En 2022, la edad de jubilación ordinaria está fijada en 65 años para quien haya cotizado a la Seguridad Social durante un mínimo de 37 años y 3 meses; y en 66 años y 2 meses para quienes hayan cotizado menos tiempo. A partir de las respectivas edades y periodos cotizados, el trabajador tendrá derecho al 100% de su pensión.
En cuanto a la edad de prejubilación o jubilación anticipada, existen dos posibilidades, que sea motivado por la empresa o por el propio empleado. En caso de una jubilación anticipada involuntaria o forzosa, podrás prejubilarte hasta 48 meses antes de la edad establecida (a los 61 años o a los 62 años y 2 meses, dependiendo cuántos años hayas cotizado). En cambio, si se trata de una jubilación anticipada voluntaria, podrás retirarte hasta con 24 meses de anterioridad a la edad legal establecida para la jubilación (es decir, a los 63 años o 64 años y 2 meses).
Muchos ven con buenos ojos esta posibilidad, pero otros, como el profesor de la Universidad de Boston y doctor en Económicas por la Harvard, Laurence Kotlikoff, creen que es un grave error: "La jubilación anticipada no es solo una decisión para tomarse las vacaciones más largas de su vida: es uno de los mayores errores económicos de los que se arrepentirán", asegura Kotlikoff, en una columna en CNBC.
Una cuestión de ahorros
El profesor es desde 2014 uno de los 25 economistas más influyentes del mundo, por lo que su opinión es muy relevante. Kotlikoff ha explicado por qué piensa así: "La razón es sencilla: somos, como grupo, pésimos ahorradores, lo que hace que la jubilación anticipada sea inasequible".
En este sentido, cree que las personas que sí que hayan sabido planificarse económicamente, la jubilación anticipada "es una gran opción". El profesor también es consciente de que muchas personas se ven obligadas a jubilarse en contra de su voluntad.
"La incapacidad de la mayoría de nosotros para ahorrar refleja un enfoque erróneo de la esperanza de vida, que se utiliza habitualmente para fijar el horizonte de planificación de cada uno", añade el profesor, que ha tenido en cuenta el informe del 'Boston College Center for Retirement Research', donde se estima que la mitad de las familias trabajadoras corren el riesgo de ver disminuido su nivel de vida durante la jubilación.
Lo mejor, según el economista, es que cada persona valore si una vez alcanzada la jubilación podrá mantener el mismo nivel de vida. Para ello, lo primero que hay que saber es cuánto gastamos al año, y después ver si nuestra pensión de jubilación y los ahorros que tengamos podrían cubrir nuestros gastos.
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.