Pensiones

Reforma de las pensiones: más gasto, trucos contables y un cheque con efecto psicológico

Beatriz Torija

Jueves 15 de abril de 2021

12 minutos

Analizamos con expertos la reforma presentada por Escrivá, medida a medida

Reforma de las pensiones: más gasto, trucos contables y un cheque con efecto psicológico
Beatriz Torija

Jueves 15 de abril de 2021

12 minutos

Entre el aplauso por plantear una reforma valiente en un momento muy complicado, el reproche por lanzar globos sonda de propuestas que aún no ha planteado en la mesa del diálogo social, las dudas por la falta de concreción y cifras concretas y la crítica abierta por abundar en el gasto y no llegar al fondo del problema.

Así responden los expertos cuando les pedimos una primera valoración general del primer paquete de medidas de reforma de las pensiones presentado en la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo por el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Si hay algo claro es que José Luis Escrivá, no ha dejado indiferente a nadie.

Para valorar estas medidas orientadas a retrasar la edad media en la que se jubilan los trabajadores en España, garantizando el poder adquisitivo de los pensionistas, hemos hablado con tres de los miembros del Comité de Expertos de 65Ymás: José Antonio Herce, economista experto en pensiones y socio fundador de LoRIS (Longevity and Retirement Income Solutions); Anatolio Díez, Secretario General de la Federación de Pensionistas y Jubilados de UGT-UJP y Julián Gutiérrez, secretario general de la Federación Estatal de Pensionistas y Jubilados de CCOO. Y hemos hablado también con Ángel de la Fuente, director ejecutivo de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), José Enrique Devesa, miembro del Grupo de Investigación en Pensiones y Protección Social de la Universidad de Valencia, doctor en Economía por la Universidad de Valencia, actuario por la Universidad Complutense de Madrid y uno de los mayores expertos en pensiones de España y Emilio J. González, profesor de Economía de Comillas-Icade (@UCOMILLAS).

Indexar con el IPC, una medida simétrica

La fórmula para revalorizar las pensiones es uno de los puntos más controvertidos y que genera una mayor confrontación. La propuesta de José Luis Escrivá pasa por revalorizar las pensiones con el IPC del año anterior. Y si algún año los precios caen, la contracción no se aplicará a las pensiones, pero se compensará con las subidas de tres años posteriores salvo para las pensiones mínimas.

“Revalorizar las pensiones con el IPC va a favorecer a los pensionistas actuales” nos cuenta Enrique Devesa. “Los perdedores serán los que se jubilen en 10 o 15 años, porque esta medida va a requerir un ajuste de las pensiones para los futuros jubilados de una u otra forma”, añade.

“Hay que aplaudir que se presente este mecanismo como algo simétrico, es decir, que suban las pensiones si hay inflación, pero que bajen si el IPC es negativo”, valora José Antonio Herce (@_Herce). “Los automatismos sin simetría siempre perjudican al sistema, y esta medida beneficia a los pensionistas, pero de forma justa y con neutralidad”.

“Indexar todas las pensiones al 100% con el IPC es muy caro. Si queremos aplicarlo habría que buscar medidas compensatorias, pero de momento no están”, apunta Ángel de la Fuente. “Nadie quiere que los pensionistas pierdan poder adquisitivo. Pero en la situación actual, todos vamos a tener que arrimar un poco el hombro, incluyendo a quienes ya son pensionistas. A excepción, eso sí, de los que tienen las pensiones más bajas”.

Un borrón y cuenta nueva inaceptable

La oposición de los sindicatos es rotunda. “Nosotros no estamos de acuerdo con esa fórmula. Creemos que el IPC hay que anticiparlo con las previsiones del gobierno”, apunta Julián Gutiérrez. “Esta fórmula no ofrece capacidad de recuperar poder adquisitivo. Y nosotros seguimos arrastrando déficit en el tema de las pensiones, llevamos unos cuantos años perdiendo poder adquisitivo. No se puede hacer borrón y cuenta nueva, no se puede decir que partimos de esta fecha y lo de atrás no cuenta”, dice Anatolio Díez. "Más del 30% de los hogares de este país viven gracias a los pensionistas y los jubilados. Tener que estar ayudando a tus hijos y a tus nietos ¿eso no es perder IPC?. Y eso lo tiene que tener en cuenta el gobierno”, añade Julián Gutiérrez.

“Mi planteamiento es que no puede haber ningún pensionista con una pensión por debajo del umbral de la pobreza que marca la Unión Europea, y ahora mismo más de 5 millones de pensiones están por debajo del umbral de la pobreza y dos millones y pico en pobreza extrema. Hay que ponerse al día en las cuestiones europeas para todo”, recuerda Díez.

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El efecto psicológico del cheque para alargar la vida laboral

Respecto al cheque como incentivo monetario para quien siga trabajando más allá de la edad legal, de hasta 12.000 euros por cada año de aplazamiento o un incremento de la base reguladora de la pensión del 4%.

Puede fomentar el retraso en la edad de la jubilación, y eso está bien. El pago único puede ser también un incentivo… por la miopía de ver una cantidad importante que cobras de un golpe”, dice Enrique Devesa. Porque, si echamos cuentas, puede que no sea tan atractivo. “Nosotros lo tenemos calculado. Para que compensara retrasar un año, en lugar de un 4% (de incremento de base reguladora), aunque se cobre de una vez, debería estar alrededor de un 8%. Solo hay que ver si te jubilas anticipadamente te están descontando un 8% por año, y por demorarlo solo te pagan el 4% y el cálculo tendría que ser más similar”, explica Devesa.

“Alargar la vida laboral es una de las políticas más potentes para lograr simultáneamente la sostenibilidad de las cuentas con la mejora de las cuentas de cada pensionista. Porque, cada pensionista que se jubila más tarde, tiene más años de cotización y eso mejora su pensión”, asegura José Antonio Herce. “Si la gente trabaja más años, cotizará durante más tiempo y cobrará durante menos años la pensión” dice, en la misma línea, Ángel de la Fuente. “Ahora bien, esto saldrá a cuenta o no desde el punto de vista de la sostenibilidad del sistema dependiendo del incentivo que se ofrezca para posponer la jubilación” añade. “Si el incentivo es demasiado generoso traería más déficit” coincide Herce.

Ahora bien, con la actual tasa de paro, es inevitable desligar el debate. Para Anatolio Díaz “vamos en sentido en contrario de lo que necesita este país para que trabaje todo el mundo. No tiene lógica que con la cantidad de gente que hay en el paro, con ninguna capacidad de trabajar a corto plazo, estemos planteando alargar la vida laboral de los que están ya trabajando y han cumplido”. “La posibilidad de que las personas sigan trabajando no es ninguna cosa nueva, ya hay incentivos”, dice Julián Gutiérrez. Pero, “con un 40% de los jóvenes en paro, ¿cómo hablamos de alargar la edad de jubilación? Es un tema muy complejo que está ligado al mercado laboral. Todas las medidas tienen que ir ligadas a un mejor empleo, de calidad y salarios más dignos”.

Si estuviéramos en otra situación diferente, pues quizá sí. La jubilación es un derecho que tiene la persona, no es una obligación. Si alargar mi vida laboral va a impedir que otro comience a trabajar, pues eso no casa muy bien”, concluye Anatolio Díez.

Incentivos generosos: “hacer un pan con croasanes”

“Conseguir que la edad de jubilación aumente y se acerque a la edad legal nos parece bien, pero no parece que el potencial de ahorro sea suficiente para compensar la vuelta a la indexación de las pensiones”, explica Ángel de la Fuente. “En general, pensamos que no hay mucho margen de ahorro”.

“En España los trabajadores cuyos sueldos son bajos, que son la mayoría, con empleos precarios, que también son la mayoría, solo desean jubilarse y postergar un trabajo desagradable a muchos trabajadores les resulta insufrible”, explica José Antonio Herce. “Exigirían un incentivo tan elevado para aceptarlo, que al final pudiera suceder que, si se adopta masivamente por los trabajadores españoles, el sistema acabe haciendo un pan con croasanes”.

“En Estados Unidos esto ya se aplica”, nos cuenta Emilio González. “Son los Planes 401(K), que es el sistema público de pensiones. No tiene techo en la edad, y se incentiva la permanencia en el puesto de trabajo. No es una mala medida, porque el balance financiero siempre es positivo. Es una muy buena opción”.

“Cuando tienes una población que envejece, para los países que tenemos un sistema de reparto, la única manera de garantizar la sostenibilidad del sistema, según la OCDE, es retrasar la edad de jubilación”, dice Emilio González. “Y las medidas que propone Escrivá van en esa línea”. Pero, “¿qué trabajador subido en un andamio en una obra va a alargar la edad de jubilación?, pues ninguno porque no pueden”, recrimina Julián Gutiérrez. “Es un trabajo muy físico y no puede”.

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Jubilación forzosa, un mecanismo del pasado con un lado positivo

“En Fedea (@socialfedea) no somos nada partidarios de la jubilación forzosa y nos parece bien que se elimine. De hecho, obligar a la jubilación podría plantear problemas de inconstitucionalidad”, apunta Ángel de la Fuente.

Lo cierto es que, aunque la reforma de las pensiones va a eliminar las cláusulas de jubilación forzosa en los convenios colectivos, Escrivá ha dicho que se mantendrán en aquellos convenios que ya lo incluyen. “Entonces necesitaremos muchos años hasta se note su efecto”, confirma José Antonio Herce. “La jubilación forzosa es un mecanismo del siglo XX, no es lo que corresponde en el siglo XXI”, añade.

Ahora bien, “la parte positiva de la jubilación forzosa recogida en muchos convenios es que está ligada a nuevas incorporaciones. Y no hay que desdeñar una medida que está encaminada a generar puestos de trabajo para los jóvenes”.

La jubilación anticipada, ¿tiene los días contados?

Si algo ha dejado claro el ministro Escrivá es que pretende acabar con el retiro temprano. La anunciada reforma prevé modificar los coeficientes reductores, los recortes se aplicarán por cada mes que se anticipe el retiro y no por trimestres y se aplicarán directamente en la pensión y no en la base reguladora. “Cuanto más alta sea la penalización, mejor” asegura José Antonio Herce. “De hecho, hace años que no se ajusta el baremo y la penalizción ahora, para que fuera actuarialmente justa, debería estar entre el 9 y el 10%”

Julián Gutiérrez, sin embargo, recuerda que no es cierto esa idea que se intenta generalizar de que en España nos jubilamos muy pronto. “La edad real de jubilación es superior a los 64 años y eso está en la media de la Unión Europea. También nos dicen que aquí nos jubilamos con un 75% de lo que has cotizado y en otros países como Alemania es menos… pero, ¿acaso se pueden comparar los salarios de España y los de Alemania?”.

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Gastos ¿impropios?

La estrategia de eliminar el déficit de la Seguridad Social liberándola de los gastos que no le corresponden, los denominados gastos impropios, genera muchas dudas y susceptibilidades entre los expertos. “Es una jugada contable. Eso de los gastos impropios es un invento, pero que a los investigadores no nos deja nada tranquilos. Porque es enmascarar el problema y no afrontar la verdadera situación de cómo está el sistema”, asegura Enrique Devesa. “En realidad lo que se hace es cambiar el agujero de sitio”, apunta Ángel de la Fuente. “Ni la mitad de lo que el gobierno considera que son gastos impropios se justifica”, añade José Antonio Herce. Además, “es un elemento que se agota en muy pocos años con la deriva que lleva el déficit”.

“Pensamos que esto es mala idea porque crea la apariencia de que el sistema de pensiones per se no tiene problemas y por lo tanto aumentará la presión para que el sistema sea más generoso o para no hacer los cambios necesarios para moderar el crecimiento de su gasto”, apunta de la Fuente. “Lo que necesitamos de verdad es que la Seguridad Social siga generando ingresos con puestos de trabajo nuevos y de calidad, que supongan una cotización importante. No sirve con sacar los gastos impropios, y con eso las cosas ya quedan equilibradas”, apunta Anatolio Díez.

Sobre el autor:

Beatriz Torija

Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.

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