Este lunes no ha sido un lunes cualquiera para el movimiento de pensionistas –que además de a los pensionistas vascos– ha logrado concentraciones multitudinarias en varias ciudades y pueblos del país en pleno Covid contra el Pacto de Toledo. A las puertas del 8 de marzo, cientos de personas en toda España se han manifestado para mostrar su malestar con la reforma de pensiones que planea el ministro de Seguridad Social Jose Luis Escrivá, que según denuncian atenta contra el sistema público y aumentará aún más la brecha de género entre las mujeres mayores que actualmente supera el 30% según los datos oficiales. Unas movilizaciones que han sido convocadas por la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Publico de Pensiones (@CoespeOficial) y otros movimientos como las Mareas (@catalunya_marea) o los yayoflautas (@iaioflautas).
"Estamos muy enfadados y hemos incluso quemado la carta que nos ha enviado el ministro a todos los pensionistas anunciando la subida del 0,9% porque el Pacto de Toledo es una tomadura de pelo. Se gastan más dinero en papel que en subirnos las pensiones", cuenta la Conchita Ribera a 65Ymás, representante de Marea Pensionista de Barcelona, que ha participado en una de las concentraciones más masivas junto con la de Madrid frente al Congreso, de las convocadas en todo el país bajo el lema 'Gobierne quien gobierne, las pensiones se defienden'. Ribera relata que ha acudido mucha gente a la plaza Universidad de Barcelona, –más de 200 personas– "porque la situación ya no se sostiene más".
Hartos tras el 'decretazo' del complemento de maternidad
Además de multitudinaria, la concentración de Barcelona ha sido además una de las más combativas, por la escenificación de la quema de cartas y por las críticas vertidas a los últimos movimientos de Escrivá. "Hemos visto cómo el 'decretazo' del complemento de maternidad se ha disfrazado como una medida para acabar con la brecha de género, pero con 27 euros al mes por hijo, ¿cómo se va a acabar con las diferencias que van en más de 400 euros al mes entre las prestaciones de hombres y mujeres?" denuncia Conchita Ribera. "Nosotras asumimos además tareas de cuidados los 365 años que no se ven reflejadas en ningún sitio y que luego repercuten en menores pensiones", relata la portavoz en referencia a los trabajos invisibles de las mujeres.
Pero los mensajes y las concentraciones se han repetido en otros puntos de España de Valencia a Euskadi, de Granada a Galicia, pasando por Madrid, donde se han concentrado frente al Congreso. "La gente se va animando, siempre con las precauciones de la Covid, pero es momento de que recuperemos nuestro ritmo de movilizaciones", reivindica Teresa Blázquez, portavoz de la Coordinadora de Madrid por la Defensa del Sistema Público de Pensiones (@Coorpenmadrid). "Tenemos muchas razones por las que salir a la calle, pero queremos señalar que la brecha de género ha aumentado con la pandemia. Con los ERTEs y los efectos de la crisis, hemos retrocedido 8 años en la brecha de género salarial y de pensiones", recuerda.
Exigen subir las pensiones mínimas y frenar los planes de empleo
Otro tema que afecta especialmente a las mujeres, pero no únicamente, es el de las pensiones mínimas. Así, las plataformas de pensionistas se han unido para exigir al Gobierno que iguale las pensiones al menos con el Salario Mínimo Interprofesional de 950 euros al mes y que posteriormente ambos lleguen a los 1.080 euros tal como se refleja en la Carta Social Europea. "La situación ya no es sostenible con pensiones mínimas que no llegan a los 400 euros", recuerda a Blázquez quien considera que esto debería ser un punto clave de la reforma de las pensiones. "La mayoría de nuestras pensiones de jubiladas, viudas y sin pensión propia, se encuentran por debajo, o rozando el umbral de la pobreza; por lo que, la subida del 1’8% en las pensiones no contributivas es irrisoria y en muchos casos las que se divorciaron hace años, hoy son pensionistas sin derechos" recuerdan en el manifiesto que se ha leído en varias ciudades y pueblos de España.
Según los organizadores es más vital que nunca que la gente salga a la calle porque el Pacto de Toledo va encaminado a privatizar el sistema público de pensiones, sobre todo en su recomendación número 16. "Los planes privados de empleo de pensiones, a los que llaman eufemísticamente “sistemas complementarios”, además de detraer cotizaciones del Sistema Público para llevarlos al sistema financiero privado con la colaboración de los agentes sociales del sistema –patronal y sindicatos mayoritarios– generarán en el futuro pensionistas de primera y de segunda y son el pistoletazo de salida para la privatización del sistema", aseguran. Y es que, según denuncian, unas pensiones públicas meramente asistenciales e insuficientes serán especialmente perjudiciales para las más bajas, la mayoría, mujeres.
Escrivá, "un lobo" que quiere privatizar el sistema
Desde la Coordinadora de Pensionistas denuncian que Escrivá nunca ha ido a favor de las pensiones púbicas. "Han puesto a un lobo a cuidar de las ovejas", considera Conchita Ribera quien señala que el sistema público de pensiones "no es un fondo de negocios", sino "una de las patas del Estado de Derecho". En la misma línea se expresa Teresa Blázquez quien confirma que entre las plataformas de pensionistas nadie esperaba nada de él por su trayectoria laboral anterior. "No es una persona socialmente comprometida, pero los globos sonda que está lanzando últimamente como la polémica subida del periodo de cómputo de las pensiones a 35 años, es algo que no se puede permitir. Parece que quedarán en nada, pero ni jóvenes ni mujeres se verán beneficiados por esta medida".
Y hacen un llamamiento a los jóvenes para que se impliquen con el futuro de las pensiones. "Nosotros tenemos fecha de caducidad, los jóvenes no se pueden conformar con decir que se van a quedar sin pensiones sino que tienen que luchar por ellas, igual que hicimos nosotros durante décadas. Los que nos estamos jugando no son nuestras pensiones sino las de nuestros hijos y nietos, por lo que hay que salir a la calle para frenar las privatizaciones, luchar contra la brecha salarial y por una pensión mínima y justa".