Trabajadores de la central térmica de Endesa en As Pontes (Lugo) se concentraron el miércoles ante el Congreso, junto a vecinos y políticos locales y diputados gallegos, para reclamar una solución ante la amenaza de cierre de esta instalación, que tiene paralizada su actividad desde abril.
"Lo único que pido es que nos dejen trabajar. Tenemos alternativas suficientes. Nos queremos descarbonizar como todo el mundo", explicaba el presidente del comité de empresa de la central, Luis Varela.
"Encima de la mesa hemos puesto el remedio. Simplemente, que lo estudien", manifestó Varela, indicando que técnicos ajenos a la empresa y del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), adscrito al Ministerio para la Transición Ecológica, van a realizar pruebas en los próximos días para evaluar su viabilidad. "Si es así, paz y gloria. Si no, no sé lo que pasará", ha apostillado.
Marcos Prieto, vicepresidente del comité, mostró su optimismo al respecto de esta posibilidad: "Tenemos confianza plena de que los resultados van a ser satisfactorios", dijo, explicando que esta vía permitiría un 40% de sustitución del carbón.
Además de trabajadores de la propia central, a Madrid acudieron trabajadores de empresas auxiliares, transportistas de carbón que, debido al parón de actividad, no han podido trabajar durante este período, y también vecinos. "Todos vivimos de esto. Comercios, restaurantes, bares, librerías... Hoy As Pontes es un pueblo vacío porque la responsabilidad de la gente es máxima. Todos estamos aquí", celebraron.
