¿Qué pasa con mi pensión de jubilación si entro en la cárcel?
Cada situación se analiza individualmente
El sistema de pensiones suele ser una de las mayores preocupaciones de los ciudadanos en España. Sin embargo, puede pasar que un pensionista esté enfrentándose a una situación legal complicada, como una condena de prisión, por lo que surge una duda importante en muchas cabezas: ¿qué ocurre con nuestra pensión si ordenan que entremos en la cárcel?
La respuesta es que no tiene por qué perderse la pensión por jubilación si se entra en la cárcel, aunque depende del caso, por lo que cada situación personal se evalúa de forma independiente.
En el año 2000 se sentó un precedente sobre el caso de un señor de 68 años que llevaba preso desde 1992 en Vigo y al que le retiraron la pensión asistencial de vejez al cabo de un tiempo en la cárcel. Además, le ordenó la Delegación Provincial de Trabajo de Ourense, ratificado por el Tribunal Superior de Justicia de Galicia, que tenía que devolver las mensualidades que había recibido en ese periodo tras su ingreso en el centro.
El motivo de esta decisión fue que consideraron que el preso ya tenía las necesidades básicas cubiertas por el Estado, por lo que no necesitaba recibir ingresos adicionales en forma de pensión.
El caso se llevó al Tribunal Supremo, que le dio la razón al pensionista y anuló la decisión de la Delegación Provincial de Trabajo de Ourense. Se argumentó que para reconocer o retirar una pensión de esa cantidad de dinero se tendría que hacer una evaluación precisa de la situación del sujeto y la atención que recibía, para indicar si están cubiertas, para proceder a la reducción o suspensión de la pensión.
Por tanto, al ingresar a la cárcel se mantendrá la pensión, aunque se iniciará una evaluación detallada de si las necesidades básicas están cubiertas. En caso afirmativo, se podrá reducir o suprimir.
