"En pleno siglo XXI, las mujeres seguimos siendo menospreciadas y cargamos con una enorme brecha salarial de género, y además, el cuidado de los hijos y de familiares siempre ha recaído en la mujer. Nosotras somos las que percibimos las pensiones más bajas, muchas rayando en la miseria, lo que nos sume y atrapa en situaciones de pobreza, sobre todo a las pensionistas de mayor edad. A pesar de las dos últimas revalorizaciones anuales de las pagas, la enorme inflación está provocando niveles intolerables de empobrecimiento", denuncia Paqui López, portavoz de la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones (COESPE @CoespeOficial), que este viernes y sábado, 23 y 24 de febrero, está celebrando el I Encuentro Estatal de Mujeres Pensionistas, en Madrid.
Junto a numerosas mujeres llegadas desde todos los puntos de España, López pone cifras a lo que desde COESPE definen como "insoportable empobrecimiento" de la mujer pensionista, y así lo explicaron durante la concentración de este viernes frente al Congreso de los Diputados, y por la tarde del mismo viernes, durante las sesiones de debate organizadas por la Comisión de la Mujer de COESPE.
"Según las estadísticas de pensiones que cada mes publica el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social, la cuantía de la pensión media de las mujeres es de más de 1.000 euros mensuales, perola realidad es que existen 3,5 millones de mujeres cuya pensión está por debajo de 1.000 euros,y más de un millón de ellas cobran en torno a 550 euros al mes", detalla Paqui López, encargada de redactar y exponer la ponencia sobre Pensión mínima, complementos mínimos y complementos brecha de género. Para esta pensionista activista, "la pensión mínima debe ser equiparada al salario mínimo interprofesional (SMI), porque es imposible vivir con 500 o con 800 euros al mes, que es lo que cobran numerosas mujeres, a pesar de que al hacer la media de las pensiones, los datos del Ministerio digan otra cosa", argumenta la portavoz de COESPE.
"Sufrimos una brecha del 32,27% en la pensión"
Para cimentar sus reivindicaciones, los convocantes de la concentración del viernes ante el Congreso exponen que el número de pensiones en el mes de enero fue de 10.132.479, de las cuales, el 52,63% son cobradas por mujeres. "En nuestro país hay 1.528.262 pensiones que están percibiendo 550 euros, de las que 1.115.092 son mujeres; unas mujeres que con esa pensión viven en precariedad. La diferencia entre las pagas que reciben los hombres y las mujeres es de 485,49 euros al mes, y al año la brecha es de 6.796,86 euros anuales. Es decir, las mujeres pensionistas percibimos un 32,27% menos que los hombres. Una brecha insoportable", refrenda Paqui López.
"No somos un número de la Seguridad Social"
Tenemos suficientes motivos para celebrar este encuentro y seguir organizándonos para seguir luchando por unas pensiones dignas, porque "no solo somos números en la Seguridad Social, somos personas que hemos trabajado durante toda la vida y tenemos derechos a vivir dignamente", proclaman.
Anuncian además que no pararán hasta lograr las mejoras imprescindibles que necesitan: "mejoras en las pensiones de viudedad, en las pensiones no contributivas, así como en las pensiones y complementos mínimos, además de los pluses de brecha de género".
PSOE, Sumar y Compromís las apoyan en el Congreso
Como paso previo a la concentración del viernes, una delegación de mujeres jubiladas fue recibida, el pasado jueves, en el Congreso de los Diputados, por Esther Gil, diputada de Sumar; María Isabel Moreno, diputada del PSOE; y Alberto Ibáñez, de Compomís, quienes escucharon de viva voz las reivindicaciones de las jubiladas.
Interesante reunión con las mujeres pensionistas de @CoespeOficial, que nos han transmitido sus propuestas para acabar con la #brechadegénero en las #pensiones.
Sus reivindicaciones son más que justas. Y desde @sumar vamos a trabajar para reconocer los derechos que se merecen. pic.twitter.com/A0eIloD6x7
Los diputados con los que pudieron conversar se mostraron abiertos a defender las reclamaciones de la delegación de pensionistas, que desde Sumar califican de "más que justas".
Reunión con la socialista María Isabel Moreno.
Reunión con Alberto Ibáñez, de Compomís.
Viudedad y cuidados, dos grandes caballos de batalla
Para eliminar la losa de la brecha de género y combatir el empobrecimiento que las acecha, las mujeres pensionistas reivindican, fundamentalmente, estos ejes centrales:
- Pensión mínima igual al salario mínimo interprofesional (SMI) y que este a su vez llegue al 60% del salario medio.
- Pensiones de viudedadcon el 100% de la base reguladora que correspondiera a la persona fallecida.
- Complemento de brecha de género para todas las mujeres pensionistas, incluidas las jubiladas anteriores a febrero de 2021, las que cobran pensiones no contributivas y las jubiladas anticipadas.
- Reconocimiento del trabajo de cuidados que realizan las mujeres. "Es crucial que el tiempo dedicado a estas tareas, así como a otros trabajos como el campo, textil, la limpieza, entre otros, sean reconocidos en las pensiones", exigen desde la Comisión de la Mujer de COESPE.
- Erradicar la brecha de género en las pensiones públicas, a través de medidas estructurales de carácter laboral, económico, social y cultural.
- Derogar las reformas que han endurecido las condiciones de la jubilación.
- Restablecer los 60 años como edad ordinaria de jubilación y rebajar a 10 años cotizados el mínimo tiempo exigido para acceder a una pensión contributiva.
Ponencias, debates y acciones a tomar
El I Encuentro Estatal de Mujeres Pensionistas ha debatido sobre estos temas en profundidad, con varias intervenciones, entre ellas:
- Cuidados, a cargo de Isabel Talavera.
- Viudedad, por Purificación Escudero.
- Pensiones no contributivas, por parte de Carmen Pérez.
- Pensión mínima, complementos mínimos y plus de brecha de género, expuesta por Paqui López.
Asimismo, han realizado análisis pormenorizados de la situación de las mujeres pensionistas, y propuestas de acciones.
Sobre el autor:
Pepa Montero
Pepa Montero es redactora especializada en temas de economía. Ha trabajado en medios como El Economista y La Gaceta de los Negocios. Es autora del libro de relatos La casa de las palmeras (Azul como la Naranja, 2013).