Malas cifras de empleo en el cuarto trimestre de 2022, que confirman la ralentización del mercado laboral, ya que, según los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), entre octubre y diciembre, la tasa de paro creció hasta el 12,9%, lo que supone un alza de 21 centésimas sobre la cifra de parados al finalizar septiembre. El cuarto trimestre del pasado año terminó con 43.800 parados más respecto a los tres meses anteriores y se sobrepasó la barrera de los tres millones de desempleados,al situarse en 3.024.000 la cifra total.
Fuente: Europa Press
De igual modo, el volumen deocupados descendió en 81.900 personas en el cuarto trimestre de 2022 respecto al trimestre previo, situándose el total de la población ocupada en 20.463.900 personas en España.
Fuente: EPA
Los datos de todo el año, positivos pero empeorando
Por lo que se refiere al conjunto de 2022, el paro bajó en 79.900 personas, lo que supone un 2,6% menos que en 2021, mientras que la cifra de empleo creció en 278.900 puestos de trabajo (+1,4%).
Todos estos datos surgen de la Encuesta de Población Activa (EPA), publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), y permiten constatar cómo las cifras globales del año 2022 son positivas, pero se encuentran muy alejadas de los buenos resultados cosechados por el mercado laboral en 2021, cuando se generaron 840.700 empleos y el paro disminuyó en más de 600.000 personas. Son mejores que las cifras de 2020, pero hay que tener en cuenta que, en ese año, el estallido de la pandemia llevó a los peores registros de paro y ocupación desde 2012.
Fuente: EPA
Tal como se refleja en la EPA, exceptuando 2020, el año del Covid, la ocupación registrada en 2022 es el peor dato desde 2013, año en el que se destruyeron 204.200 empleos. En el caso del paro, sin contar con 2020, el descenso de 2022 sería el peor registro desde 2012, cuando el desempleo aumentó en más de 700.000 personas.
Fuente: Europa Press
Con la disminución cosechada en 2022, el paro acumula dos años consecutivos de retrocesos. En el caso de la ocupación, se encadenan dos años de crecimiento del empleo, tras un 2020 en el que se destruyeron 622.000 puestos.
Más paro para los trabajadores sénior
Por grupos de edad, el paro descendió en el último trimestre de 2022 entre las personas de 16 a 19 años (-36.600) y entre las de 20 a 24 años (-39.300). Sin embargo, aumentó en 86.200 entre los de 25 a 54 años y en 33.400 entre los de 55 y más años.
Más en detalle, según la EPA, el número de hombres en paro aumentó al cierre del año pasado en 64.200 durante el cuarto trimestre, situándose en 1.401.000. Frente a este resultado, entre las mujeres, el desempleo se redujo en 20.400, hasta 1.623.000. De esta manera, la tasa de paro femenina se situó en el 14,61%, mientras la masculina fue del 11,32%.
Más de un millón de hogares con todos en paro
Los hogares con todos sus miembros en paro subieron en 2022 en 23.600, un 2,3% más que en 2021, hasta situarse de nuevo por encima del millón, cifra que se había conseguido abandonar en el tercer trimestre del año pasado, según la Encuesta de Población Activa.
En concreto, 2022 cerró con 1.047.500 hogares con todos sus miembros en el desempleo después de que en el último trimestre se incrementaran en 70.100, un 7,1% más que en el trimestre anterior. Por su parte, los hogares con todos sus integrantes ocupados aumentaron el año pasado en 183.300 (+1,6%), hasta un total de 11.255.300 hogares. Sin embargo, en el último tramo del año se perdió el máximo histórico alcanzado al terminar el verano, debido a que en el cuarto trimestre los hogares con todos sus miembros ocupados bajaron en 38.900, lo que supone un 0,3% menos que en el trimestre anterior.
Más en detalle, la EPA desvela que los hogares con al menos un activo subieron en 2022 en 119.700 respecto a 2021 (+0,87%), hasta los 13,84 millones, mientras que en el último trimestre del año repuntaron en 18.400 con relación al trimestre anterior (+0,1%). Por su lado, los hogares en los que no hay ningún activo se incrementaron en 91.100 en el conjunto del año pasado (+1,7%), hasta los 5,35 millones. En el último trimestre de 2022, estos hogares subieron en 52.100 (+1%).
La EPA refleja asimismo que, al finalizar 2022, en España había 576.800 hogares sin ningún perceptor de ingresos, 13.100 más que un año antes. Exceptuando 2020, año en el que se declaró la pandemia, la cifra de hogares sin ingresos de 2022 es la más alta en un cierre de ejercicio desde 2018, cuando las familias que estaban en esta situación superaron las 593.000.
El Gobierno admite la ralentización
Según ha valorado el Ministerio de Asuntos Económicos, la creación de empleo bajó su ritmo en el cuarto trimestre de 2022, "en línea con la ralentización de la economía mundial", aunque se mantuvo en el entorno de los 20,5 millones de ocupados. El Departamento de Nadia Calviño también ha resaltado que los datos de la EPA de 2022 reflejan el cambio "estructural" que ha supuesto la reforma laboral en el mercado de trabajo, pues la contratación indefinida registró un "máximo histórico" de 14,3 millones de trabajadores y la tasa de temporalidad se redujo más de 7 puntos, hasta mínimos del 17,9%, cifra que "se acerca" a la media europea.
De hecho, según los datos del INE, el repunte del empleo en 2022 lo acapararon los asalariados con contrato indefinido, que aumentaron en la cifra récord de 1.591.100 personas (+12,5%), frente a un descenso de los asalariados con contrato temporal de 1.193.800 (-27,7%).
El sector privado tira de la ocupación
El incremento de la ocupación se concentró en 2022 en el sector privado, con la creación de 228.200 empleos (+1,4%), frente a los 50.700 que se crearon en el sector público (+1,4%). No obstante, este finalizó el año en un nuevo máximo de 3.526.200 ocupados, en tanto que el empleo privado acabó 2022 con 16.937.600 trabajadores.
El número de trabajadores asalariados aumentó el año pasado en 397.300 ocupados (+2,3%), en tanto que el de trabajadores por cuenta propia se redujo en 111.200 (-3,5%).
El incremento de la ocupación en 2022 fue, en términos absolutos, ligeramente superior entre los varones, con 146.800 ocupados más (+1,3%), frente a la creación de 132.100 empleos entre las mujeres (+1,4%). También el paro descendió más entre los hombres (-47.200 desempleados) que entre las mujeres (-32.600 desempleadas).
Sobre el autor:
Pepa Montero
Pepa Montero es redactora especializada en temas de economía. Ha trabajado en medios como El Economista y La Gaceta de los Negocios. Es autora del libro de relatos La casa de las palmeras (Azul como la Naranja, 2013).