El debate sobre la reforma de las bajas médicas se encuentra en una fase "muy inicial", abierto a expertos y otros ministerios que puedan participar, según ha asegurado este lunes la ministra de Inclusión y Seguridad Social, Elma Saiz, el mismo día en que el Ministerio reunía por primera vez a los agentes sociales, en la mesa de diálogo que va a negociar los cambios en la incapacidad temporal (IT), en virtud el último acuerdo de pensiones, firmado con patronal y sindicatos el pasado 18 de septiembre.
"Se trata de analizar y escuchar las diferentes propuestas para esta posibilidad de reincorporación progresiva (al puesto de trabajo desde una baja laboral), pero siempre protegiendo la salud", ha reiterado la ministra, tras afirmar que el análisis de esa posibilidad cuenta con el apoyo de diferentes asociaciones, como la Asociación Española contra el Cáncer y otras relacionadas con la salud mental. Saiz ha apostado por evaluar esta medida, pese a que desde Sumar, socio del Gobierno, o la propia ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se han declarado del todo en contra.
Por su parte, el secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez Corujo,quien ha presidido la mesa de diálogo este lunes, ha remachado los 3 principios que guían la acción del Ministerio en esta negociación: "en primer lugar, garantía de la salud de los trabajadores, en segundo lugar, respeto esencial a la extensión de derechos, y en tercer lugar, que esta mejora de la salud se debe proyectar en una mejoría de la acción protectora por incapacidad".
Para Suárez, no hay duda de que favorecer una reincorporación gradual al empleo es compatible y redundará en un aumento de derechos de los trabajadores, y alude a que 13 países de la UE tienen "algún modelo" de este tipo de bajas, como los escandinavos o Francia.
UGT y CCOO piden priorizar temas que van con retraso
Aunque el Ministerio recalca que su propuesta de baja laboral flexible no busca "de ninguna manera" ahorrar dinero a la Seguridad Social por el alto gasto en incapacidad temporal, las suspicacias están a la orden del día.
CCOO y UGT, miembros de la mesa de diálogo celebrada este lunes, han reiterado su rechazo a la medida de las bajas flexibles anunciada por Seguridad Social, a pesar de que "no se ha precisado ninguna propuesta concreta" en la mesa de este lunes.
"Hemos rechazado plenamente el concepto de bajas flexibles, tanto asociaciones sindicales como empresariales", ha asegurado Carlos Bravo, secretario de Políticas Públicas y Protección Social de CCOO. Por su lado, la secretaria de Política Institucional y Políticas Territoriales de UGT, Cristina Estévez, ha indicado que se ha producido un cambio de tono en el Ministerio sobre las bajas flexibles y ya se habla de "altas". "Se ha producido realmente una alarma social que hemos vivido todos con este tema".
Ni CCOO ni UGT ven necesario, ni mucho menos prioritario, negociar unas bajas médicas flexibles, lo que sí reclaman al Gobierno es que aborde las materias comprometidas en la última reforma que pactaron, y que ya van con retraso. Ambos sindicatos han pedido a Seguridad Social discreción en las negociaciones para reformar la Incapacidad Temporal, en las que seguirán participando, pero han reiterado su rechazo a las bajas flexibles.
Desde CCOO resaltan que el objetivo tiene que ser introducir propuestas que contribuyan a la mejor recuperación de la salud de las personas que sufren un accidente o una enfermedad", asegura Carlos Bravo, quien ha indicado que el Ministerio ha trasladado su preocupación sobre el aumento del gasto de la incapacidad temporal, algo que desde el sindicato achacan al envejecimiento de la población ocupada.
Del mismo modo, UGT reclama al Gobierno centrarse en el origen de las bajas, con el objetivo de prevenir "mucho más y mejor" y hacer hincapié en el diagnóstico, tratamiento y curación para que las personas reciban toda la atención a la que tienen derecho. "Cualquier propuesta sobre el estado de salud de la persona trabajadora debe partir de los servicios públicos de salud y su debate debe comenzar por la asistencia sanitaria y los plazos que en la sanidad pública se dan para el diagnóstico, tratamiento y la recuperación total del paciente".
A juicio de Cristina Estévez, las primeras declaraciones de la ministra Elma Saiz sobre bajas flexibles dejaban "al albur" que los trabajadores se puedan sentir presionados "para volver al puesto de trabajo, que era lo que iba a ocurrir", y ha asegurado que si el Ministerio de Seguridad Social va en la línea de reincorporación progresiva tras una baja laboral, se opondrán. "Es una aberración y lucharíamos contra todo", ha subrayado.
CEOE pide analizar el efecto del absentismo
En cuanto a la postura de la patronal CEOE, ha trascendido que las organizaciones empresariales seguirán trabajando por la mejora de la salud de las personas trabajadoras y la gestión de los procesos de IT, "con discreción y confidencialidad".
Hace unos días, su presidente, Antonio Garamendi, consideraba "positivo" que la ministra Elma Saiz quisiera hablar de cómo flexibilizar la reincorporación de un trabajador en situación de baja médica. Para Garamendi, el planteamiento va en línea con lo planteado en el Acuerdo Nacional de Convenios y en el acuerdo de pensiones firmado con el Gobierno, donde se incidía en la necesidad de trabajar en "lo que son las bajas y todo el efecto del absentismo".
"Es algo que en ciertos espacios tiene sentido, partiendo de la base, primero de la voluntariedad, y dos, de los casos donde se pueda hacer", dijo hace unos días el dirigente empresarial, asegurando entender al Ministerio; "ver cómo se pueden gestionar mejor las cosas, de alguna manera flexible".
Sobre el autor:
Pepa Montero
Pepa Montero es redactora especializada en temas de economía. Ha trabajado en medios como El Economista y La Gaceta de los Negocios. Es autora del libro de relatos La casa de las palmeras (Azul como la Naranja, 2013).