65ymás
El frío, la nieve y el hielo comienzan a hacer acto de presencia en España. Estas condiciones meteorológicas adversas convierten las carreteras en un peligro. Pero, de la misma forma que se puede conducir con niebla o lluvia, también es posible hacerlo con hielo sin que el coche se salga de la carretera. Basta con seguir algunos consejos básicos.
En este sentido, la Guardia Civil, a través de un mensaje en las redes sociales, ha señalado que es fundamental en estos casos usar las marchas largas, circular siempre a menos de 40 kilómetros por hora, aumentar la distancia de seguridad con el coche que va delante de nosotros y frenar suavemente.
Si tienes que conducir con riesgo de hielo en la calzada ❄️ no olvides estos consejos: ⬇
— Guardia Civil ?? (@guardiacivil) January 7, 2021
?Usa marchas LARGAS
?Siempre a ➖ de 40 km/h
?Aumenta ⏫ la distancia de seguridad
?Frena suavemente
?No olvides ? #SeguridadVial #ViajeSeguro pic.twitter.com/IUVkxf7q8w
Los primeros copos hacen la calzada muy deslizante y a medida que se acumula, las dificultades aumentan y no podrá circular sin las cadenas; además de reducir la visibilidad, la nieve también tapa las señales y las marcas viales y puede producir sensación de mareo. La Dirección General de Tráfico (DGT) también ofrece una serie de recomendaciones por si no tenemos más remedio que conducir con estas condiciones:
- Circula con el alumbrado de cruce.
- Modera la velocidad y aumenta la distancia de seguridad.
- No salgas de las rodadas de otros vehículos.
- Utiliza el volante, el acelerador y el freno con suavidad.
- No aceleres al iniciar la marcha, solo suelta suavemente el pie del acelerador.
- Circula con marchas largas para no patinar.
Hielo: el peligro invisible
La adherencia sobre el hielo es mucho más crítica que sobre la nieve, recuerda la DGT, por lo que conviene prestar atención a las zonas donde es más habitual, como lugares sombreados, resguardos orientados al norte y puentes sobre ríos. También hay que tener en cuenta que, al derretirse la nieve, el agua que se desliza por el asfalto en las zonas peraltadas puede helarse al caer la noche.
Si se dan estas condiciones de adherencia mínima, reduce la velocidad y extrema la suavidad para manejar el volante o pisar los pedales de freno y acelerador. Cuando la temperatura exterior baje a tres grados centígrados mantente alerta y desconfía porque podría haber placas de hielo aunque la temperatura esté por encima de 0º. En caso que pisar una placa de hielo, suelta suavemente el acelerador y gire despacio el volante; y si has de frenar, hazlo también con suavidad (salvo que lleves ABS) para no bloquear las ruedas.
Los 4 niveles de dificultad de la nieve
Según el estado de la vía y las condiciones del tráfico, la DGT establece cuatro niveles de dificultad:
Verde: comienza a nevar.
Prohibido pasar de 100 km/h en autopistas y autovías y de 80 km/h en el resto de vías. Los camiones deben circular por el carril derecho y tienen prohibido adelantar. Evite los puertos de montaña.
Amarillo: calzada parcialmente cubierta.
Prohibida la circulación a los camiones. Los turismos y autobuses no deben pasar de 60 km/h. Evite maniobras bruscas. En curvas y descensos, disminuya más la velocidad.
Rojo: carretera cubierta.
Prohibido circular a vehículos articulados, camiones y autobuses. Circulación permitida solo con cadenas o neumáticos de invierno. No rebase a los vehículos inmovilizada.
Negro: prohibida la circulación.
Riesgo de quedarse inmovilizado. Si se queda bloqueado, utilice la calefacción y no abandone el vehículo si no hay refugio. Para no obstaculizar, inmovilice su vehículo lo más orillado posible.
Cadenas y neumáticos de invierno
Existen distintos tipos de cadenas para rodar con seguridad sobre nieve. Elige las tuyas y llévalas siempre en el coche para no quedarte 'tirado'.
Cadenas metálicas. Son duraderas y eficaces, aunque ruidosas. Su montaje en condiciones de frío y humedad puede ser difícil (ver recuadro). Son las más duraderas y las más utilizadas.
Cadenas semiautomáticas. Son las más costosas, pero muy eficientes. Se puede circular todo el invierno con el soporte instalado en la llanta y, de ser necesario, las cadenas se acoplan con rapidez.
Fundas textiles. Son de muy fácil montaje, ocupan poco espacio y son muy eficientes.
Neumáticos de invierno. La mejor opción si vive en zonas con abundante lluvia y temperaturas por debajo de 10º. Se agarran mejor, frenan antes pero son hasta un 15% más caros que los convencionales. Sustituyen a las cadenas.