez permanente para el trabajo, que no tienen cubierta la carrera profesional de Seguridad Social para generar una pensión contributiva", tal como resaltaba recientemente la Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) al valorar la subida del 15% para este tipo de prestaciones, que se ha aprobado en la prórroga del Real decreto-ley de respuesta a las consecuencias de la guerra de Ucrania.
También sufren en mayor medida el golpe de la inflación numerosos pensionistas contributivos que perciben de bajas rentas, especialmente quienes cobran por viudedad, ya que el importe medio de estas pagas ronda los 780 euros mensuales.
Desde el Movimiento Andaluz en Defensa de las Pensiones Públicas (MADPP @MOANDPP) denuncian que un amplio sector de la ciudadanía no llega a fin de mes, siendo "uno de los colectivos más golpeados por esta subida de precios el de los perceptores de pensiones no contributivas. Un colectivo que en el mes de abril ascendía a 444.868 personas (la mayoría mujeres). A ellas, se suman las personas con pensiones mínimas inferiores a: 300 euros/mes que afecta a 496.991 pensiones. Con 500 euros/mes hay 1.612.738 pensiones afectadas. Con 700 euros al mes existen 3.173.342 pensiones. Y cobrando 900 euros mensuales hay 5.535.910 pensiones".
La Comisión de Portavoces del MADPP insta al Gobierno a tomar ejemplo de lo que están haciendo en Europa. "Países como Francia, Alemania o Italia han anunciado una subida de las pensiones en los próximos meses, sin esperar a fin de año, y desde el MADPP hacemos un llamamiento al Ejecutivo para que apruebe una subida del 6% mensual de las pensiones a partir de julio del 2022, como medida extraordinaria".
"Más pobres y olvidados en la toma de decisiones"
Anatolio Díez, secretario general de la Federación de Pensionistas y Jubilados de UGT-UJP (@UJP_UGT), pone de relieve que el colectivo de pensionistas y personas mayores "cada mes que transcurre se siente un poco más empobrecido y olvidado en la toma de decisiones, fundamentalmente los perceptores de las pensiones más bajas, más de 1,5 millones de pensionistas que están en situación de pobreza extrema. Los salarios pierden poder adquisitivo, pese a los esfuerzo de revalorización del SMI, empobreciendo un poco más a los trabajadores. El actual IPC deja en un incremento de menos de 5 puntos reales la revalorización extraordinaria, del 15%, de las pensiones no contributivas o el Ingreso Mínimo Vital, y el bono de 200 euros, que el Gobierno dará a autónomos, parados y trabajadores que cobren menos de 14.000 euros, ha perdido valor antes de ser distribuido".
Díez resalta la continuada pérdida de poder adquisitivo de las personas mayores, "siendo los carburantes, energía, alimentos y bebidas los elementos tractores de este incremento absolutamente desbocado, que deja en una situación de absoluta indefensión a las economías domésticas".
En el mismo sentido se expresa Juan Sepúlveda, secretario general de la Federación de Pensionistas de CCOO(@pensCCOO), para quien el dato de inflación adelantado del mes de junio del 10,2% "es muy mala noticia para la ciudadanía en general y por supuesto para los miles de pensionistas, cuyas pensiones apenas alcanzan los 700 euros". El dato le parece doblemente preocupante porque "la inflación subyacente, que no contempla los precios de la energía y los productos no elaborados, alcanza el 5,5%. Eso significa que los empresarios no solo están trasladando a los precios los costes, sino que están elevando sus márgenes de beneficio de manera considerable".
"Precio tope para gasolinas y electricidad"
Varias organizaciones de pensionistas consultadas por 65YMÁS consideran que se ha formado una tormenta perfecta entre la subida del petróleo, del gas, de la electricidad y de los alimentos, todo ello espoleado por la guerra de Rusia contra Ucrania, y eso ha propiciado que existan "empresas y personas que se están aprovechando para subir los precios más de la cuenta, con lo que están afectando mucho al IPC", denuncia Santiago Menchero,portavoz de ASJUBI40 (@asjubi40). Desde esta asociación de jubilados anticipados reclaman al Gobierno "que haga todo lo posible por reducir la inflación y que este año, sea cual sea el dato del IPC, revalorice las pensiones en función del IPC real, porque no podemos perder más poder adquisitivo. Los pensionistas no podemos buscarnos ningún ingreso extra, estamos condenados a vivir con nuestra paga".
Menchero insta al Ejecutivo a "legislar para impedir que haya empresas o personas que se enriquezcan a costa del empobrecimiento de los jubilados, y si es preciso, que se ponga un precio tope a la gasolina, a la electricidad, a todas las energías. También mejorar el transporte público y hacerlo gratuito mientras dure sigan los precios disparados".
La preocupante evolución de los precios resta impacto real a medidas como la próxima subida del 15% de las pensiones no contributivas. Así, para Juan Manuel Martínez, presidente de CEOMA (@CEOMA_ong), "la situación se hace más complicada ya que el poder adquisitivo disminuye, sabiendo además que la actualización de las pensiones se lleva a cabo una vez en el año". Respecto a la próxima subida del 15% de las pagas no contributivas, admite que "obviamente aliviará, pero tenemos que tener en cuenta que la pensión no contributiva da para muy poco, para una calidad de vida realmente mínima". En este panorama, Martínez espera que los servicios sociales respondan: "Son conscientes de esta situación, y siendo parte del Gobierno, son las responsables de dar y reclamar estas situaciones como parte del Estado de bienestar".
Precios prohibitivos de gasolinas
El precio medio de la gasolina y del gasóleo en España registra récords históricos, consolidándose por encima de los dos euros por litro. Además, en ambos casos se ha comido ya la totalidad de la subvención de 20 céntimos por litro que entró en vigor el pasado 1 de abril y que el Gobierno acaba de extender hasta el 31 de diciembre en el paquete de medidas recién aprobadas.
En concreto, el precio medio del litro de gasolina se sitúa en la cuarta semana de junio en 2,141 euros incluyendo los impuestos, pero sin el descuento que entró en vigor el 1 de abril de 20 céntimos por litro; contando con esa subvención, el litro sería ya casi 12 céntimos más caro que en la última semana de marzo (1,818 euros) y habría absorbido totalmente la ayuda. En el caso del diésel, el precio medio del litro supera el listón de los dos euros (2,076 euros).
Con respecto a hace un año, el precio medio del litro de gasolina se ha encarecido un 55,82%, mientras que en el caso del gasóleo es un 67,68% más caro, aunque sin tener en cuenta la bonificación vigente actualmente. Desde la invasión de Ucrania por Rusia a finales del pasado febrero, los precios de ambos combustibles se han disparado más de un 30%.
Gobierno: "Inflación más alta durante más tiempo"
La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, ha recordado que "la inflación es un problema internacional" que se ha acelerado exponencialmente "como consecuencia de la guerra" en Ucrania, tras un recorte del 70% en las exportaciones rusas de gas y del 40% de petróleo. Frente a esta situación, reivindica el último paquete de medidas aprobadas por el Gobierno, entre ellas la rebaja del IVA a la factura de la luz del 5%, y avisa de que este recorte en el suministro energético procedente de Rusia obliga a prepararse para "un escenario de inflación más alta y durante más tiempo".
Por su parte, el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, también ha reconocido la gravedad de la situación, explicando que "lo que estamos haciendo (con estas medidas) es evitar que el IPC sea cuatro puntos superior. Por tanto, la inflación es alta, la situación es grave, pero creo que es idóneo lo que estamos haciendo y es importante seguir con las reformas".
Sobre el autor:
Pepa Montero
Pepa Montero es redactora especializada en temas de economía. Ha trabajado en medios como El Economista y La Gaceta de los Negocios. Es autora del libro de relatos La casa de las palmeras (Azul como la Naranja, 2013).