Anna Blanco
Pensiones
¿Qué edad límite tienen los autónomos para poder mejorar su pensión?
Muchos autónomos cotizan por la mínima lo que repercute en pensiones más bajas que los asalariados
Según la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), los autónomos son los trabajadores que más tarde se jubilan y los que menos cobran de pensión. De esta manera, mientras la media de la pensión de un asalariado se situó en el mes de septiembre de 2019 en 1.286 euros, la de los autónomos no pasó de los 762 euros. Una de las razones principales para esta diferencia es que la gran mayoría de los autónomos en España cotiza a la Seguridad Social por la base mínima.
Y es que el trabajador por cuenta propia o autónomo tiene libertad para fijar la base de cotización que desee. Es decir, aunque gane unos 3.000 euros al mes, si lo prefiere puede cotizar a la Seguridad Social por 1.000 euros. En este sentido, los números hablan por sí solos: el 86% de los 3,2 millones de trabajadores por cuenta propia cotiza por la mínima, según los datos de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA). Y esto, aunque permita pagar cuotas mensuales más bajas durante la vida laboral, repercute en la cuantía de pensión a recibir una vez alcanzado el periodo de jubilación.
Dicho esto, ¿es posible maximizar el rendimiento de las aportaciones que realiza un trabajador autónomo para subir la pensión de jubilación? Desde enero de 2021, los autónomos que vayan a jubilarse este año deben tener cumplidos los 65 años si tienen 37 años y 3 meses o más cotizados o bien, en caso de no tener este periodo de cotización, haber cumplido los 66 años. Además, se ha ampliado a los 24 años el periodo cotizado a tener en cuenta para el cálculo de la pensión (en 2022 quedará fijado en 25 años).
Por tanto, una de las opciones para mejorar la pensión de jubilación que apuntan los expertos, como la Fundación de Estudios de Economía Aplicada en su estudio "Normativa de cotización y pensiones de trabajadores autónomos en España: ¿Se incentiva al ahorro de ciclo vital?", es cotizar por la base máxima a partir de los 42 años, ya que es el perído de tiempo hasta la jubilación que se va a tener en cuenta para el cálculo de la pensión y los resultados en cuanto a la cuantía serán los mismos a si se hubiera cotizado siempre con la cuota máxima.
Además, hay que tener en cuenta que, a partir de los 47 años, la Seguridad Social ya no permite cotizar por bases superiores a los 2.052,00 euros mensuales, si antes de esa edad ya no se estaba haciendo (cotizando por una base igual o más alta). De esta manera, si la base de cotización antes de cumplir los 47 ha sido inferior a 2.052 euros mensuales solo se podrá elegir cotizar entre una base comprendida entre la mínima de 944,4 euros y una base no superior a los 2.077,8. Con este límite, la Seguridad Social quiere impedir que los autónomos que han contribuido poco al sistema logren pensiones altas con solo cotizar los últimos años de su vida laboral.
Visto lo visto, recurrir a la opción del ahorro privado es quizás la propuesta que a la larga puede ser más rentable para los autónomos a la hora de planificar su jubilación ya que, según un estudio de Fintup, esta opción es un un 27% más rentable que aumentar al máximo la base de cotización.