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Luis Bárcenas, extesorero del Partido Popular, condenado por su implicación en la trama Gürtel a 29 años de prisión, quiere cobrar pensión de jubilación y ya ha iniciado los trámites. Este mes, concretamente el día 22 de agosto, Bárcenas cumplirá 67 años y, por tanto, contará de sobra con la edad legal de retiro. Pero antes de solicitar la prestación a la Seguridad Social, debe solventar un escollo: no ha cotizado lo suficiente.
Luis Bárcenas ha reclamado al Ministerio del Interior que certifique su actividad laboral durante los más de cuatro años que ha estado en la prisión de Soto del Real, según publica El País. Con este movimiento, Bárcenas busca sortear los dos años de cotización exigidos para cobrar una pensión contributiva por jubilación.
Falta de cotización
Uno de los requisitos para cobrar una pensión de jubilación es haber cotizado dos en los últimos 15 años de vida laboral. Es decir, independientemente de los años cotizados con los que contemos en nuestra vida laboral, debemos cotizar, como mínimo dos años en los últimos 15 años inmediatamente anteriores al momento de la jubilación.
Y Luis Bárcenas no cuenta con ellos. En primer lugar, por las dos estancias en prisión desde que fuera encerrado en la cárcel en junio de 2013 en las que no ha tenido un trabajo remunerado; y también porque los tribunales no reconocieron la relación laboral que él aseguraba haber mantenido con el PP, cuando saltó el escándalo de los casos de corrupción.
Luis Bárcenas ha pedido a Instituciones Penitenciarias un informe para presentar ante la Seguridad Social que certifique que mientras ha estado en prisión nunca recibió una oferta de trabajo remunerado por parte de Instituciones Penitenciarias en los talleres del centro y, por tanto, no pudo cotizar durante ese periodo. Bárcenas ha pedido que dicho informe incluya las actividades no retribuidas que ha realizado en prisión. Ha sido auxiliar de limpieza en el módulo de la cárcel donde estaba su celda; ha hecho un curso de informática y ha participado en un taller de justicia restaurativa.
Teoría del paréntesis
La petición de Barcenas se sustenta en la ley penitenciaria. En concreto, la Ley General Penitenciaria, en su artículo 26 establece que el trabajo es un derecho y deber de los reclusos y dice que "será facilitado por la administración" y "gozará de la protección dispensada por la legislación vigente en materia de Seguridad Social".
Con esta petición, Bárcenas busca que se le aplique la denominada ‘teoría del paréntesis’. Se llama así por una sentencia del Tribunal Supremo de 2018, por la que a una mujer, que estuvo presa 20 años, se le retrotajo el requisito de haber cotizado esos dos años de los últimos 15 de vida laboral al periodo inmediatamente anterior a su entrada en prisión.
El tribunal señalaba en aquella sentencia que “las posibilidades de trabajar en prisión son muy limitadas” y detallaba que en el periodo 2006-2011 solo pudo hacerlo el 17% de la población reclusa.
Régimen de semilibertad
A Luis Bárcenas aún le queda por pasar en prisión más de cinco años de los 12 años que como máximo debe cumplir por la pena de 29 años y un mes impuesta por el Tribunal Supremo por el caso de corrupción Gürtel. Desde el pasado 20 de diciembre se encuentra en régimen de semilibertad, el ordinario, aunque pudiendo salir para trabajar y durmiendo en el centro de inserción social (CIS) Victoria Kent de Madrid. Este mismo mes de julio, el juez de vigilancia penitenciaria de la Audiencia Nacional desestimaba la petición de Bárcenas de acogerse al tercer grado penitenciario.
Para conseguir este segundo grado penitenciario, y poder disfrutar de salidas diarias de 15 horas, Bárcenas comenzó a trabajar, y por tanto a cotizar, en diciembre. Tiene un contrato de tesorero con una productora ligada a su hijo Willy, líder del grupo musical Taburete.