Los Presupuestos Generales del Estado han confirmado, tal y como anunció el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, que las pensiones mínimas, las no contributivas y el Ingreso Mínimo Vital (IMV) se van a revalorizar más que el resto y por encima del Índice de Precios de Consumo (IPC), en concreto, van a subir un 3% en 2022, de modo que sus perceptores ya cobrarán el aumento correspondiente en la nómina de enero (y si no diera tiempo, lo recibirían con efecto retroactivo). En 2021 se han incrementado un 1,8%.
Las pensiones no contributivas son las que se conceden a las personas que, sin haber cumplido los requisitos de cotización necesarios, se encuentran en una situación de necesidad protegible y carecen de recursos suficientes para su subsistencia. Existen dos clases: de jubilación y de invalidez, y en ambas es preciso cumplir ciertos requisitos económicos (tope de ingresos mensuales) y de residencia (entre cinco y diez años viviendo en España), de edad o de discapacidad. En total, en la actualidad, existen más de 445.000 titulares de una pensión no contributiva, cuya cuantía media ronda los 412 euros mensuales, según las estadísticas del IMSERSO.
En 2022, los Presupuestos del Estado destinan 14.319,40 millones de euros para sufragar la totalidad de la gestión de las prestaciones económicas de naturaleza no contributiva, lo que representa el 7,91% del presupuesto total consolidado. Las pensiones no contributivas costarán 2.772,36 millones de euros.
421,40 euros/mes de pensión no contributiva
Tras aplicar la revalorización del 3% prometida por el Gobierno, la cuantía básica de la pensión no contributiva para 2022 (de jubilación y de invalidez) se sitúa en los 421,40 euros mensuales, que multiplicados por las 14 pagas que perciben sus titulares resultarán en 5.899,60 euros al año.
En los Presupuestos Generales del Estado se preveía una cantidad ligeramente inferior de 414,90 euros mensuales y 5.808,60 euros (ver gráfico inferior).
Además, los beneficiarios de pensiones de invalidez cuyo grado de discapacidad iguale o supere el 75% y acrediten depender de otra persona para los actos esenciales de su vida, percibirán un complemento del 50% sobre esos 5.899,60 euros anuales. Por lo tanto, el importe de las pagas para estos perceptores será de 8.713 euros al año; alrededor de 622 euros mensuales.
Fuente: Presupuestos Generales del Estado 2022
Cuantía anual según número de beneficiarios
La cuantía de las pensiones no contributivas varía en función del número de beneficiarios que habiten en el mismo domicilio, así como de sus rentas personales o de la unidad de convivencia.
Tal y como detallan los Presupuestos para 2022, la nueva cuantía anual de las pagas no contributivas (ver gráfico inferior) queda establecida en los 5.808,60 euros en el caso de que exista un solo beneficiario.
Ahora bien, si en la misma unidad familiar conviven dos beneficiarios, el importe de la pensión será de 9.874,62 euros a dividir entre dos, lo que resultará en 4.936,96 euros anuales para cada uno.
Y si en la misma unidad familiar hubiera tres o más beneficiarios, la cuantía conjunta a percibir sería de 13.940, 64 euros al año, lo que supone 4.646,60 euros para cada uno al año.
Fuente: Presupuestos Generales del Estado 2022
En todo caso, el importe de la pensión no puede ser inferior a la mínima del 25% de la establecida.
Pagas de 400 euros son "pobreza extrema"
Tal como recuerda Anatolio Díez, secretario general de la Federación de Pensionistas y Jubilados de UGT-UJP, "los pensionistas que perciben pensiones no contributivas, tanto de jubilación como de invalidez, son 445.619, y de media cobran al mes menos de 400 euros por jubilación y 439 euros mensuales por invalidez, es decir, se encuentran en situación de pobreza extrema o severa. Evidentemente, de estas cifras, la gran mayoría son pensiones de viudedad y se confirma la brecha de género, ya que son las mujeres quienes en mayor porcentaje viven en esta situación".
Para Díez, es necesaria "una revalorización de las pensiones sin pérdida de poder adquisitivo, en aquellas que tengan una suficiencia económica por encima del umbral de pobreza; y el desarrollo de planes que combatan la pobreza y la desigualdad". Y detalla que, según datos del Instituto Nacional de Estadística, la tasa de pobreza entre los mayores de 65 años ha crecido en el último ejercicio analizado, pasando del 14,5% en 2019 al 18,8% en 2020.
Asimismo, la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Publico de Pensiones (Coespe) reclama unas pensiones "justas y suficientes" para todos, unas pagas "dignas" de 1.084 euros, tal y como establece la Carta Social Europea, acabar con la brecha de género, y subir las pagas mínimas y las no contributivas de forma que alcancen al menos la cuantía del Salario Mínimo Interprofesional. Han vuelto a convocar una manifestación, una jornada estatal en defensa de las pensiones públicas, este próximo 13 de noviembre.
Pensiones asistenciales y subsidios
En los Presupuestos del Estado para 2022, el Gobierno detalla asimismo las cuantías mensuales y anuales que corresponderán a las pensiones asistenciales (Ley 45/1960) para ancianos e incapacitados: 149,86 euros al mes y 2.098,84 de paga al año, así como el subsidio de garantía de ingresos mínimos (149,86 y 2.098,04 euros mensuales y anuales, respectivamente), el subsidio de movilidad y transporte (70,90 euros al mes y 850,80 al año) o el subsidio de ayuda de tercera persona (58,45 y 818,30 euros mensuales y anuales).
Los PGE también determinan el nuevo límite de ingresos para poder cobrar la pensión mínima, que en 2022 pasará a ser de 7.939 euros al año, si la persona no tiene cónyuge, o de 9.260 si existe cónyuge.
En cuanto a las asignaciones por hijo o menor a cargo, varían desde los 341 euros anuales en el caso de una persona con un hijo menor de 18 años sin discapacidad, hasta los 4.934 euros al año que percibirán con un hijo igual o mayor de 18 años y discapacidad superior al 65%, o los 7.401,60 euros de paga anual, si la discapacidad es mayor del 75%.
Sobre el autor:
Pepa Montero
Pepa Montero es redactora especializada en temas de economía. Ha trabajado en medios como El Economista y La Gaceta de los Negocios. Es autora del libro de relatos La casa de las palmeras (Azul como la Naranja, 2013).