En España, la Seguridad Social paga cada mes 9,95 millones de pensiones contributivas, de las cuales más de 6,26 millones son de jubilación y unos 2,35 millones de viudedad. La pensión media de jubilación tiene una cuantía de 1.256,96 euros mensuales, y la pensión media del sistema (la que comprende las distintas clases: jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares) posee un importe bastante inferior, de solo 1.092,18 euros al mes, con datos a fecha 1 de septiembre, recién publicados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que dirige José Luis Escrivá.
Sin embargo, con ser baja la pensión contributiva media, del total de 9,95 millones de pensiones contributivas, hay 2,2 millones que llevan incluido el complemento a mínimos que destina el Estado para que la prestación tenga un importe suficiente que salve a sus perceptores de caer por debajo del umbral de la pobreza. Es decir, el 22,6% del total de pensiones no SOVI (este es un régimen cerrado, a extinguir, que no se suele comparar para no distorsionar los resultados), o lo que es lo mismo, casi uno de cada cuatro pensionistas sería oficialmente "pobre" si no le concedieran este plus, que reciben quienes con sus cotizaciones no han sido capaces de generar una pensión suficiente de acuerdo a los cánones de la Seguridad Social.
Fuente: Seguridad Social
La cuantía mensual y anual de las pensiones mínimas varía según el tipo de pensión: jubilación, viudedad, etc, y en función de que el pensionista haya cumplido determinada edad y de que tenga o no familiares a su cargo, siempre que no supere un límite de ingresos establecido.
Un 45% de pagas complementadas son de jubilación
Las estadísticas de la Seguridad Social constatan el riesgo de pobreza en la vejez, que se manifiesta en que, por ejemplo, 996.761 pensiones de jubilación son tan escasas por sí solas, que el Estado tiene que complementarlas con el plus a mínimos. Una situación grave, ya que se trata de prestaciones contributivas, es decir, las que cada trabajador se gana con las cotizaciones que va pagando durante toda su carrera laboral.
Con los datos oficiales a fecha 1 de septiembre, del total de 2,2 millones de pensiones complementadas, el 45,4% son de jubilación (ver tabla inferior).
PENSIONES COMPLEMENTADAS A MÍNIMOS (1/09/2022)
Fuente: Seguridad Social
¿Y cuánto cobra como mínimo un jubilado en España? La cuantía de estas pensiones se fija cada año en los Presupuestos Generales del Estado, y para 2022 los importes oscilan entre los 638 euros mensuales para menores de 65 años con cónyuge no a cargo, y los 890,50 euros que perciben como mínimo los jubilados con 65 años y cónyuge a cargo. Los jubilados procedentes de situaciones de gran invalidez perciben una paga mínima más elevada (ver tabla inferior).
CUANTÍAS MÍNIMAS DE PENSIÓN EN 2022
Fuente: Seguridad Social
La paga mínima de viudedad, muy lejos del SMI
La Seguridad Social detalla en su web las cuantías mínimas de las pensiones de viudedad para 2022, que oscilan entre los 546,80 euros mensuales que tienen derecho a percibir las y los menores de 60 años, y los 834,90 euros al mes establecidos este año para pensionistas con cargas familiares (ver gráfico inferior).
En todos los casos, la nómina mínima a cobrar queda muy por debajo del salario mínimo interprofesional (SMI), establecido en 1.000 euros al mes. Y quienes más sufren esta penuria económica en la vejez son las mujeres, que suponen el 96% de quienes cobran viudedad en España en la actualidad.
CUANTÍAS MÍNIMAS DE PENSIÓN EN 2022
Fuente: Seguridad Social
Además, y según los últimos datos disponibles, las pensiones de viudedad son las segundas que más necesitan los complementos a mínimos para no caer bajo el umbral de la pobreza, en concreto, de los 2,2 millones de pensiones con mínimos, 615.356 son de viudedad (el 28,04%).
'Otoño caliente' por la pensión mínima y la inflación
Los movimientos y plataformas de pensionistas de todo el país han hecho de las pensiones mínimas uno de sus caballos de batalla desde hace años, y esta es una de las exigencias que sustentan la gran manifestación nacional del 15 de octubre en Madrid.
En particular, el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria lleva varios años movilizándose, con sus concentraciones de los lunes al sol, donde demandan una pensión mínima de 1.080 euros y una pensión de viudedad del 100%, entre otras exigencias históricas, a las que recientemente han unido su denuncia de los abusos bancarios.
De cara al próximo 15 de octubre, los organizadores de esta gran jornada de movilización (COESPE, ASJUBI40, EHPM, MADPP, Modepen, Unidad COESPE y plataformas de pensionistas de Badajoz y Móstoles) sitúan entre sus reivindicaciones irrenunciables "la revalorización de pensiones y salarios de acuerdo al IPC real, el aumento de las pensiones mínimas y parar la privatización del sistema público de pensiones a través de los planes de pensiones de empleo".
La situación de penuria es insostenible, según denuncia la comisión de portavoces del Movimiento Andaluz en Defensa de las Pensiones Públicas: "Existen "cientos de miles de hogares, en los que la pensión no supera los 900 euros y que, hasta hace unos meses, gracias a sus economías de guerra, podían ayudar en mayor o menor medida a sus hijos en dificultades, hoy no pueden hacerlo. Ocurre además que a los pensionistas contributivos, muchos por debajo del umbral de la pobreza, no se les ha incrementado la pensión el 15% ni se les ha dado un abono extra de 200 euros, como sí se ha hecho con el Ingreso Mínimo Vital y las pensiones no contributivas".
Un 4,6% de subida frente al 10,5% de IPC
El importe y requisitos de las pensiones mínimas los decide cada año el Gobierno dentro de los Presupuestos Generales del Estado, así como la revalorización que se les aplica cada día 1 de enero. En 2022, la subida ha sido del 3%, a lo que hay que sumar el 1,6% de paguilla por el ajuste de la inflación respecto al incremento de 2021.
En total, las pagas mínimas han subido un 4,6% este año, que es un porcentaje ínfimo teniendo en cuenta la inflación desbocada (el 10,5% de IPC en el mes de agosto), que agujerea especialmente el bolsillo de los pensionistas que menos cobran.
Sobre el autor:
Pepa Montero
Pepa Montero es redactora especializada en temas de economía. Ha trabajado en medios como El Economista y La Gaceta de los Negocios. Es autora del libro de relatos La casa de las palmeras (Azul como la Naranja, 2013).