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La Seguridad Social (@info_TGSS) destinó el presente mes de agosto 9.904 millones de euros al pago de pensiones contributivas, un 2,3% más que en el mismo mes de 2019, ha informado este viernes el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
En la nómina de agosto se han abonado 9.777.556 pensiones contributivas, 10.506 prestaciones más que en julio.
Más de dos tercios de la nómina se destinaron al abono de las pensiones de jubilación, que sumaron un importe de 7.092,19 millones de euros, casi un 2,9% más que en agosto del año pasado.
A las pensiones de viudedad, se destinaron 1.710,3 millones de euros, un 1,5% más que hace un año, mientras que a las prestaciones por incapacidad permanente se dedicaron 936,2 millones de euros (-0,34%). Por su parte, al pago de las prestaciones de orfandad se destinaron 139,8 millones (+1%), y a las prestaciones a favor de familiares, 25,4 millones de euros (+3,08%).
La pensión media de jubilación alcanzó en agosto los 1.164,31 euros, un 2,1% más que el año pasado, mientras que la pensión media de viudedad fue de 727,04 euros al mes (+1,97%).
La pensión media del sistema, que comprende las distintas clases (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares), aumentó un 2,07% interanual, hasta situarse a 1 de agosto en 1.012,94 euros mensuales.
EL IMPACTO DEL COVID: MENOS ALTAS Y MÁS BAJAS
Con datos de julio, el número de altas de pensión registradas fue de 49.521 pensiones, un 7,1% más respecto al mismo mes del año pasado, debido a los aumentos próximos al 12% en las altas de jubilación y viudedad.
En el acumulado entre enero y julio se han producido 293.752 altas, es decir, nuevas pensiones, cifra un 14,8% inferior a la del mismo periodo de 2019. Al mismo tiempo que han bajado las altas, han subido las bajas: en los siete primeros meses del año han causado baja 317.669 pensiones, un 12,9% más. Los mayores aumentos de bajas los registran las pensiones de viudedad (+16,5%) y de jubilación (+14,1%).
El Ministerio subraya que estos datos reflejan el efecto de la pandemia y obedecen, en parte, al cierre de oficinas durante el estado de alarma y a la situación de confinamiento, que hizo que "muchos ciudadanos" aplazaran sus gestiones con la Seguridad Social.
"También hay que tener en cuenta cómo ha influido la pandemia en términos de mortandad sobre el conjunto de la población y, en mayor medida, sobre el colectivo de las personas de mayor edad", añade.