Las multas que te puede poner la DGT como pasajero en un coche

Estamos acostumbrados a pensar que una multa de tráfico siempre recae sobre los conductores. Sin embargo, eso no es así. Los pasajeros que van dentro del coche no están exentos a recibir algún tipo de sanción por parte de la Dirección General de Tráfico (DGT).

Las multas más comunes suelen estar relacionadas con el exceso de velocidad, comportamientos inadecuados frente al volante, ingresar a una Zona de Bajas Emisiones (ZBE), entre otras. Existen otras también que caen sobre los que no lleven el volante.

Cualquier ocupante de la vía, considerado por el Reglamento General de Circulación como ‘usuarios de la vía’, deben cumplir con ciertas normas para evitar multas que pueden llegar hasta los 500 euros.

Comportamientos sancionables de los pasajeros

Existen ciertas faltas que cometen los ocupantes del vehículo que pueden acarrear una sanción. El hecho de estar en el coche con una mala postura puede ser motivo de una multa de entre 80 y 100 euros. Poner los pies en el salpicadero o sacar el cuerpo por la ventanilla puede ser motivo para ser sancionado.

Es importante destacar que esta falta también puede recaer sobre el conductor, si las autoridades consideran que no se cumple con el artículo 18, y considera que la mala postura afecta el campo de visión de la persona que conduce. “Está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción que garanticen su propia seguridad, la del resto de los ocupantes del vehículo y la de los demás usuarios de la vía”, indica la norma.

Otra de las razones principales por la que un pasajero puede recibir una multa es por no utilizar el cinturón de seguridad. En este caso, la sanción es de 200 euros. En caso sea el conductor el que no cumpla esta regla, a la multa se le agregará la pérdida de cuatro puntos en el carnet de conducir.

La diferencia entre las sanciones a los conductores y a los pasajeros es que, la que reciben los que no llevan el control del volante, son multas económicas, mientras que la de los conductores implican dinero y pérdida de puntos.

Una infracción considerada como ‘muy grave’ para los pasajeros es tirar basura a la vía. Esta falta supone una multa de 500 euros, y si el infractor es el conductor, se le agrega la pérdida de 6 puntos del carnet de conducir.