Todo lo que necesitas saber sobre la polémica mochila austriaca

Vuelve la polémica mochila austriaca: El Banco de España pide implantarla y abaratar despidos

Durante mucho tiempo, y en otros artículos hemos hablado sobre la complicada situación del sistema de pensiones y las diferentes fórmulas que se proponen para hacer de este un sistema viable.

Una de estas fórmulas que está triunfando en Europa es la llamada “mochila austriaca”. Se trata de un modelo que algunos expertos proponen que se instale en nuestro país.

Como su nombre indica este sistema nació en Austria a comienzos del siglo, en 2003. Su funcionamiento es el siguiente: cada trabajador cuenta con un fondo de capitalización en el cual la empresa va haciendo aportaciones mes a mes.

Este fondo no solamente está pensado para la jubilación, sino que se puede echar mano en situaciones como por ejemplo un despido (con el que no cobra una indemnización como tal).

De esta manera sería un saco de dinero, o una mochila, que estaría junto a nosotros durante toda la vida laboral y a la cual solamente accederíamos en casos de necesidad.

La mochila austriaca va con el trabajador siempre, de modo que cada vez que cambie de trabajo se lleva consigo ese fondo de capitalización, agrandándose con las aportaciones que realicen las diferentes empresas en las que se esté.

Entre las principales razones que apuntan sus defensores destacan que este método reforzaría el sistema de pensiones, ya que gracias a él se garantiza que todo el mundo tiene algo de dinero ahorrado cuando llega el momento de salir del mercado laboral; al mismo tiempo se reduciría el coste del despido para las empresas; y por último se incentiva la movilidad voluntaria de los trabajadores ya que el dinero siempre les acompaña y no lo perderían.

A estos hay que añadir por ejemplo otras características como la mayor libertad para elegir el momento de la jubilación o la reducción de contratos ilegales por la no indemnización por despido.

Estos dos últimos puntos han recibido críticas al compararse con una indemnización por despido.

Otra de las críticas que tiene este sistema es que, frente al actual, se estaría fomentando el sistema de ahorro privado en vez de las pensiones públicas, lo cual, si no se controla y se hace mixto podría llevar a la desaparición de estas últimas.

Una razón de suficiente peso para que sindicatos y agentes sociales no lo vean con buenos ojos y hayan hecho que este sistema quede en el tintero del Gobierno.