La sensación de pagar más en el supermercado y volver a casa con menos productos es real. También, que un sobre de jamón de York o un paquete de legumbres, ahora, cunden menos. La cesta de la compra de los sénior cada vez permite menos caprichos. La compra se come la pensión. Uno de cada cinco euros de la pensión de jubilación media va exclusivamente para pagar los alimentos básicos y necesarios para sobrevivir. Sin contar con el resto de productos que componen la cesta de la compra ni los suministros, como la luz o el gas, también disparados. Pese a dar un ligerísimo respiro en el mes de abril, la inflación interanual se sitúa en el 8,4% y las principales cadenas de supermercados acumulan subidas cercanas al 10% en sus precios. La subida de la pensión del 2,5% de enero pasado es claramente insuficiente para frenar la pérdida de poder adquisitivo. Una pensión de mil euros pierde más de 80 euros de valor mensual por el encarecimiento de la vida.
El valor de la cesta de la compra con productos alimenticios básicos para una persona mayor en España, en marzo de 2022, es de 229,52 euros, según un análisis de Picodi. Según este estudio, pagar cada mes los alimentos básicos, aquellos que aseguran únicamente la supervivencia, equivalen al 20,4% de la pensión de jubilación media española (1.251,54 euros). Una quinta parte de los ingresos van solo para alimentación básica, sin tener en cuenta los productos de higiene y droguería, también imprescindibles, resto de elementos con los que llenar la despensa, suministros como la luz o el gas, o el vestido y el calzado.
Este estudio ha creado una cesta de alimentos compuesta de diez grupos de productos: pan leche, yogur, huevos, arroz, queso, carne, pescado, fruta y verdura. Se trata de una cesta con los productos que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Ministerio de Salud son imprescindibles para la nutrición de las personas mayores. Según explican los analistas de Picodi, “aunque la lista es muy limitada, estos productos, en las cantidades dadas, son suficientes para cubrir los requerimientos mínimos mensuales de nutrientes de una persona mayor promedio”. Las cantidades, y su importe, son los siguientes:
En total, 229,52 euros a marzo de 2022, solo para productos alimentarios básicos en España, que equivalen a más del 20% de la pensión de jubilación media española. Picodi.com ha analizado las pensiones de jubilación para verificar si son capaces de proporcionar una calidad de vida mínima, en una comparativa internacional.
La cesta de la compra se ha encarecido un 9,4% en un año, aunque en lo que va de 2022 el acelerón es mayor. Según un estudio pormenorizado de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Las frutas, las verduras y el aceite son los alimentos que más se encarecen, aunque hay alimentos de un uso diario que también contribuyen a la subida global como los huevos o la leche.
El aceite de oliva suave de marca blanca y el aceite de girasol de marca blanca, han subido en torno a un 50%. Se trata de un producto de gran importancia para los mayores, ya que es indispensable para cocinar. Con subidas entre un 30 y un 40% se encuentran algunos productos de pasta, los plátanos de Canarias y el salmón en rodajas.
Los pescados también han subido una media del 16% en el último año según el análisis de la OCU, los alimentos envasados un 11%, al igual que los lácteos, que también suben un 11%. Si entramos más en detalla en cada categoría, vemos que la leche se ha encarecido un 9%, los huevos un 6%, y los yogures un 5%. En general, las subidas se sienten especialmente en los productos de marca blanca, puesto que partían de precios más bajos. Curiosamente la cebolla, como recoge la OCU, es uno de los pocos artículos que baja en el último año, un 8%. Otros alimentos con flecha descendente son el solomillo de cerdo, que se abarata un 9%.
Estas subidas en los precios de la cesta de la compra hacen que la factura se eleve en 50 euros cada mes. Para la OCU, estas subidas son “muy preocupantes” ya que, de mantenerse, supondrán un incremento de más de 500 euros al año en productos de la cesta de la compra de una familia media.
Hace años, los paquetes de salchichas Frankurt tradicionales incorporaban siete unidades. Pero desde hace ya bastante tiempo, cada paquete de salchichas Frankurt se presenta con seis unidades, un cambio que han aplicado todas las marcas. Sin necesidad de mover el precio, la rentabilidad del producto aumenta y se ven compensados el aumento de los costes.
Con la crisis financiera también se popularizaron los envases de productos que se promocionaban con precios muy económicos y redondos, como por ejemplo sobres de lonchas de pechuga de pavo a un euro. Pero incluían menos cantidad de producto. Un fenómeno llamado reduflación, que surge en los momentos de crisis o dificultades económicas, y que se está volviendo a dar entre los principales fabricantes y compañías de alimentación. Se trata de hacer los envases y paquetes más pequeños, incluir menos producto, y mantener el precio habitual. Suben los precios, pero el cliente no lo percibe a simple vista.
Pese a que las diferentes organizaciones de consumidores la reduflación de un “engaño”, es una práctica legal, dado que los nuevos paquetes especifican en cambio de peso o cantidad. Por eso, desde las asociaciones recomiendan fijarse no en el precio final del producto, sino en el precio por kilo, gramo o litro, que suele aparecer en letra pequeña en los lineales de los supermercados. Es la mejor manera de tener un elemento real de comparación.
Llenar la cesta de la compra es cada vez más difícil para todos, pero especialmente para los más vulnerables. Los precios desbocados de la alimentación están pasando factura a todos los pensionistas y, sobre todo, aquellos que cobran las pensiones más bajas. Ahora mismo, los precios de consumo son un 8,4% más caros que hace un año, mientras que las pensiones se han revalorizado un 2,5%, y un 3% las mínimas y las no contributivas.
La Federación de Pensionistas y Jubilados de UGT-UJP (@UJP_UGT) lo explica de forma muy gráfica: una persona con 1.000 euros de pensión ha visto cómo esta se ha incrementado un 2,5%, es decir, 25 euros mensuales, pero el IPC interanual está en el 8,4%. Es decir, “esa nómina de 1.000 euros ha perdido 84 de valor mensual si aplicamos el acumulado de forma lineal".
No todas las cadenas de supermercados han subido de la misma manera sus precios para actualizar sus tarifas a la subida de costes. Carrefour, la que más ha subido sus precios, acumula una subida del 12,1% en los últimos doce meses mientras que los precios en Mercadona han subido un 11,4%. En El Corte Inglés e Hipercor la subida ha sido del 7,7%.
Ahora bien, a la hora de analizar las subidas de precios en las diferentes enseñas, también conviene tener en cuenta del punto del que partían cada una de las cadenas de supermercados. De esta forma, según la OCU, tanto Mercadona como Carrefour siguen manteniéndose entre las cadenas nacionales más baratas, junto con Alcampo.
Los precios se han disparado en el primer trimestre de este 2022 por los efectos de la guerra en Ucrania, el encarecimiento de los carburantes y el paro de los transportistas, aunque las subidas, más moderadas, se vienen produciendo desde el año pasado. Si tomamos como referencia los últimos 15 meses, esto es, desde diciembre de 2020 hasta marzo de 2022, de acuerdo al análisis de la OCU, se han producido subidas cercanas al 10% en todas las cadenas de supermercados.
Con la fuerte subida de la inflación, la OCU recomienda "ahora más que nunca" que los consumidores adquieran productos de temporada y priorizar los supermercados más baratos, ya que eligiendo bien el lugar donde se hace la compra, pueden obtenerse ahorros muy relevantes.
Por último, ante la importancia de las subidas de los precios de la alimentación de productos básicos y las sombrías perspectivas en la evolución futura de los precios, OCU ha reclamado a las diferentes administraciones que se planteen la creación de cheques de alimentos para las familias más vulnerables.
