Los planes de pensiones de empleo (PPE) abren la posibilidad de contribuir a nuestra pensión futura y complementar la pensión pública a través de nuestra empresa. Aún no están demasiado extendidos en nuestro país, pero el Gobierno está empeñado en que se desarrollen. De hecho, a partir de este año 2021 el ahorro privado individual está limitado a unas aportaciones máximas de 2.000 euros con derecho a deducción (desde los 8.000 anteriores). Sin embargo, se dan nuevos incentivos a los planes de empresa.
¿Qué son exactamente los planes de pensiones de empleo (PPE)?
Un Plan de Pensiones de Empleo (PPE) es un fondo de pensiones que las empresas y las administraciones públicas promueven internamente para sus trabajadores. Con los últimos cambios introducidos en los presupuestos Generales del Estado, su fiscalidad ahora mismo es más favorable que los planes de pensiones del sistema individual. Además, generalmente, sus comisiones también son más bajas.
Las grandes empresas (bancos, multinacionales…) y algunos organismos públicos (como los ayuntamientos) son los principales promotores de esta modalidad de ahorro complementario, lo que explica que no haya tenido hasta el momento un gran arraigo, ya que el tejido empresarial español está compuesto mayoritariamente por pequeñas y medianas empresas.
¿Cómo se refleja el plan de pensiones en la nómina?
El encargado de hacer las aportaciones al plan de pensiones, en este caso, es la empresa. Por tanto, será ella quien presente a la Agencia Tributaria una declaración anual en la que quede especificado el número de empleados partícipes del plan de pensiones y el importe de sus aportaciones. De manera que, cuando cada uno de los trabajadores presente su declaración de la Renta, Hacienda ya contará con todos los datos.
Cabe destacar que las aportaciones que haga la empresa al fondo de pensiones se consideran retribución en especie para los trabajadores, por lo que deben aparecer reflejadas en la nómina. Al considerarse parte del salario del trabajador integran la base de cotización a la Seguridad Social, de acuerdo con el artículo 147.1 de la LGSS y el artículo 23.1 de Reglamento General sobre Cotización.
Los modelos de nóminas y certificados específicos de cada empresa pueden ser algo diferentes pero los importante es el epígrafe: “Retribuciones o salarios en especie”,explica Bankinter en su blog de economía y finanzas personales. Ahora bien, como la retribución en especie puede incluir otros conceptos, como por ejemplo seguros o cheques restaurante, es importante que queden especificados como “contribución de la empresa a Planes de pensiones”. A su vez, además de la nómina, deberá aparecer en el certificado de ingresos y retenciones, al que debemos estar atentos para conocer las aportaciones que ha hecho la empresa, y que darán lugar a nuestros derechos patrimoniales del plan de pensiones.
Cabe destacar también que la retribución en especie no puede superar el 30% del total de la nómina.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.