Los médicos dudan de la eficacia del plan de jubilación activa: "La gente está muy cansada"

El presidente de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), José Polo, ha defendido que la solución para arreglar el déficit actual de profesionales pasa por "una reforma integral" de la Atención Primaria (AP), en lugar de por retrasar la edad de jubilación, tal y como ha propuesto el Ministerio de Sanidad este jueves: "La gente [el conjunto de médicos de AP] está muy cansada", ha afirmado.

"Es una medida que habrá que valorar cuando se aplique, pero el problema es que la gente está muy cansada. Tradicionalmente, siempre ha habido un interés por prolongar la vida laboral en los médicos de AP, pero ahora todo el mundo está contando los días que le quedan para jubilarse por la situación actual de la primaria", ha lamentado Polo en declaraciones a Europa Press. "Mientras no reformemos la AP, no vamos a conseguir que el profesional joven se acerque a la especialidad", ha apostillado.

A juicio de la sociedad médica, sería necesario implementar una serie de medidas "a corto, medio y largo plazo". Por ejemplo, abogan por la contratación de personal administrativo "para que el médico se dedique a ver al paciente y no a rellenar papeles", o por la supresión de las trabas administrativas para prescribir medicamentos. Además, Polo ha insistido en la importancia de "dar a conocer la medicina de familia en la facultad".

Mientras, el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Tomás Cobo, ha asegurado, en declaraciones a Europa Press, que valora positivamente el hecho de que se pueda retrasar la jubilación de los médicos de Atención Primaria siempre y cuando estén en buenas facultades para desempeñar el trabajo.

Ambos se han pronunciado así tras el anuncio de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, de facilitar la jubilación activa de los médicos y pediatras de Atención Primaria (AP) en España, de forma temporal y excepcional, para solucionar el déficit de estos especialistas en el Sistema Nacional de Salud.

"Valoramos la medida positivamente, pero siempre y cuando sea una medida de política de recursos humanos que venga para mantenerse en el tiempo y no sea una cosa exclusivamente circunstancial", ha recalcado el presidente de la OMC.

En este sentido, Cobo ha destacado la necesidad de optimizar las capacidades que tenga cada persona a una determinada edad. "El aspecto de la edad desde el punto de vista cronológico es importante, al igual que desde el punto de vista biológico y las capacidades que cada uno tenga a la hora de desarrollar la labor asistencial que le corresponda", ha zanjado Cobo.

 

CSIF cree que es "insuficiente"

Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha valorado "de manera positiva" la propuesta de jubilación activa planteada en el Sistema Nacional de Salud (SNS), si bien consideran que "es insuficiente para afrontar la situación de emergencia que en estos momentos atraviesa la sanidad pública".

A través de un comunicado, CSIF defiende que esta medida se extienda a otros colectivos "y de manera voluntaria, tal y como ha planteado CSIF en la mesa de negociación".

Además, creen que debe ser "complementaria con la regulación de la jubilación anticipada, también con carácter voluntario, para contemplar también la situación de profesionales que habiendo cotizado 35 años (25 de ellos en el sistema público) deseen jubilarse a los 60 porque se encuentran agotados".

"En todo caso, la propuesta planteada es precipitada, pone en evidencia el momento crítico de nuestra sanidad. Por eso, debería enmarcarse en una propuesta global para dar respuesta a los problemas del SNS que puso en evidencia la pandemia y que hoy, con la llegada de las bajas temperaturas y la escasez de profesionales, está dando lugar a situaciones muy difíciles en todas las comunidades autónomas", insisten desde el sindicato.

En este sentido, CSIF considera que el Ministerio de Sanidad debe impulsar un Pacto de Estado con medidas como el refuerzo de plantillas (289.000 nuevas contrataciones de aquí a 2031), una mejora de las condiciones laborales y salariales para evitar la fuga de profesionales al exterior, un "plan de rescate" del talento emigrado y una inversión de 4.000 millones de euros para dotar de recursos al sistema y afrontar el Plan de Acción en Atención Primaria.

Según CSIF, se está produciendo un "colapso" de la Atención Primaria, con "hasta 15 días de demora", lo que se suma a la "saturación" de las urgencias, el incremento "desmedido" de las listas de espera, un "déficit generalizado" de profesionales (especialmente en Medicina de Familia, Pediatría y Enfermería), "falta" de planificación y de sustituciones.

Además, critican que el plan de Atención Primaria impulsado por parte del Gobierno "no es eficaz". CSIF está participando en las diferentes protestas y conflictos planteados en todas las comunidades autónomas. El sindicato también buscará el amparo del Defensor del Pueblo ante el recorte del "derecho fundamental" a la protección de la salud por la "dejación de responsabilidades" por parte de los responsables políticos, tanto de las comunidades autónomas como del Gobierno Central.

Según datos recabados por CSIF procedentes de la Seguridad Social, las comunidades autónomas han prescindido de 50.000 empleos a lo largo de los meses de septiembre, octubre y noviembre, coincidiendo con la campaña de vacunación de la gripe y la llegada del mal tiempo, con el incremento de patologías respiratorias que acarrea esta estación y la consecuente presión asistencial.

Sindicatos médicos avisan de que no es la solución

También se ha pronunciado la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), que ha valorado "positivamente" la propuesta, si bien ha avisado de que "no pone solución" a la falta de médicos.

Además, la organización ha denunciado que la Administración siga "sin contar" con los representantes de los profesionales para tomar decisiones que les afectan, y considera que el anuncio aún tiene "muchos puntos que no se han aclarado" por una redacción confusa sobre cómo funcionará esta opción.

Por ejemplo, el CESM considera necesario saber cuáles serán las retribuciones finales en ese trabajo al 50 por ciento, la carga de trabajo que se deberá realizar, la falta de valoración, "puesto que es algo transitorio", y limitación solo a las especialidades de Medicina de Familia y Pediatría de Atención Primaria y excluir de esa compatibilización al resto de especialidades deficitarias, así como si esa compatibilidad irá acompañada de un aumento de pensión.

A su entender, existen otras alternativas como, por ejemplo, un aumento de la pensión de jubilación una vez que se pase a esta situación. Ante estas incertidumbres y cómo se ha presentado la propuesta, la Confederación considera que este tipo de medidas u otras similares, aunque tengan carácter temporal, deben aplicarse a todas las especialidades donde existe un déficit, y en este sentido, además de no aclarar cuestiones como el aspecto retributivo de la pensión, no se ha desarrollado la jubilación parcial, que aparece en el Estatuto Marco y aún está pendiente de desarrollar, y no se aprueba la jubilación flexible desde los 60 años sin pérdida retributiva hasta los 70 años, e incluso hasta los 72, el que voluntariamente quiera prorrogar como lleva años reclamando CESM.

"En definitiva, la propuesta muestra que se está empezando a trabajar para intentar poner soluciones a la situación actual, pero se queda muy lejos de algo realmente efectivo, máxime cuando, una vez más, no se ha contado con la opinión de los afectados a la hora de elaborarla y no responde a las necesidades de los profesionales", ha dicho la organización.

Por ello, ha informado de que va a solicitar una reunión "urgente" al ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones para pedir una explicación "más en profundidad" de cómo queda esta propuesta, así como para trasladarle sus demandas.