El radar es el sistema que utiliza la Dirección General de Tráfico (DGT) para detectar los excesos de velocidad de los vehículos y multar a los conductores por no respetar los límites establecidos.
En España, según los últimos datos publicados por el organismo en 2022, hay 780 radares fijos, 1.325 radares móviles y 92 radares de tramo repartidos por toda España, aunque su objetivo es seguir ampliando estas cifras en los últimos años, según explican desde la página web de RACE.
Las cámaras de los radares graban de manera continua la circulación, y son capaces de identificar la matrícula de cada vehículo a la entrada y salida del tramo, y calcula la velocidad media del mismo.
A estos dispositivos que ya conocemos, hay que añadir uno nuevo: las nuevas pistolas radar, que tal y como han explicado su funcionamiento es muy parecido a los radares Velolaser.
La pistola radar TruCAM II no es nueva y ya se utiliza en otros países para medir la velocidad de los automóviles. Lo bueno de este dispositivo es que tiene la capacidad para detectar la velocidad de dispositivos que se encuentran hasta 1,2 kilómetros de distancia, aunque funcionan mejor en distancias cortas: desde los 14 metros a los 150 metros.
Otro de sus puntos fuertes, es que tiene una autonomía de 8 horas, cuenta con enfoque automático, puede detectar imágenes por noche y registra velocidades de 320 kilómetros por hora.
El radar Velolaser
El radar Velolaser de la Dirección General de Tráfico (DGT) se ha ganado el adjetivo de invisible porque, a pesar de estar por todas partes, es muy difícil de percibir.
Estos pequeños aparatos móviles, que apenas miden medio metro y pesan dos kilos, se suelen colocar en carreteras convencionales, donde el máximo de velocidad son de 90 km/hen las vías con un carril por sentido, y en las que tienen más de un carril y no se puede circular a más de 100 km/h.
Estos radares pueden operar colocados sobre un vehículo (en el salpicadero de un coche o en el asiento de una moto) o en un trípode. Además, la DGT suele situarlos en pórticos, o guardarraíles, donde son prácticamente imperceptibles, porque además no tienen por qué estar señalizados.
Otra de sus características es que su batería dura casi cinco horas y se pueden controlar por wifi.
En España hay unas 60 unidades repartidas a lo largo del territorio nacional desde que se comenzaron a probar en 2018, y actualmente funcionan en algunos tramos de la A-6 de A Coruña, la A-5 de Madrid o en Sant Boi de Llobregat (Barcelona). No obstante, al tratarse de radares móviles, hay que tener presente que su ubicación puede cambiar
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.