Pensiones de jubilación mínimas de casi 4.000 euros, más un complemento para vivienda adicional de 1.600 euros, pensiones máximas que pueden superar los 26.000 euros mensuales; posibilidad de jubilarte a partir de los 40 años… No es un sueño, es Qatar. Una realidad que brilla tanto como muchos de los rascacielos de Doha, pero que, como aquellos, también oculta mucha letra pequeña y enormes desigualdades.
El emirato de Qatar está gobernado por una monarquía absoluta bajo la sharía, la ley islámica, y controla la tercera reserva de gas del mundo. Con una población de menos de tres millones de personas, si algo le sobre a este país, es riales cataríes.
Las pensiones en Qatar son las más altas de la región después de que el emir, el jeque Tamim bin Hamad Al-Thani emitiera a finales del pasado mes de abril dos nuevas leyes de jubilación, una sobre el Seguro Social y otra sobre el Retiro Militar.
Estas leyes garantizan una pensión mínima de 15.000 riales qataríes al mes (3.935 euros) para todos los jubilados en Qatar, con un subsidio adicional para vivienda de entre 4.000 y 6.000 riales (1.050-1600 euros) para aquellas pensiones que sean inferiores a los 100.000 riales qataríes (26.233 euros).
¿Quiénes tienen derecho a cobrar estas pensiones?
Los ciudadanos de Qatar que han trabajado para el gobierno durante 15 años tienen derecho a pensiones de jubilación entre los 55 y los 60 años. Los ciudadanos mayores de 40 años también pueden jubilarse si han trabajado durante 15 años.
Este sistema público de pensiones está abierto a los empleados qataríes en ministerios, instituciones públicas, agencias, sociedades anónimas y otros, así como a militares. También para los qataríes que trabajen fuera del país, para su gobierno.
Ahora bien, este esquema de previsión social no cubre a los qataríes que trabajen para el sector privado. Es responsabilidad del individuo negociar un acuerdo con su empleador o unirse al plan de pensiones de la empresa, que es obligatorio para las empresas.
El trabajador debe pagar una cotización mensual equivalente al 5% del salario, el empleador complementa la cotización con un 10% adicional del salario bruto, y el gobierno de Qatar aporta la administración del fondo y cubre aquellas posibles carencias en la cotización total del 15%. Las contribuciones de los qataríes que trabajen para el sector privado en el extranjero serán aún mayores, de hasta el 8% de su salario.
¿Y los extranjeros?
Los expatriados, trabajadores en Qatar de cualquier otra nacionalidad en ningún caso accederán a las pensiones públicas de Qatar. Solo hay un caso en que un extranjero puede recibir una pensión qatarí: hijos no qataríes de jubilados qataríes, así como viudas, padres y hermanos. La ley contempla la transferencia del derecho de cobro de la pensión a un beneficiario en caso de fallecimiento del pensionista.
Ni pensión ni ningún otro tipo de prestación. Tampoco las familias de los cerca de 6.500 trabajadores que se calcula que podrían haber muerto durante la fabricación de los estadios y resto de instalaciones de cara al Mundial cobrarán ningún tipo de indemnización ni seguro. Pese a que el gobierno qatarí introdujo cambios legislativos para contener la opinión pública internacional, entre los que destaca un salario mínimo no discriminatorio con los inmigrantes, organizaciones como Amnistía Internacional denuncian que no han tenido efectos reales y que las prácticas abusivas siguen siendo la norma. Los trabajadores han estado sometidos hasta 2020 a la kafalla, una norma abusiva que prohibía a los inmigrantes cambiar de empresa e incluso salir del país sin el consentimiento de sus jefes.
¿Es caro vivir en Qatar?
El coste de la vida en Qatar es, en general, elevado. Su población tiene un buen nivel de vida, no en vano en 2021 el PIB per cápita ascendió a 51.810 euros. Sin embargo, si nos detenemos en lo que cuesta la vida en Qatar, nos encontramos con algunas partidas verdaderamente elevada, pero otras no tanto, similares a España o incluso más baratas. La vivienda es el elemento más prohibitivo en Qatar: alquilar una vivienda de unos 85 metros cuadrados en una zona media de Doha asciende a cerca de 1.800 euros al mes. Los gastos de suministros básicos de esa vivienda, agua y electricidad, pueden llevarse 115 euros al mes.
Comer en Qatar es bastante similar a lo que cuesta comer en España, y en algunos casos incluso algo más barato. Una barra de pan cuesta un euro en Qatar, lo mismo que cuesta un kilo de patatas; una docena de huevos 3,5 euros y un litro de leche entera, 1,8 euros. Comer un menú, con bebida incluida, en la zona cara de Doha, no llega a los 11 euros y, como indicador estándar que nos permite hacer comparaciones muy fácilmente… un menú Big Mac en McDondalds cuesta 6,61 euros.
El transporte es verdaderamente barato. Un trayecto de 10 kilómetros en taxi, cuesta alrededor de 6,21 euros y el abono transporte mensual no llega a 40 euros. Hay que tener en cuenta que el litro de gasolina está a 0,56 euros.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.