Álvarez (UGT): "La Seguridad Social no está lista para discriminar edad de jubilación por profesión"

Pepe Álvarez (UGT): “El destope de las pensiones conlleva que suban las máximas, es lo justo"

Desde sus 65 años y con gran experiencia en el sector industrial catalán, el secretario general del sindicato UGT (@UGT_Comunica) Pepe Álvarez (Belmonte de Miranda, Asturias) comparte con 65Ymás su visión sobre el debate del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá de trabajar más años, señalando "que no es el momento de plantearlo" y que la Administración no está preparada para tener en cuanta las diferencias entre sectores.  

Respecto a EREs y el talento sénior, defiende que los sindicatos están en una posición complicada de negociación y critica a las entidades financieras que ha decidido prescindir del talento sénior. También vierte su opinión sobre otros de los asuntos sociales más candentes, como la creciente factura de la luz, sobre la que considera que "hay solución" y las pensiones de viudedad. 

FERNANDO ÓNEGA.–​ Hablábamos de la polémica de Escrivá de trabajar más años. ¿Tiene usted la sensación de que este país no aprovecha debidamente la experiencia y la sabiduría de los mayores?

PEPE ÁLVAREZ.–​ Con toda seguridad. Este es un tema que llevo viendo, no ahora, que tengo una edad, ya ocurría siendo yo mucho más joven... Yo trabajé en una fábrica que hizo prejubilaciones anticipadas y luego he podido ver a esa gente que ha salido de esas jubilaciones anticipadas y han acabado dando clases por horas o con trabajos voluntarios… Seguramente aquí entraría el otro elemento, que es si algún día vamos a poder hacer la jubilación a media jornada, o un cuarto de jornada, que sería otra de las cuestiones que yo creo en el fondo vamos a poder tratar en el futuro. 

F. Ó.–​​ ¿Le parece oportuno el momento de plantear el aumento de la jubilación?

P. Á.– El debate – el de Escrivá sobre trabajar más años– no se pueden hacer cuando hay una mesa de negociación abierta. Porque la sociedad no está madura para hacerlo mañana. Los sistemas informáticos de la Seguridad Social no están preparados para poder discriminar quién ha trabajado en una profesión y quién en otra… En todo caso eso es un debate que tiene mucho interés, y que seguramente, más allá del trabajo de cada uno, la sociedad tiene que encontrar canales para que las personas que se jubilan, ya no digo las que lo hacen de manera anticipada voluntaria obligatoria, porque hay muchas que se jubilan voluntariamente pero que se les invita a hacerlo, puedan continuar prestando servicios a la sociedad. 

"Hay muchas personas que se jubilan voluntariamente pero que se les invita a hacerlo"

F. Ó.–​ En este sentido, están los ERE de las empresas. ¿Esto es un problema irresoluble? ¿Que tengan que estar castigando a gente muy válida a irse al paro? Es una situación que a mi me parece terrible.... Es decir, expulsar del mercado laboral a una persona de 55 años, que a lo mejor tiene hijos a su cargo, que a lo mejor está pagando una hipoteca, y que tiene todas las dificultades del mundo para emplearse y que no tiene acceso a una pensión. Eso, ¿no clama al cielo?

P. Á.– A mí me parece que esta cuestión, tiene mucho que ver con la reforma laboral también. Estos EREs que hemos visto de tres entidades financieras, con la legislación de antes de 2012, tampoco se podrían haber hecho en la medida que se han hecho. Nosotros ahora con esta legislación tenemos dos opciones: negociarlo con las mejores condiciones para los trabajadores o los trabajadores pierden esas mejores condiciones y que entre una vía nueva jurídica que en el mejor de los casos dentro de 3, 4 años, el Supremo situará la última sentencia y en ese momento, ya no habrá ninguna posibilidad de hacer nada. 

Por eso nos obliga a negociarlos y muchos de ellos salen con un acuerdo. Pero claro, es acuerdo sí o sí. No tenemos una alternativa para no hacerlo. A mi me parece que las entidades financieras han hecho un mal favor a este país. Es decir, un país que ha puesto 60.000 millones de euros en manos del sistema financiero hace 10 años, un país que ha sido capaz de endeudarse más del 100% como consecuencia de ese crédito que no van a retornar las entidades financieras...

F. Ó.–​ ¿A qué se refiere exactamente?

P. Á.– A que a cambio de eso lo que recibe de las entidades bancarias son dos cuestiones a cual peor. Una, dejar una parte del país sin entidades financieras físicas, con lo cual están dejando a una parte de la ciudadanía sin que pueda ir a una oficina a una distancia razonable, contribuyendo a que la España Vaciada sea más vaciada todavía; y una segunda cuestión que es librarse de una serie de personas que en muchos casos que su puesto de trabajo van a ser ocupados por subcontratas del propio banco de unas de estas empresas de trabajos integrales. Eso sí, con un 30% de los salarios que tenían los anteriores empleados.

 "A mi me parece que esta cuestión, tiene mucho que ver con la reforma laboral también"

F. Ó.– Podríamos estar hablando infinitamente con usted señor Álvarez. Entrar por ejemplo, en el tema de las pensiones mínimas, de las pensiones de viudedad, simplemente saber su criterio. Si me da simplemente una opinión, pequeña sobre: Pensión de viudedad ¿Hay que reformarlas sí o no?

P. Á.– Las pensiones de viudedad en nuestro país, forman parte de uno de los elementos básicos de sustento de la sociedad. Nosotros no queremos que salgan del sistema de pensiones como hay quien reclama. Sacarlas del sistema de pensiones quiere decir sacarlas de la revisión permanente del concepto de pensiones. No vamos a permitir que este sea un colectivo que quede marginado.

Y tenemos que conseguir que las viudas y los viudos, pero fundamentalmente las viudas, tenga una pensión digna para poder vivir. Por tanto, seguramente no hay que hablar tanto de tantos por ciento, pero sí elevar la cuantía mínima de las pensiones de viudedad. Porque cuando falta uno, los gastos no se reducen a la mitad, todo el mundo lo sabe. 

"Tenemos que conseguir que las viudas tengan una pensión digna para poder vivir"

F. Ó.– Una última cuestión para cerrar el diálogo. ¿Le da miedo a usted lo que está pasando? Pienso en el recibo de la luz, el recibo del gas, ir al surtidor de gasolina… ¿Qué nos está pasando? ¿Qué piensa un sindicalista qué podemos hacer?

P. Á.–  Me da miedo sobre todo, viendo la imagen de Gran Bretaña, la insolidaridad, el no ser capaces de abordar estos temas de manera común. El egoísmo, estas sociedades de 'sálvese quien pueda', que en parte no la hemos llegado a ver, pero que en parte también durante la pandemia podría haber llegado a haber entre países. Qué si los respiradores no salen de Turquía, que qué malos son los turcos… Es decir, esta situación de escasez y de pelea por lo que hay, a mi me parece realmente tremendo. 

El precio de la luz a mi me parece que tiene solución. No es verdad que no tenga solución. Hay que tomar medidas de fondo, es decir, el mercado es evidente que no se regula por sí mismo. El mercado lo que va es a tener más y más beneficios, sin mirar quién queda atrás. Y el estado tiene que tener capacidad de intervenir. Llámese Estado en el caso de Europa, los estados nación, o llámese Unión Europea. Pero la protección de los ciudadanos es el elemento que nos tiene que dar seguridad y ese es el elemento que tiene que venir del conjunto. Y el conjunto, es el Estado.

"No es verdad que el precio de la luz no tenga solución"