Pensiones: El Gobierno garantiza el pago de la extra de Navidad con una nueva transferencia

El Gobierno transferirá 6.000 millones para equilibrar las cuentas de la Seguridad Social

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La Seguridad Social necesita 20.000 millones de euros para pagar la pensión de noviembre y la paga extraordinaria de Navidad, que los pensionistas cobrarán hacia finales de este mes, a partir de los días 24-25, según el banco donde tengan domiciliada la nómina. La elevada cuantía de esta nómina preocupa, debido a la persistente situación de déficit de la Seguridad Social, que se ha agravado por la caída de las cotizaciones, debido a la pérdida de empleo ocasionada por el coronavirus, al descenso de ingresos por las exoneraciones de cotizaciones a autónomos y empresas, y al disparo de los gastos por las medidas (el ingreso mínimo vital, entre otras) para frenar el impacto de la pandemia.

Con todo, fuentes oficiales del Ministerio de Inclusión y Seguridad Social (@inclusiongob), cuyo titular es José Luis Escrivá, confirman a 65Ymás que "está garantizada la nómina, por supuesto, como siempre". Es decir, los nueve millones de pensionistas que esperan cobrar la paga extra este noviembre lo harán sin ningún problema, a pesar de las tensiones de liquidez en las cuentas del Instituto Nacional de la Seguridad Social. De hecho, en parte, para cubrir la nómina de este mes, el Consejo de Ministros ha aprobado este martes dos transferencias: una de 6.000 millones para la Seguridad Social y otra de 2.300 millones para el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Con estos nuevos traspasos de fondos, el sistema público apuntalará sus cuentas, tras hacer frente a los gastos extraordinarios por las medidas de protección ante la pandemia, resalta el Ministerio.

Esta financiación extraordinaria de la Seguridad Social segurirá siendo necesaria, probablemente, hasta que la crisis de una tregua o, al menos, hasta que se aprueben los Presupuestos Generales del Estado para 2021, donde el Gobierno ya ha previsto desembarazar a la Seguridad Social de una serie de gastos no contributivos, por importe de 13.929 millones de euros el año próximo. Cuando se ratifiquen los Presupuestos, esos casi 14.000 millones dejarían de pagarse con cotizaciones y pasaría a financiarlos la Administración Central.

"No hay riesgo de impago de pensiones", dicen UGT y CCOO

Pese a la situación deficitaria de la Seguridad Social y al impacto de la crisis del coronavirus, "no hay riesgo de impago de las pensiones", asegura con rotundidad Julián Gutiérrez del Pozo, secretario general de Pensionistas de CCOO (@pensCCOO). "Llevamos años con déficit de la Seguridad Social, lo que significa que el Estado ha venido realizando préstamos para abonar parte de los gastos en pensiones. Nosotros en CCOO hemos dicho que no estamos de acuerdo en que la vía elegida sean los préstamos, sino que el Estado debería efectuar transferencias" cuando el sistema necesite liquidez en un momento concreto, detalla Gutiérrez.

"Pero esta es una situación ya conocida, que no debe alarmar a los pensionistas, porque las pensiones se van a pagar puntualmente", recalca el secretario general de los Pensiones de CCOO. 

En el mismo sentido, Mari Carmen Barrera (@mcarmenbarrera), secretaria de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social de UGT (@UGT_Comunica), recuerda que "ya este Gobierno, la última vez que se dio esta circunstancia, realizó una transferencia del Estado a la Seguridad Social, que es como nosotros desde UGT pedíamos que se hiciera, y no a través de un préstamo como se venía realizando desde la época del Partido Popular".

Esta experta considera que, con este Gobierno "y con estos Presupuestos para 2021 que ahora mismo se están debatiendo en el Congreso, queda reforzada la idea de que las necesidades de liquidez de la Seguridad Social se cubrirán mediante transferencias". Y tampoco le caben dudas de que las pensiones se abonarán sin problemas, a pesar de las tensiones de liquidez puntuales que afronta el sistema público.

Cotizaciones y transferencias (no préstamos) para pagar las pensiones

Aunque los gastos por el COVID-19 han disparado los gastos totales de la Seguridad Social, y los ingresos por cotizaciones han caído por los ERTE y las exenciones de cuotas a autónomos, de momento el Banco Central Europeo provisiona sin fondo, explican a este diario varios economistas, por lo cual, no obervan riesgo de impago de pensiones.  

Los apuros financieros coyunturales del sistema de pensiones por la crisis del coronavirus son innegables, pero también es cierto que existen factores estructurales, ya que, al menos cada seis meses, cuando hay que pagar la extra de las pensiones, el Estado tiene que inyectar fondos a la Seguridad Social, después de que el Fondo de Reserva se haya ido vaciando desde su máximo nivel, en 2011 (llegó a haber 67.000 millones de euros).

Así, la transferencia de 6.000 millones decidida este martes se une a la aprobada el pasado mes de mayo, cuando se transfirieron 14.002,59 millones de euros con el objetivo de atender a las medidas excepcionales puestas en marcha. Con este dinero se costeó la extra de verano, que se abonó en junio y por importe de casi 20.000 millones. Por su parte, en el año 2019, en noviembre, el anterior Gobierno de Pedro Sánchez se vio obligado a aprobar un decreto para pagar la extra de las pensiones y autorizó a la entonces ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, a sacar de la hucha casi 3.600 millones euros para poder abonar la nómina, aunque finalmente se extrajeron poco más de 3.000 millones.

La diferencia entre 2019 y 2020, tal y como ha explicado este martes la ministra portavoz, María Jesús Montero, es que "esta vez no se trata de préstamos o créditos, sino que lo aprobado (este martes) son transferencias tanto a la Seguridad Social como al SEPE, que van en la línea de cumplir con las recomendaciones del Pacto de Toledo", que pedían separar las fuentes de financiación de la Seguridad Social.

Es decir, tratar de afianzar que la Seguridad Social se financie con cargo a los recursos del sistema, principalmente mediante cotizaciones de trabajadores y empresas, y con transferencias por parte de la Administración Central, tal como detalla el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social. Además, con la decisión de incluir en los Presupuestos una transferencia de casi 14.000 millones para sufragar gastos no contributivos del sistema se logrará ir reduciendo el déficit histórico de la seguridad Social y trasladar en mensaje de que el sistema de pensiones es sostenible también a largo plazo.