A punto de cerrar el año, tenemos un nuevo paquete de medidas anticrisis. Cuando el día 31 de diciembre nos comamos las 12 uvas, ya sabremos que un minuto después, las familias vulnerables contarán con un cheque de 200 euros como ayuda con la cesta de la compra, que el pan, los huevos o la leche estarán exentos del IVA; que el aceite y la pasta están gravados al 5%; ya habremos llenado el depósito porque la ayuda de los 20 céntimos se habrá esfumado salvo que seamos transportistas; también sabremos que las pensiones no contributivas estarán protegidas, que la factura de la luz seguirá con los impuestos rebajados; que la media distancia de Renfe seguirá siendo gratis y que el casero no podrá subir más de un 2% el precio del alquiler.
Son las principales medidas incluidas en el último paquete anticrisis con el que el Gobierno quiere amortiguar los efectos de la inflación sobre los ciudadanos y que divide a los expertos consultados.
“Las medidas universales, como la rebaja del IVA, es matar moscas a cañonazos”, asegura a José Antonio Herce (@_Herce), doctor en Economía, experto en pensiones, socio fundador de LoRIS Retirement y miembro del Comité de Expertos de 65YMÁS. “de esas rebajas se va a beneficiar todo el mundo, todo el que compra pan, aceite y huevos, independiente de que sea un hogar desfavorecido o no” critica.
José Carlos Díez hace una valoración muy positiva de este sexto paquete de ayudas del Gobierno. ”Están muy bien las medidas”, asegura a 65YMÁS el profesor de Economía de la Universidad de Alcalá, socio de Luafund y uno de los economistas más influyentes en las redes sociales (@josecdíez). “El ahorro con el fin de la ayuda al combustible se usa mejor en un cheque para las rentas medias y bajas, y la rebaja del IVA, pese a suponer menores ingresos no supone un coste. Aliviará la inflación, sobre todo para las rentas más bajas y es transitorio, por lo que no afecta al déficit estructural”, sostiene.
“Hay que concentrar las ayudas realmente en los que más las necesitan” coincide José Luis Sancha, quien destaca que en el paquete de medidas aprobado por el Gobierno “si que hay una concentración de ayudas notable para los consumidores vulnerables, y esto es importantísimo”. Además, el profesor de la Universidad Pontificia de Comillas (@UCOMILLAS), colaborador del Club Español de la Energía (@Enerclub) y autor del libro Presume de entender (a fondo) la factura de la luz y el gas (Ed.ICAI), cree que “Las bajadas de impuestos siempre hay que contemplarlas desde un punto de vista coyuntural, y mientras la guerra no termine, la coyuntura seguirá siendo complicada”.
Este nuevo paquete del gobierno incluye la extensión de algunas medidas ya aprobadas, y a las que se les puso como horizonte temporal el final de este 2022 que ya se esfuma, otras medidas nuevas, pero también el final de alguna de ellas. Un plan que tendrá un impacto económico de 10.000 millones de euros, tal y como detallo Pedro Sanchez.
Es una de las medidas más novedosas de este plan anticrisis: un cheque de 200 euros para ayudar a que las familias más vulnerables puedan sortear los efectos de la inflación. Hablamos de una ayuda directa en un pago único que beneficiará, según ha explicado Pedro Sánchez “a cuatro millones de familias con rentas menores a 27.000 euros”.
“Es mucho más acertado que el Gobierno destine lo que vaya a ahorrar con las ayudas al combustible en un cheque para las rentas medias y bajas”, asegura José Carlos Díez. Ahora, “lo que tiene que hacer el gobierno es establecer quién debe recibir estas ayudas, e incluso otras más, hacer un censo de los hogares menos favorecidos, y ya ha tenido tiempo de sobra con el ingreso mínimo vital, ir actualizándolo y hacerles llegar las ayudas que sean necesarias para que puedan completar sus ingresos”, explica José Antonio Herce. En su opinión, el problema radica en que “el gobierno tropezó porque no sabía a quién tenía que dar el ingreso mínimo vital, y sigue sin saberlo, dos años después”.
Desde los sindicatos, CCOO lamenta que el Gobierno haya optado por una medida “tan limitada”. Apuntan a la necesidad de un cheque de 300 euros para 9,8 millones de personas, donde el 38% se ubican en la clase media.
José Carlos Díez apunta a “el coste de este cheque es muy elevado” como para hacerlo más extensivo y destaca positivamente que “afecta a las mismas familias que el acuerdo de hipotecas con la banca”.
Finalmente, el Gobierno ha accedido y bajará el IVA de algunos alimentos, pero no todos. Los alimentos de primera necesidad se quedarán sin gravamen, es decir, exentos de IVA. Hablamos del pan, la leche, los huevos, legumbres, frutas y verduras, queso, harinas, y cereales, que ya tenían un IVA superreducido del 4% y ahora pasarán al 0%. Por otro lado, el IVA del aceite y la pasta pasarán al 5% desde el 10% anterior.
“Las medidas universales, como la rebaja del IVA, es matar moscas a cañonazos, de esas rebajas se va a beneficiar todo el mundo, todo el que compra pan, aceite y huevos, independiente de que sea un hogar desfavorecido o no. No veo por qué hay que hacer esa bajada universal”, desaprueba José Antonio Herce. “Hay que recordar que bajar el IVA es una medida contraindicada para luchar contra la inflación, porque estimula el consumo”, añade.
“La rebaja del IVA supone menores ingresos para el Estado, pero no supone un coste”, valora José Carlos Díez. “Alivia los efectos de la inflación, sobre todo a las rentas más bajas” porque las bajadas del IVA no han sido generalizado sino muy focalizado en los productos de primera necesidad “y es transitorio, por lo que no afecta al déficit estructural”, añade.
En efecto, la rebaja del IVA ha sido limitada y se han quedado fuera la carne y el pescado, que seguirán gravados con un 10%. La patronal de las pescaderías españolas ha mostrado su “absoluta decepción”. "Las llamadas fuerzas progresistas no han visto necesario apoyar el consumo de unos productos indispensables para la salud, recomendados por el propio Ministerio de Consumo al menos tres veces a la semana", aseguran.
Respecto a esto, José Carlos Díez cree que “está bien así” e insiste en que “la rebaja del IVA de los alimentos, junto a la rebaja del IVA del gas y electricidad, y el cheque, es mucho dinero”.
Los productos que componen la cesta de la compra se dispararon un 15,4% en noviembre, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), mucho más de lo que subió el resto de elementos que componen el IPC, así como la inflación general. Un drama para muchas familias vulnerables y pensionistas, que han visto cómo llenar la nevera se hace complejo, impidiéndoles acceder a productos frescos. “Los hogares más desfavorecidos, que tienen dificultad para comprar esos bienes, deben recibir una ayuda, pero no todos”, insiste Herce. “Muchos pensionistas no necesitamos que nos rebajen el IVA, nos viene bien como a todo el mundo, pero objetivamente no lo necesitamos. Hay muchos que sí, de modo que las ayudas deben ser para ellos, pero solo para ellos”.
Después de nueve meses en vigor, ya podemos decir adiós al descuento de 20 céntimos por litro a la gasolina y el diésel para la mayoría de ciudadanos. El café para todos se ha terminado, algo que, por mucho que nos duela, coinciden en aplaudir todos los expertos consultados. “Hay que concentrar las ayudas realmente en los que más las necesitan. Los consumidores vulnerables han de ser prioritarios en este tipo de paquetes de ayudas, ya no pueden ser generalizadas”, explica José Luis Sancha. Tambien aplaude la medida José Antonio Herce, “sobre todo cuando no ha pasado el peligro de la inflación subyacente al alza, no sabemos lo que va a hacer la inflación subyacente”.
A partir del domingo, día 1 de enero, la bonificación a los carburantes quedará limitada a los sectores profesionales más afectados por el alza del petróleo. Transportistas y sectores como el de la agricultura o la pesca serán los únicos beneficiarios de este descuento en el litro de combustible en los próximos meses. “Extender este descuento a los ciudadanos que lo necesiten con rentas más bajas es muy complejo. Por eso el gobierno ha buscado otra fórmula para compensar a las familias vulnerables, como es el cheque de los 200 euros”.
El sindicato liderado por Unai Sordo también coincide en que limitar la subvención de 20 céntimos para el consumo de carburantes a colectivos profesionales parece "razonable" dado el alto coste de esta medida, en torno a 6.000 millones, y su carácter "marcadamente regresivo".
Las medidas que sí continuarán son las diferentes reducciones de impuestos en la factura eléctrica. Hablamos del IVA a la electricidad, que se mantiene en el 5% y la reducción del Impuesto Especial sobre la Electricidad, que seguirá en el 0,5% desde el 5,1% anterior. Pese a que el mercado energético lleva concediendo cierta tregua a los recibos, el Gobierno ha preferido mantener estas ayudas en punto tan delicado como el de la factura de la electricidad.
“Ahora mismo la factura se ha recuperado bastante, hemos tenido unos meses ahora, sobre todo noviembre y diciembre, que son comparables a mayo del año pasado, que es cuando empezaba la crisis. Desde ese punto de vista, estamos en una situación razonable, y no se puede decir ahora mismo que la factura de la luz es cara” explica José Luis Sancha. “Pero si se recuperan esos impuestos, evidentemente la factura de la luz y la del gas, evidentemente, subirán. Hay que sopesar esto con el detraimiento en los ingresos correspondientes”.
“La bajada de impuestos siempre hay que contemplarla desde un punto de vista coyuntural, la cuestión es saber en qué momento la coyuntura indica que hay que recuperar los impuestos. La guerra no ha terminado, qué duda cabe, por lo tanto, quizá era, en efecto, prematuro recuperar el IVA y el impuesto eléctrico”.
El bono social continuará como hasta ahora el año que viene. Se prorrogarán seis meses más las suspensiones que pesan sobre desahucios y lanzamientos para hogares vulnerables. En todo 2023, estará prohibido el corte de suministros esenciales. “Renovar todas estas ayudas es muy acertado” asegura Díez. Coincide Sancha: “Es muy de destacar el bono social, el bono térmico, el bono de los hogares que tengan desempleados, la prórroga en la prohibición de cortes de suministro a clientes vulnerables. Ahí si que hay una concentración de ayudas notable, y es un tema importantísimo”
“Ahora mismo, la factura de un consumidor vulnerable, y no digo vulnerable severo, está casi a la mitad de lo que era el año pasado”, explica Sancha. “Por eso es muy importante que se mantengan los beneficios para los consumidores vulnerables”.
No es exactamente una ayuda, pero también se ha aprobado en el Consejo de Ministros y el presidente del Gobierno ha querido destacarlo en su comparecencia. Su objetivo: retrasar la jubilación en la Sanidad. "Va a permitir que profesionales sanitarios de atención primaria, médicos de familia y pediatras en edad de jubilación puedan continuar durante los próximos 3 años compatibilizando el 75% de su pensión con el servicio activo a tiempo completo o a media jornada" ha dicho Sánchez.
El tope al precio del gas, o excepción ibérica, seguirá aplicándose. Durante la comparecencia del Presidente del Gobierno posterior al Consejo de Ministros, ha sacado pecho de sus resultados. En efecto, los expertos coinciden en el éxito de esta medida. “Si no se hubiese tomado esta medida, el coste de la factura de la luz sería a día de hoy, de media, sería un 15% más elevada”, asegura José Luis Sancha. “En lo que va de año, acumulamos unos 5.000 millones de euros los ingresos que se han reducido en las centrales de generación, que son los que han ido a bajar la factura de los consumidores españoles y portugueses”
Las subidas en los precios de los alquileres seguirán blindadas. Hasta el 31 de diciembre de 2023, los caseros no podrán subir el precio de sus alquileres más allá del 2%. Asimismo, se permitirá extender seis meses la vigencia de los contratos de alquiler que finalicen antes del 30 de junio del año que viene. “Los límites generales al alquiler para todos, así como la rebaja de precios para todo el mundo, ,independientemente de que los puedan pagar o no, no es una política adecuada en este momento”, insiste José Antonio Herce.
Respecto al transporte, Cercanías, Rodalies y Media Distancia de Renfe seguirán siendo en 2023, gratuitos. Una medida para la que el Gobierno ha había aprobado una partida de 700 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado destinados al Ministerio de Transportes. Raquel Sánchez, su titular, venía reclamando a las comunidades autónomas y entes locales que completen estas ayudas para que la rebaja o la gratuidad se extiendan.
Así, el Gobierno aplicará una rebaja del 30% del transporte público urbano e interurbano solo allí donde los Gobiernos autonómico y municipal lo complementen hasta el 50%.
De nuevo, los expertos critican las ayudas generalizadas. “Dar una ayuda a un mayor por el hecho de serlo, como un abono transporte gratis, también es edadista. Debemos defender el equilibrio entre generaciones y a los más desfavorecidos, tengan la edad que tengan. Los mayores que afortunadamente no necesitamos esas ayudas deberíamos estar abogando para que las ayudas fueran para los hogares más necesitados, independientemente de la edad de su cabeza de familia” explica José Antonio Herce.
Pese a que el invierno excepcionalmente cálido que estamos viviendo ha ayudado, el miedo a que la oferta y la demanda de gas vuelva a tensionarse, ha llevado a incluir ayudas para las industrias consumidoras de gas. En total, serán ayudas por valor de 950 millones de euros. Tal y como ha explicado el presidente del Gobierno habrá 450 millones en ayudas directas para sectores en riesgo para la viabilidad y 500 millones para una nueva línea ICO para estos sectores.
“Esos 500 millones se quedan cortos”, considera José Carlos Díez, quien recuerdas que “esas empresas han entrado en pérdidas y tienen graves problemas de financiación, sobre todo de circulante”.
Los agricultores recibirán 300 millones de euros en ayudas directas para compensar el aumento de los costes por el encarecimiento de los fertilizantes.
