¿Por qué sube el precio de la luz?

La factura de la luz nos preocupa a todos como consumidores. Lo primero, porque es un bien de primera necesidad; y lo segundo, porque descifrar la factura de la luz es complicado. Vamos a ver qué factores influyen en la subida del precio de la luz, aunque primero vamos a comenzar por las dos formas en las que se comercializa la luz en nuestro país: mercado libre o mercado regulado.

En el mercado libre, la luz tiene un precio estable y se paga en función de la tarifa que marca la comercializadora en el contrato. Las empresas que comercializan la luz nos pueden ofrecer distintos tipos de tarifas para elegir la que mejor se adapte a nuestras necesidades de consumo.

Sin embargo, en el mercado regulado, el precio de la luz es distinto cada hora de cada día y está establecido por la ley de la oferta y la demanda y lo publica la Red Eléctrica de España. Este mercado ofrece la tarifa del Precio Voluntario del Pequeño Consumidor o PVPC, destinadas para usuarios con potencias contratadas inferiores a 10 kW.

El precio del kWh de energía eléctrica depende del mercado energético donde se comercialice. El precio de la luz se obtiene a través del mercado mayorista, que establece la referencia tanto para que el Gobierno fije el precio de la electricidad como para que las comercializadoras pueda establecer sus propias tarifas.

¿Qué factores influyen en el precio de la luz?

Vamos a comenzar por los factores ambientales. Porque las condiciones climáticas influyen directamente en nuestra factura de la luz. Cuando hace mucho frío, o mucho claro, aumenta la demanda de energía eléctrica por el uso de calefacciones o aires acondicionados. Esto hace aumentar la demanda, por tanto, aumenta el precio.

Sucede lo mismo por la falta de agua o de viento, ya que las energías alternativas producen menos y hay que recurrir a otras fuentes de energía más caras que encarecen la factura al consumidor.

Las políticas energéticas del gobierno influyen en la factura. Hay una parte fija (los peajes o cargos), que regula el Gobierno a través de la Ley, la igual que las primas a las energías renovables, por ejemplo.

Los mercados internacionales de materias primas también afectan a nuestra factura de la luz. Un conflicto internacional o una mayor demanda de una materia prima en concreto puede hacer aumentar el precio final de la energía. Lo hemos visto con el accidente de un buque en el Canal de Suez. Durante unos días no podían circular los buques petroleros, lo que hizo aumentar el precio de las gasolinas.