Jubilarse es una de las decisiones más importantes de la vida, económica y socialmente, y antes de firmar el retiro es preciso hacer muy bien las cuentas, informarse en la Seguridad Social y medir bien los tiempos, para que la pensión a cobrar sea lo más alta posible, de acuerdo a los años cumplidos y a los cotizados.
En general, puede ser más favorable jubilarse en la última parte del año que en los meses iniciales, aunque a menudo existen excepciones de índole personal, y por ello es crucial pedir cita con la Seguridad Social, para que los técnicos le informen y evalúen todas las posibilidades. ¿Por qué retirarse a final de año puede salir a cuenta? Porque entre julio-noviembre o incluso diciembre, en coyunturas económicas normales, el Índice de Precios de Consumo (IPC) está habitualmente más elevado, y es posible que quien se vaya a jubilar consiga una mejor base reguladora de la pensión y, por tanto, cobre de entrada una nómina algo superior.
Sin embargo, los expertos avisan de que no existen reglas infalibles para saber cuándo saldrá más favorable el factor de descuento de la base reguladora, y explican que elegir un mes u otro es una variable aleatoria más que algo que se pueda planificar, y muchas veces el retiro no lo elige el trabajador, sino que le viene impuesto, y otras tantas depende de las circunstancias legales y/o profesionales, de la carrera de cotización, de la edad cumplida, y de si se produce a la edad legal ordinaria, se adelanta o se atrasa.
Para no llevarse sustos posteriores, toda persona que esté planificando su jubilación debería, al menos, realizar una simulación con el simulador gratuito en la web de la Seguridad Social, y acudir con cita a una delegación, donde le harán el cálculo exacto de la paga futura.
"Los meses más interesantes para jubilarse son aquellos donde se producen picos en la tasa de inflación, donde existe una subida estacional de la inflación", apunta el economista Javier Santacruz(@santacruz_s_a), que señala que en el importe de la pensión influyen tanto la base reguladora (sobre su cuantía se halla la nómina del futuro pensionista) como la inflación.
"Un IPC alto redunda en una más abultada base reguladora y, por tanto, en una pensión más favorable. Y, en situaciones normales de la economía española, las estadísticas nos dicen que los precios van subiendo más en la última parte del año", resume Santacruz quien, no obstante, puntualiza que este enunciado es general y "calcular el momento idóneo para retirarse es muy difícil, y depende de las circunstancias de cada persona y de la marcha de la economía. No hay reglas exactas".
Efectos "moderados" de una inflación más alta
Tomar la decisión de jubilarse en la parte del año en que la inflación sea más elevada podría, en teoría, suponer alguna leve ventaja. Por ejemplo, para quienes, cobrando salarios inferiores a la base máxima de cotización (la mayoría), hayan experimentado una revisión salarial al alza por el convenio de su empresa en los meses previos a jubilarse.
Según sugiere José Antonio Herce, experto en pensiones y cofundador de LoRIS Retirement, “puede suceder con algunos trabajadores, por la vigencia de los convenios colectivos. Pero esos aumentos serían modestos, afectarían a solo una parte de los trabajadores, y en la base reguladora pesa muy poco el último salario. De haber algún efecto, sería muy moderado”, apostilla.
Factor clave: incentivo o penalización a recibir
Tal como explica Enrique Devesa (@DevesaCarpio), profesor titular de Economía Financiera y Actuarial de la Universidad de Valencia e investigador del IVIE, más que el mes del año o cuál sea la marcha de la inflación en ese entonces, "para mejorar el importe de la pensión es más importante jubilarse teniendo en cuenta el posible coeficiente reductor (o el incentivo) que se vaya a recibir.Por ejemplo, si se opta por la jubilación anticipada, hay que estudiar muy bien la tabla de los coeficientes y de los meses de anticipo del retiro para evitar una penalización excesiva".
No obstante, Devesa matiza que hay un dato relevante, y es que como las bases de cotización se actualizan con el IPC hasta dos años antes, ese IPC sí que se conoce y se podría optimizar el momento de la jubilación para mejorar la base reguladora. Las bases de cotización de los 24 meses inmediatamente anteriores al mes previo al del hecho causante se toman por su valor nominal".
Del mismo modo, "si se elige retrasar la jubilación, la cuantía de la pensión se verá incrementada según la fórmula de incentivo escogida, también sujeta a reglas temporales", recuerda Devesa, puesto que, tras la última reforma de las pensiones, existe un incentivo económico por cada año entero cotizado después de la edad legal del retiro, y en este caso, debe tratarse de un año exacto (independientemente de en qué mes se cumpla dicho año).
En 2023, los trabajadores que se acojan a la jubilación demorada lograrán, por cada año extra de trabajo adicional, un 4% más de la base reguladora, o bien un pago único, cuyo importe depende de cuán extensa sea la carrera laboral. También pueden elegir una combinación de ambos incentivos. En general, quien retrase su jubilación de modo voluntario, según la modalidad demorada, podrá cobrar hasta más de 12.000 euros por cada año de retraso.
La base reguladora en 2023
En 2023, la base reguladora de la pensión de jubilación se calcula sumando las bases de cotización de los últimos 25 años, o lo que es lo mismo, sumando los últimos 300 meses previos a la solicitud de la pensión. La cantidad así obtenida se divide entre 350 y la resultante es la base reguladora.
Para hallar el importe de la pensión, el siguiente paso es averiguar qué porcentaje de dicha base reguladora cobrará la persona cuando se jubile:
- Los primeros 15 años cotizados dan derecho a percibir el 50% de la base reguladora.
- A partir de los 15 años cotizados, se aplican los siguientes coeficientes, tal como detalla la web del Ministerio de Seguridad Social: durante los primeros 49 meses extra se acumula el 0,21% de base reguladora por mes cotizado. Y en los 209 meses restantes se logra el 0,19% de la base reguladora por cada mes cotizado a la Seguridad Social.
PORCENTAJE BASE REGULADORA PARA CALCULAR LA PENSIÓN
Fuente: Seguridad Social
Hay que recordar que en 2023 son precisos 36,5 años de contribuciones para acceder al 100% de la base reguladora, es decir, para percibir el 100% de la pensión.
Hacer una simulación en la web de la Seguridad Social
Una herramienta para hacer números, es el simulador de jubilación de la Seguridad Social, de manejo sencillo y accesible. Para utilizarlo, es preciso entrar en esta web y superar el control de acceso, para lo cual, solo hay que identificarse.
La identificación es posible mediante:
- Certificado digital.
- DNI electrónico.
- Clave de acceso (usuario / contraseña).
En la pantalla de bienvenida el sistema mostrará directamente el tiempo cotizado (en diferentes empresas o regímenes), y el interesado podrá ver sus cotizaciones al detalle (pestaña “Ver tus cotizaciones”). También aparece un contador con el tiempo que falta para la jubilación. En ambos casos, se puede descargar un informe completo.
A continuación, pulsando en la pestaña “Simular tu jubilación”, aparecerá una ventana para confirmar la información recogida en el sistema sobre las circunstancias personales, y si no son correctas, es preciso corregirlas.
El último paso sería pulsar “aceptar”, para poder visualizar el resultado de la simulación.
Aunque la propia Seguridad Social advierte que estos cálculos son aproximados y meramente orientativos, extraídos de la información acumulada sobre el trabajador (edad, circunstancias familiares y personales, bases y periodos de cotización), son una excelente guía para conocer el nivel de pensión que se cobrará.
Sobre el autor:
Pepa Montero
Pepa Montero es redactora especializada en temas de economía. Ha trabajado en medios como El Economista y La Gaceta de los Negocios. Es autora del libro de relatos La casa de las palmeras (Azul como la Naranja, 2013).