Ignacio Casanueva
Ignacio Casanueva es redactor especializado en temas de tecnología y salud.
… saber más sobre el autorNo hay que irse muy lejos de nuestras fronteras para disfrutar de placeres para la vista, el gusto y el olfato. A escasos 80 kilómetros de Cuenca, en pleno corazón de la península podemos encontrar un lugar donde el lujo tiene un nuevo embajador: la bodega Aurumred.
Aurumred no es una bodega con siglos de historia como pueden ser las famosas firmas francesas Château Lafite, Château d'Yquem o Domaine de La Romanée-Conti. Con sus menos de 15 años de andadura, estos vinos de Las Pedroñeras han conseguido despertar fascinación en el mercado y lograr consenso entre destacados sumilleres nacionales e internacionales.
Detrás de este éxito se encuentra Hilario García, economista y asesor de empresas que descubrió las cualidades de la ozonoterapia cuando le diagnosticaron una estenosis del canal de la médula. Tras una recuperación casi milagrosa, comenzó a investigar las posibilidades que se abrían con el uso del ozono hasta darse cuenta de que las viñas que heredó de sus abuelos podían beneficiarse de este elemento.
Años de investigación constante han hecho que García haya incorporado diferentes técnicas para conseguir que sus viñedos no dependan de añadidos ni de químicos, logrando un producto totalmente natural. Entre esos métodos destaca el mezclar ozono en el agua de regadío con la que se elimina las bacterias y hongos que afectan a la planta y le impiden desarrollarse al 100%. A su vez, tal y como reflejan en su página web, cada planta recibe ionización aérea, energía piramidal, equilibrio de la tierra, intercambio iónico… así hasta 100 técnicas. Unos cuidados de lujo para un vino a su nivel.
El resultado es una bebida que como apuntan desde la bodega “no se avinagra con el paso de los meses. Con abrir una botella de su vino tinto, beber y dejarla con el corcho un poco puesto, podremos comprobarlo”. Quienes prueban este líquido comprobarán su finura y elegancia, con esencias de brevas y pan de higo, así como unas notas de frutas, cassis y cacao.
La producción de la bodega se divide en 3 series: AurumRed White, AurumRed Silver y AurumRed Gold.
Esta última, AurumRed Gold, se caracteriza por tener una producción muy escasa, de apenas 300 botellas al año de las cuales se ponen a la venta la mitad. Esta escasez es lo que atrae al mercado del lujo y marca su valor. Un precio que varía dependiendo del año y la producción, alcanzando los 17.000€ y los 25.000€, sobre todo en el mercado chino y estadounidense.
Estos precios reflejan, para Hilario García, los deseos de quienes deciden tener un vino en sus manos que les aporte sensaciones que ningún otro lo hará.
Unas sensaciones que desde hace pocos años han dado un salto más, al mezclar vino y arte en una edición especial. De la mano del artista español Alberto Rodriguez Serrano, único artista junto a Miguel Ángel en exponer en la Accademia di Belle Arti di Firenze, la bodega ha lanzado una botella que será la primera de una serie para la que ya se está trabajando con doce de los mejores artistas contemporáneos del mundo. Este producto contiene 16 litros de la edición Gold y ya ha alcanzado los 340.000 euros en una subasta que todavía no ha sido cerrada. En declaraciones de Hilario García, "esta botella es la primera, pero habrá más. El vino cabrá en todo tipo de manifestaciones artísticas".
Aurumred es un claro ejemplo de los resultados cuando el trabajo es una pasión. La investigación constante y la mejora en las técnicas, el mimo y el cuidado en cada detalle del proceso y la pasión por mejorar un producto que genere sensaciones únicas son las claves para que el lujo haya encontrado un nuevo lugar en un pequeño pueblo de Castilla-La Mancha.