Incapacidad permanente: los informes médicos que puedes presentar en 2025

La incapacidad permanente es una ayuda que concede la Seguridad Social a aquellos trabajadores que ven reducida o anulada su capacidad laboral y así cubrir la pérdida de ingresos que sufre el trabajador.

Para que te concedan la incapacidad, habrá que pasar el Tribunal Médico, que para quien no lo sepa, es el equipo que se encarga de valorar y evaluar las solicitudes de incapacidades laborales. Este equipo está formado por inspectores, facultativos, inspectores de trabajo, inspectores de la seguridad social y otros funcionarios, y como se decía, se encargan de evaluar los posibles casos de incapacidad laboral y las posteriores revisiones.

El Tribunal es una pieza clave de la Seguridad Social para garantizar que todo trabajador que lo necesite reciba una prestación y no quede desamparado.

Además de revistar las solicitudes, también evalúan a los trabajadores, así como su capacidad de mejora y tienen en cuenta toda la documentación médica que el solicitante aporte para tomar su decisión.

Precisamente, la documentación en este encuentro juega un papel clave y por eso es importante saber qué debe contener los documentos que tienen que entregar. Uno de los más importantes es el informe médico, un documento que recoge la siguiente información, según explica Fidelitis:

• Datos personales del paciente.
• Fecha y registro del hospital o centro médico.
• Antecedentes médicos.
• Diagnóstico clínico.
• Intervenciones y pruebas realizadas.
• Seguimiento médico.
• Tratamientos recibidos.
• Limitaciones anatómicas, psicológicas y funcionales.
• Necesidad de ayuda de tercera persona.

Además de esta información, se puede pedir que el informe contenga también la cronificación de las patologías, indicar que solo existen tratamientos paliativos para la situación del trabajador e indicar que el trabajador ya ha agotado todos los tratamientos posibles para mejorar.

Es decir, el trabajador puede pedir a todos los médicos especialistas por los que ha pasado, que redacten un informe médico donde especifiquen todas las cirugías realizadas y pendientes, posibilidades terapéuticas o rehabilitadoras, secuelas permanentes, dolencias crónicas... De esta manera, el Tribunal Médico tendrá toda la información que necesita para valorar si concede o no la incapacidad y lo mismo cuando tenga que realizar la revisión de la incapacidad.